Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 4 enero, 2013

Carnes por todas partes

Por: Nuris Esther Pardo Conrado [email protected] Las deficiencias e inoperancias en las distintas sectoriales de la administración municipal pululan de cabo a rabo, pero bien vale la pena detenerse en el sector salud, donde los problemas a lo largo y ancho del año que terminó. No faltaron y develaron una absoluta  falta de rigor, de […]

Por: Nuris Esther Pardo Conrado

[email protected]

Las deficiencias e inoperancias en las distintas sectoriales de la administración municipal pululan de cabo a rabo, pero bien vale la pena detenerse en el sector salud, donde los problemas a lo largo y ancho del año que terminó.

No faltaron y develaron una absoluta  falta de rigor, de experiencia y desconocimiento de la titular a pesar de sus excelsas condiciones humanas, que generaron un caos en los distintos objetivos de tan importante secretaría, es el caso verbigracia, de la epidemia de dengue incontrolada.

La mortalidad infantil y de mujeres gestantes, el caos en el hospitalito Eduardo Arredondo Daza, la falta de prevención de embarazos en adolescentes, etc., etc., sin que se haya hecho nada para afrontar y superar estos problemas que ubican al municipio en un penoso lugar en estos avatares frente al resto del país.

Un caso que llama poderosamente la atención y que está a la vista no solo de la flamante secretaria de salud, sino de todos los vallenatos, es la venta indiscriminada de carnes, bien sea debajo de un árbol, en cualquier esquina o tienda de barrio.

sin ningún control sanitario pre y posterior al sacrificio de los animales, expuestos al sol, insectos y roedores,  colocando en grave riesgo la salud y de contera la vida de las personas que las consumen. sin que  hayan acciones claras y decididas de la secretaría de salud para afrontar este problema latente.

Hay de todo, desde el carnicero serio y honesto que vende su carne óptima para el consumo humano y mantiene su clientela satisfecha, hasta el desconsiderado que vende carne de cerdo flaco y con viruela para los que hacen pasteles y chicharrones.

Gallinas sacrificadas con la carne verdosa para los sancochos de barrios populares y carne de res con la grasa amarilla verdosa, que develan su origen dudoso ante el desdén de unos servidores públicos que les da igual lo que suceda con la salud de sus congéneres. 

Obras son amores y no buenas razones, los vallenatos estamos cansados de tanto servidor público inferior a las circunstancias para las que fueron elegidos o nombrados.

El servidor público moderno no se limita a dirigir y ordenar desde su mullido y perfumado escritorio de caoba, sino que debe salir a untarse de pueblo y percatarse de primera mano sobre lo que ocurre en su jurisdicción, colocando el oído en el caracol de los problemas ciudadanos y de esta manera construir con ellos las acciones públicas tendientes a generar bienestar y prosperidad en su comunidad.

Hasta cuando señora secretaria de salud municipal Cuantos muertos más por dengue, y cuantos enfermos debe haber por carnes no aptas para el consumo humano, para que podamos sentir sus acciones de gobierno?.

Esperamos que en este año que acaba de comenzar todo cambie y se pase de las palabras a los hechos, los ciudadanos ya estamos bien cansados de escuchar tantas palabras floridas y matizadas con buenas intensiones, cero carreta debe ser la consigna para el 2013.  

 

Columnista
4 enero, 2013

Carnes por todas partes

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Nurys Pardo Conrado

Por: Nuris Esther Pardo Conrado [email protected] Las deficiencias e inoperancias en las distintas sectoriales de la administración municipal pululan de cabo a rabo, pero bien vale la pena detenerse en el sector salud, donde los problemas a lo largo y ancho del año que terminó. No faltaron y develaron una absoluta  falta de rigor, de […]


Por: Nuris Esther Pardo Conrado

[email protected]

Las deficiencias e inoperancias en las distintas sectoriales de la administración municipal pululan de cabo a rabo, pero bien vale la pena detenerse en el sector salud, donde los problemas a lo largo y ancho del año que terminó.

No faltaron y develaron una absoluta  falta de rigor, de experiencia y desconocimiento de la titular a pesar de sus excelsas condiciones humanas, que generaron un caos en los distintos objetivos de tan importante secretaría, es el caso verbigracia, de la epidemia de dengue incontrolada.

La mortalidad infantil y de mujeres gestantes, el caos en el hospitalito Eduardo Arredondo Daza, la falta de prevención de embarazos en adolescentes, etc., etc., sin que se haya hecho nada para afrontar y superar estos problemas que ubican al municipio en un penoso lugar en estos avatares frente al resto del país.

Un caso que llama poderosamente la atención y que está a la vista no solo de la flamante secretaria de salud, sino de todos los vallenatos, es la venta indiscriminada de carnes, bien sea debajo de un árbol, en cualquier esquina o tienda de barrio.

sin ningún control sanitario pre y posterior al sacrificio de los animales, expuestos al sol, insectos y roedores,  colocando en grave riesgo la salud y de contera la vida de las personas que las consumen. sin que  hayan acciones claras y decididas de la secretaría de salud para afrontar este problema latente.

Hay de todo, desde el carnicero serio y honesto que vende su carne óptima para el consumo humano y mantiene su clientela satisfecha, hasta el desconsiderado que vende carne de cerdo flaco y con viruela para los que hacen pasteles y chicharrones.

Gallinas sacrificadas con la carne verdosa para los sancochos de barrios populares y carne de res con la grasa amarilla verdosa, que develan su origen dudoso ante el desdén de unos servidores públicos que les da igual lo que suceda con la salud de sus congéneres. 

Obras son amores y no buenas razones, los vallenatos estamos cansados de tanto servidor público inferior a las circunstancias para las que fueron elegidos o nombrados.

El servidor público moderno no se limita a dirigir y ordenar desde su mullido y perfumado escritorio de caoba, sino que debe salir a untarse de pueblo y percatarse de primera mano sobre lo que ocurre en su jurisdicción, colocando el oído en el caracol de los problemas ciudadanos y de esta manera construir con ellos las acciones públicas tendientes a generar bienestar y prosperidad en su comunidad.

Hasta cuando señora secretaria de salud municipal Cuantos muertos más por dengue, y cuantos enfermos debe haber por carnes no aptas para el consumo humano, para que podamos sentir sus acciones de gobierno?.

Esperamos que en este año que acaba de comenzar todo cambie y se pase de las palabras a los hechos, los ciudadanos ya estamos bien cansados de escuchar tantas palabras floridas y matizadas con buenas intensiones, cero carreta debe ser la consigna para el 2013.