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Columnista - 21 diciembre, 2020

Carta abierta al alcalde de Valledupar, Mello Castro

Con el ánimo de contribuir al desarrollo sostenible, ambiental y financiero en la gestión de suelos de este municipio, y como siempre lo he hecho, socializando con las Administraciones públicas el álgido tema del ordenamiento del territorio, le propongo en ocasión de esta fatal pandemia seguir los ejemplos de municipios que han aplicado estrategias de […]

Con el ánimo de contribuir al desarrollo sostenible, ambiental y financiero en la gestión de suelos de este municipio, y como siempre lo he hecho, socializando con las Administraciones públicas el álgido tema del ordenamiento del territorio, le propongo en ocasión de esta fatal pandemia seguir los ejemplos de municipios que han aplicado estrategias de planeación moderna para promover nuevos retos, con el fin de no detener la inserción de obras de interés general en sus planes de desarrollo, como la han hecho los municipios de Manizales, Pereira, Medellín y otros, que han considerado que durante las calamidades también se puede y se debe trabajar asumiendo nuevos compromisos.

La intención de incorporación de nuevas ideas para cambiar las malas decisiones de gobiernos anteriores que tienen colapsada la economía de un municipio que estadísticamente se encuentra en el tercer puesto de los entes territoriales más pobres del país, me lleva a solicitarle, por este medio, la atención urgente que el caso amerita, para acometer la revisión virtual del primer periodo de vencimiento del POT vigente, sobre las normas de corto y mediano plazo, para habilitar nuevas disposiciones, derogar normas perjudiciales y recuperar aquellas que eran beneficiosas para el municipio y que fueron abolidas inexplicablemente.

De otro ángulo vale la pena informarle que por otros medios me he dirigido a su señoría, para que su Administración cambie de actitud ante las modificaciones de este POT, que en nada colabora para atraer inversionistas industriales, comerciales, de construcción de viviendas y parcelaciones campestres, pero ha guardado silencio y no se ha pronunciado oficialmente sobre su determinación al respecto, como debería hacerlo, porque es a usted, y ahora a quien corresponde adelantar estas urgentes gestiones que están minando el proceso constructivo de este territorio.

Desconfiado como lo soy y he sido, por la respuesta negativa soslayada de los mandatarios anteriores en aprobar estas peticiones por falta de voluntad política de sus asesores, que aunque es una decisión contraria a los deseos gremiales continúan con su indolencia a las innumerables quejas, tengo la leve esperanza que usted reflexionará y apoyará esta gestión de revisión virtual en atención a las nuevas reglamentaciones de los decretos 2106 de 2019 , este referido a la fase electrónica que deben implementar los entes territoriales, y al nuevo decreto 1232 de 2020, que simplifica estos métodos, resumiendo los procedimientos y acelerando los plazos de ejecución.

Considerando que el saneamiento de la calamidad demorará mucho tiempo en ocurrir y debido a la parálisis de los actos administrativos que muchos municipios han optado por sostener, le invito a reiniciar actividades y a utilizar la tecnología y el recurso humano de Valledupar para acometer esta y otras obras importantísimas para nuestras comunidades en claro respeto por el derecho colectivo de tener una norma justa para las edificaciones, en concordancia con el literal M del decreto de acciones populares.

Columnista
21 diciembre, 2020

Carta abierta al alcalde de Valledupar, Mello Castro

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Augusto Enrique Orozco Sanchez

Con el ánimo de contribuir al desarrollo sostenible, ambiental y financiero en la gestión de suelos de este municipio, y como siempre lo he hecho, socializando con las Administraciones públicas el álgido tema del ordenamiento del territorio, le propongo en ocasión de esta fatal pandemia seguir los ejemplos de municipios que han aplicado estrategias de […]


Con el ánimo de contribuir al desarrollo sostenible, ambiental y financiero en la gestión de suelos de este municipio, y como siempre lo he hecho, socializando con las Administraciones públicas el álgido tema del ordenamiento del territorio, le propongo en ocasión de esta fatal pandemia seguir los ejemplos de municipios que han aplicado estrategias de planeación moderna para promover nuevos retos, con el fin de no detener la inserción de obras de interés general en sus planes de desarrollo, como la han hecho los municipios de Manizales, Pereira, Medellín y otros, que han considerado que durante las calamidades también se puede y se debe trabajar asumiendo nuevos compromisos.

La intención de incorporación de nuevas ideas para cambiar las malas decisiones de gobiernos anteriores que tienen colapsada la economía de un municipio que estadísticamente se encuentra en el tercer puesto de los entes territoriales más pobres del país, me lleva a solicitarle, por este medio, la atención urgente que el caso amerita, para acometer la revisión virtual del primer periodo de vencimiento del POT vigente, sobre las normas de corto y mediano plazo, para habilitar nuevas disposiciones, derogar normas perjudiciales y recuperar aquellas que eran beneficiosas para el municipio y que fueron abolidas inexplicablemente.

De otro ángulo vale la pena informarle que por otros medios me he dirigido a su señoría, para que su Administración cambie de actitud ante las modificaciones de este POT, que en nada colabora para atraer inversionistas industriales, comerciales, de construcción de viviendas y parcelaciones campestres, pero ha guardado silencio y no se ha pronunciado oficialmente sobre su determinación al respecto, como debería hacerlo, porque es a usted, y ahora a quien corresponde adelantar estas urgentes gestiones que están minando el proceso constructivo de este territorio.

Desconfiado como lo soy y he sido, por la respuesta negativa soslayada de los mandatarios anteriores en aprobar estas peticiones por falta de voluntad política de sus asesores, que aunque es una decisión contraria a los deseos gremiales continúan con su indolencia a las innumerables quejas, tengo la leve esperanza que usted reflexionará y apoyará esta gestión de revisión virtual en atención a las nuevas reglamentaciones de los decretos 2106 de 2019 , este referido a la fase electrónica que deben implementar los entes territoriales, y al nuevo decreto 1232 de 2020, que simplifica estos métodos, resumiendo los procedimientos y acelerando los plazos de ejecución.

Considerando que el saneamiento de la calamidad demorará mucho tiempo en ocurrir y debido a la parálisis de los actos administrativos que muchos municipios han optado por sostener, le invito a reiniciar actividades y a utilizar la tecnología y el recurso humano de Valledupar para acometer esta y otras obras importantísimas para nuestras comunidades en claro respeto por el derecho colectivo de tener una norma justa para las edificaciones, en concordancia con el literal M del decreto de acciones populares.