Por  Celso Guerra Gutierréz

Rosendo Romero Ospino, de Villanueva, La Guajira, es el cuarto hijo entre los varones, de nueve hermanos en total, todos acordeoneros,Rafael, Norberto Misael y Limedes, hijos de Ana Antonia Ospino y Escolástico Romero, miembros de una extraordinaria dinastía musical, que tiene sus orígenes en la región de El Paso (Cesar).

La niñez de Rosendo, se desenvolvió entre Villanueva y la serranía del Perijá, donde su familia tenía una parcela, de la cual sacaban su sustento diario.

Alternó sus actividades de estudiante con las labores propias del campo, allí en ese escenario campechano y rústico, comenzó a forjarse como poeta-cantor, al asociar los sonidos de la montaña, como las quebradas, pájaros, el viento, lluvia y los animales, a las canciones que lo han dado a conocer universalmente.

Rosendo es férreo defensor del vallenato de la montaña, que por su pureza y riqueza melódica, han sido, según su concepto, los cantos quehan posicionado a este folclor, en el plano exitoso donde se encuentra en todas y cada una de las regiones donde se escucha, de hecho, la canción “Un Son Montañero”, que conocimos en la versión de Diomedes Díaz y Colacho, es dedicada a los forjadores de este estilo musical, que tanto lo marcaron como músico.

Rosendo Romero, ha sido compositor versátil, dentro y fuera del vallenato, alegre, nostálgico, parrandero, además creador de cumbias, como “La Zenaida”; canción que todavía se baila en toda Europa, versión de Armando Hernández y Leonardo Favio.

El espíritu navideño siempre ha invadido el estado anímico de Romero, de hecho, ha sido quien más le compuesto a esta época del año. Comenzó con la canción más representativa de la nochebuena en el vallenato, “Mensaje de Navidad”.

Difícilmente habrá otro canto para esta época en el cancionero vallenato que la iguale en popularidad, ella marcó una pauta dentro de este género musical, después de los lejanos éxitos navideños de Guillermo Buitrago, estábamos huérfanos de este tipo de mensajes que nos recuerda el nacimiento del Niño Dios, este canto es un festejo y reflexión sobre estas festividades, que desde que conoció la luz, nunca ha dejado de sonar en este mes, en las distintas versiones que ha sido grabada.

“Navidad”; es otra de las obras populares de fin de año; Rosendo Romero, es coautor de este canto, Junto a su hermano, Israel Romero, a pesar que en los créditos autorales no aparece “El Pollo Irra ” quien la publicó con la voz Rafael Orozco.Dijo “Chendo” que esta canción se había hecho con el ánimo de poner a bailar a los gozones en fin de año.

“EL Cantor de Navidades”; así podríamos proclamar a este buen compositor y lo hacemos en esta nota merecidísima, por su extensa obra dedicada a la época de fin de año y a toda en general. Esta otra canción, fue publicada por, el “Doble Poder”; Ismael Rudas y Daniel Celedon.

Romero, dice tener las suficientes canciones navideñas para grabar un disco y compartir con sus seguidores en esta fiesta tan especial.