La alta votación que logró la iniciativa de crear la Región Caribe, que superó los dos millones y medio de sufragios, en las pasadas elecciones del 14 de marzo, podría generar un cambio en el modelo del Estado colombiano.
Así se desprende de las respuestas de todos los candidatos a la presidencia de la República, en el debate realizado ayer por iniciativa de los ocho gobernadores de la Región Caribe, principalmente por el del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, y el Gobernador del Cesar, Cristian Moreno Panezo, otro gran impulsador de esta iniciativa, transmitido en directo por el canal regional Telecaribe.
Los candidatos, en mayor o menor proporción, son amigos de la creación de las regiones, para buscar un desarrollo interregional más equilibrado y reducir el poder del nivel central, es decir de la Nación.
En la actualidad, la nación ejecuta el 89 por ciento de los ingresos del Estado, los municipios el 7 por ciento y los departamentos apenas un cuatro por ciento. La idea es que una mayor proporción de los ingresos del Estado se pueda ejecutar desde las regiones, tanto en el nivel departamental como en el de las nuevas regiones que se podrían crear.
Por supuesto, antes de pasar a crear las regiones que hoy permite nuestro ordenamiento territorial, es necesario reglamentar la Ley de Ordenamiento Territorial (L.O.T), que no ha pasado en el Congreso de la República a pesar de que ya lleva más de 18 intentos. Todos los candidatos se mostraron partidarios de buscar un apoyo a esta iniciativa, en caso de alcanzar la Presidencia de la República.
Ese cambio en nuestra legislación, es el que podría permitir una reglamentación de los entes regionales, es decir la asociación de varios departamentos con una identidad geográfica y cultural, como es el caso de la Región Caribe. Igualmente, la mayoría de los aspirantes se mostraron partidarios de la creación del Fondo de Compensación Interregional, con aportes del 2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), con el fin de reducir la inequidad entre las distintas regiones del país.
La propuesta de la Región Caribe avanza, pues, por buen camino; pero este es sólo el principio. Lo más importante es que el nuevo gobierno, gane quien gane, introduzca en el próximo Plan de Desarrollo cambios a favor de un modelo económico que piense e invierta más en las regiones y que reduzca el poder político y financiero del gobierno central, en aras de fortalecer el desarrollo regional y local.
De otra parte, el Gran debate “Candidatos frente al Compromiso Caribe” en la práctica los comprometió a todos en una mayor inversión en esta región del país, principalmente en el gasto social y en proyectos de desarrollo económico e infraestructura vital para el progreso de  esta región del país.
La idea es avanzar hacia otros modelos de Estado, como el español o el italiano, en Europa, en los cuales las regiones tienen un gran peso en materia de planificación y ejecución de la inversión pública. Colombia, por el contrario, persiste con un estado excesivamente centralista en sus procesos de planificación y de asignación de la inversión y el gasto público, a pesar de todos los intentos por desarrollar un proceso de descentralización.
Los candidatos participantes en el debate: Noemí Sanín por el Partido Conservador; Juan Manuel Santos por el Partido de la U; Antanas Mockus por el Partido Verde; Rafael Pardo Rueda por el liberalismo, Germán Vargas Lleras, por Cambio Radical, Gustavo Petro por el Polo, Jaime Araujo Rentería, Jairo Calderón y Robinson Devia acudieron a la cita del debate y ante un grupo de indígenas de las etnias Kogui y Aruaca, comprometieron su palabra de gestionar desde la Presidencia de la República, política y recursos para ayudar al desarrollo de la Región Caribe y avanzar en el proyecto de consolidación de ese viejo sueño, de un ente territorial que nos de mayor autonomía frente al gobierno central.