Estos recursos tenían como destino la reconstrucción y adecuación de la boca toma del acueducto local, de los cuales 1.200 millones fueron aportados por la Alcaldía y los 20 millones restantes asignados por la empresa beneficiada con el contrato, recursos representados en bienes y servicios.
Sin la presencia del representante del Ministerio Público, se inició ayer una audiencia de juicio oral contra la exalcaldesa del municipio de Becerril, Yancy Bueno Contreras, como presunta responsable del delito de contrato sin el lleno de los requisitos legales, por cuantía de 1.220 millones de pesos. Estos recursos tenían como destino la reconstrucción y adecuación de la boca toma del acueducto local, de los cuales 1.200 millones fueron aportados por la Alcaldía y los 20 millones restantes asignados por la empresa beneficiada con el contrato, recursos representados en bienes y servicios.
La Fiscalía hizo el interrogatorio a uno de sus testigos de la unidad de delitos contra la administración pública en torno a la obtención de documentos sobre el contrato, en que fue asignado de manera directa a una fundación para el medio ambiente y recursos hídricos, cuyo contrato no contiene la firma de la mandataria, sino de una funcionaria encargada de la administración municipal.
La firma beneficiada, al parecer, subcontrató los servicios de ingenieros civiles y un arquitecto de Barranquilla mediante la figura de prestación de servicio, siendo esta aplazada varias veces algunas por período invernal, según lo relató la Fiscalía durante la vista pública.
Los hechos se remontan a una denuncia hecha por un ciudadano de la población que se identificó con un documento apócrifo en el año 2008 y que las autoridades judiciales no lo han podido localizar, pero el proceso investigativo siguió su curso y se encuentra en la etapa de juicio oral.
La vista pública continuará próximamente en fecha que el juzgado dará a conocer de manera oportuna a los procesados, a través del centro de servicios del Palacio de Justicia de Valledupar.
Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN
Estos recursos tenían como destino la reconstrucción y adecuación de la boca toma del acueducto local, de los cuales 1.200 millones fueron aportados por la Alcaldía y los 20 millones restantes asignados por la empresa beneficiada con el contrato, recursos representados en bienes y servicios.
Sin la presencia del representante del Ministerio Público, se inició ayer una audiencia de juicio oral contra la exalcaldesa del municipio de Becerril, Yancy Bueno Contreras, como presunta responsable del delito de contrato sin el lleno de los requisitos legales, por cuantía de 1.220 millones de pesos. Estos recursos tenían como destino la reconstrucción y adecuación de la boca toma del acueducto local, de los cuales 1.200 millones fueron aportados por la Alcaldía y los 20 millones restantes asignados por la empresa beneficiada con el contrato, recursos representados en bienes y servicios.
La Fiscalía hizo el interrogatorio a uno de sus testigos de la unidad de delitos contra la administración pública en torno a la obtención de documentos sobre el contrato, en que fue asignado de manera directa a una fundación para el medio ambiente y recursos hídricos, cuyo contrato no contiene la firma de la mandataria, sino de una funcionaria encargada de la administración municipal.
La firma beneficiada, al parecer, subcontrató los servicios de ingenieros civiles y un arquitecto de Barranquilla mediante la figura de prestación de servicio, siendo esta aplazada varias veces algunas por período invernal, según lo relató la Fiscalía durante la vista pública.
Los hechos se remontan a una denuncia hecha por un ciudadano de la población que se identificó con un documento apócrifo en el año 2008 y que las autoridades judiciales no lo han podido localizar, pero el proceso investigativo siguió su curso y se encuentra en la etapa de juicio oral.
La vista pública continuará próximamente en fecha que el juzgado dará a conocer de manera oportuna a los procesados, a través del centro de servicios del Palacio de Justicia de Valledupar.
Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN