Corren los días y avanzan las investigaciones sobre las causas del accidente del bus colombiano que se accidentó en una carretera de Ecuador, hecho que hasta ahora registra un saldo de 24 personas fallecidas.
Corren los días y avanzan las investigaciones sobre las causas del accidente del bus colombiano que se accidentó en una carretera de Ecuador, hecho que hasta ahora registra un saldo de 24 personas fallecidas. En medio de la tragedia, existen versiones encontradas y al mismo tiempo informaciones que continúan bajo sospechas.
Según las primeras versiones de las autoridades ecuatorianas, el bus de placas colombianas (USA-251), que viajaba de Colombia hacia Ecuador se accidentó en la vía Pifo – Papallacta, en el vecino país. En la madrugada habría chocado contra un campero Chevrolet Tropper que habría quedado enganchado durante más de un kilómetro al bus, y luego se estrelló contra una de las casas a la vera del camino. En el campero viajaban cuatro miembros de una familia ecuatoriana, tres de los cuales murieron.
Hasta los momentos se desconoce la hora exacta del choque. Diversas fuentes han reseñado que el reporte del accidente se registró entre las 2:50 y 2:55 a.m. Según el diario Semana, el reporte fue realizado a través de una llamada de alerta telefónica al Centro Zonal Quito del ECU911.
Según el diario El Tiempo, el director de Transporte y Tránsito del Ministerio, Manuel González, afirmó que el bus accidentado solo tenía permiso para transitar dentro de la jurisdicción colombiana. Señaló: “El vehículo cuenta con Soat, revisión técnico mecánica, y la empresa cuenta con las pólizas vigentes; sin embargo, la prestación del servicio de turismo internacional requiere una habilitación previa del Ministerio de Transporte, la cual en este momento no ha sido asignada ni otorgada a la empresa. Tampoco el vehículo cuenta con autorización para hacer tránsito internacional, razón por la cual los hechos que dieron lugar al paso del vehículo por frontera son materia de investigación”.
Al iniciar la investigación correspondiente al vehículo, Juan Zapata, director de seguridad del municipio de Quito, señaló que: “el vehículo pertenece a la empresa colombiana Cotrans y salió desde la ciudad de Neiva para dirigirse a Quito”. Por su parte, Hugo Fernández, gerente de la Cooperativa Cotrans en Bucaramanga, descartó que el bus accidentado en Ecuador sea de la empresa.
A propósito, Fernandez señaló: “No tenemos ninguna ruta por allá. Nosotros operamos entre Cúcuta y Bogotá por la vía entre Duitama y Málaga. Para Ecuador no despachamos nada”.
Por su parte, Armando Cuéllar, gerente de Coomotor, la empresa de transporte más grande del Huila, añadió a esta información que el vehículo accidentado en Ecuador no salió originalmente del terminal de Neiva porque desde allí no se maneja esa ruta. “El bus no salió de Neiva como se está diciendo, probablemente salió de Bogotá y tomó la ruta hacia Ecuador pasando por Neiva, Pitalito, Mocoa, Santana y San Miguel, en Putumayo”, dijo Cuéllar.
Tras conocer la noticia del trágico accidente, José Luis Acevedo, quien aparece en el Registro Único de Transporte (Runt) como propietario del vehículo de placas USA-251, manifestó que este fue vendido en noviembre del año pasado a un hombre en la ciudad de Cali. Agrego: “No se ha hecho el traspaso porque el señor no me ha terminado de pagar el vehículo…”, al mismo tiempo aclaró que a las autoridades ya les fueron entregados los documentos que certifican el traspaso del vehículo.
Según el diario El Tiempo, la información que el Gobierno de Ecuador le envió al Ministerio de Transporte de Colombia, el vehículo portaba un contrato y un extracto de contrato expedido por la empresa en mención; firmado el 10 de agosto en Bucaramanga, suscrito entre Gino de Jesús Moreno Pradilla, quien aparece como representante legal de la empresa en dicho documento, y Claudia Ximena Orozco Córdoba, persona que acordó el viaje con un contrato por un valor de 9 millones de pesos (50 % al iniciar el recorrido y el 50 % restante al terminar) y con la siguiente ruta específica: Neiva – Pitalito – Mocoa – Villa Garzón – La Hormiga – San Miguel – Ecuador – Lago Agrio y viceversa.
A propósito de lo ocurrido, la Superintendencia de Puertos y Transporte informó que abrió una investigación preliminar en contra de la empresa Cooperativa de Transportes Especiales del Oriente por la presunta prestación de un servicio de transporte no autorizado y por no contar con los documentos necesarios para realizar el servicio de transporte internacional.
Ante las acusaciones, Alberto Ramírez Maldonado, gerente de Cootransportes Especiales del Oriente, explicó que el vehículo se encontraba en proceso de desvinculación de la compañía desde diciembre del año pasado y que desconocen cómo fue despachado de los terminales el vehículo debido a que “el Formato Único de Estrato del Contrato (FUEC), aparece expedido en Bucaramanga y la sede de la empresa es en Cúcuta”.
Ramírez agregó que el FUEC que presentó el conductor del bus y que es analizado por las autoridades es falso, señalando: “el vehículo salió de Neiva y la compañía tampoco tiene sede en esa ciudad. No sabemos quién fue el que firmó ese documento”.
Por otra parte, tras revisar un extracto de contrato en el que aparece la identificación del conductor y de la licencia que este portaba al momento del accidente, la Supertransporte identificó que uno de los dos conductores del vehículo no aparece en la base de datos del Runt.
La Supertransporte también pudo confirmar que el vehículo es modelo 2005, marca Mercedes Benz, con Soat expedido el 01 de febrero de 2018 y revisión técnico mecánica realizada el 02 de febrero de 2018 en Centro de Diagnóstico Automotor de Jamundí.
El diario Semana, a propósito de lo conocido hasta ahora reseñó que el paseo partió desde la ciudad de Cali, Valle, pero por el supuesto cierre parcial de la vía Panamericana que atraviesa los departamentos de Valle, Cauca y Nariño hasta llegar a la frontera con Ecuador, cambiaron el itinerario y decidieron avanzar hacia el sur atravesando el Huila y Putumayo (Neiva, Pitalito, Mocoa, Villa Garzón).
¿Quiénes viajaban?
Agregaron además que los pasajeros colombianos no eran desconocidos entre ellos, sino que se trataba de un grupo de amigos que viajaban en un paseo con rumbo a Lago Agrio, en Ecuador y que su regreso a Colombia sería el próximo sábado 18 de agosto. Al parecer eran habitantes de los barrios El Guabal, San Judas y Colón y el famoso viaje a Ecuador fue un regalo que hasta el momento es un completo misterio, porque la persona que todos coinciden en señalar como la encargada de invitar a ese paseo, es una vecina que también iba en el bus y se encuentra en delicado estado de salud, debido a la gravedad de las heridas que sufrió.
“Lo único que sabemos es que todo era gratis. El bus, la comida y el alojamiento; lo que se dice es que alguien que trabaja en una agencia de viajes, recibió de su patrón un regalo que consistía en disponer el bus y los gastos”, explicó Fanny Carmona, líder social del barrio El Guabal.
Por su parte, María Isabel González Londoño, una colombiana de 45 años que sobrevivió al accidente del bus colombiano señaló que el viaje fue vía Neiva y que cuando se encontraban próximos a cruzar la frontera con Ecuador, en la carretera se encontraron con un grupo de venezolanos, ellos “pidieron un aventón” para llegar a Quito.
Desde que se conoció la noticia, la Cancillería ha coordinado las acciones de asistencia en el Consulado de Colombia en Quito. La cartera pretende establecer la magnitud de la situación para poder brindar el acompañamiento a los heridos y ayudar en los trámites que se requieran con relación a los ciudadanos colombianos que fallecieron en el accidente.
Corren los días y avanzan las investigaciones sobre las causas del accidente del bus colombiano que se accidentó en una carretera de Ecuador, hecho que hasta ahora registra un saldo de 24 personas fallecidas.
Corren los días y avanzan las investigaciones sobre las causas del accidente del bus colombiano que se accidentó en una carretera de Ecuador, hecho que hasta ahora registra un saldo de 24 personas fallecidas. En medio de la tragedia, existen versiones encontradas y al mismo tiempo informaciones que continúan bajo sospechas.
Según las primeras versiones de las autoridades ecuatorianas, el bus de placas colombianas (USA-251), que viajaba de Colombia hacia Ecuador se accidentó en la vía Pifo – Papallacta, en el vecino país. En la madrugada habría chocado contra un campero Chevrolet Tropper que habría quedado enganchado durante más de un kilómetro al bus, y luego se estrelló contra una de las casas a la vera del camino. En el campero viajaban cuatro miembros de una familia ecuatoriana, tres de los cuales murieron.
Hasta los momentos se desconoce la hora exacta del choque. Diversas fuentes han reseñado que el reporte del accidente se registró entre las 2:50 y 2:55 a.m. Según el diario Semana, el reporte fue realizado a través de una llamada de alerta telefónica al Centro Zonal Quito del ECU911.
Según el diario El Tiempo, el director de Transporte y Tránsito del Ministerio, Manuel González, afirmó que el bus accidentado solo tenía permiso para transitar dentro de la jurisdicción colombiana. Señaló: “El vehículo cuenta con Soat, revisión técnico mecánica, y la empresa cuenta con las pólizas vigentes; sin embargo, la prestación del servicio de turismo internacional requiere una habilitación previa del Ministerio de Transporte, la cual en este momento no ha sido asignada ni otorgada a la empresa. Tampoco el vehículo cuenta con autorización para hacer tránsito internacional, razón por la cual los hechos que dieron lugar al paso del vehículo por frontera son materia de investigación”.
Al iniciar la investigación correspondiente al vehículo, Juan Zapata, director de seguridad del municipio de Quito, señaló que: “el vehículo pertenece a la empresa colombiana Cotrans y salió desde la ciudad de Neiva para dirigirse a Quito”. Por su parte, Hugo Fernández, gerente de la Cooperativa Cotrans en Bucaramanga, descartó que el bus accidentado en Ecuador sea de la empresa.
A propósito, Fernandez señaló: “No tenemos ninguna ruta por allá. Nosotros operamos entre Cúcuta y Bogotá por la vía entre Duitama y Málaga. Para Ecuador no despachamos nada”.
Por su parte, Armando Cuéllar, gerente de Coomotor, la empresa de transporte más grande del Huila, añadió a esta información que el vehículo accidentado en Ecuador no salió originalmente del terminal de Neiva porque desde allí no se maneja esa ruta. “El bus no salió de Neiva como se está diciendo, probablemente salió de Bogotá y tomó la ruta hacia Ecuador pasando por Neiva, Pitalito, Mocoa, Santana y San Miguel, en Putumayo”, dijo Cuéllar.
Tras conocer la noticia del trágico accidente, José Luis Acevedo, quien aparece en el Registro Único de Transporte (Runt) como propietario del vehículo de placas USA-251, manifestó que este fue vendido en noviembre del año pasado a un hombre en la ciudad de Cali. Agrego: “No se ha hecho el traspaso porque el señor no me ha terminado de pagar el vehículo…”, al mismo tiempo aclaró que a las autoridades ya les fueron entregados los documentos que certifican el traspaso del vehículo.
Según el diario El Tiempo, la información que el Gobierno de Ecuador le envió al Ministerio de Transporte de Colombia, el vehículo portaba un contrato y un extracto de contrato expedido por la empresa en mención; firmado el 10 de agosto en Bucaramanga, suscrito entre Gino de Jesús Moreno Pradilla, quien aparece como representante legal de la empresa en dicho documento, y Claudia Ximena Orozco Córdoba, persona que acordó el viaje con un contrato por un valor de 9 millones de pesos (50 % al iniciar el recorrido y el 50 % restante al terminar) y con la siguiente ruta específica: Neiva – Pitalito – Mocoa – Villa Garzón – La Hormiga – San Miguel – Ecuador – Lago Agrio y viceversa.
A propósito de lo ocurrido, la Superintendencia de Puertos y Transporte informó que abrió una investigación preliminar en contra de la empresa Cooperativa de Transportes Especiales del Oriente por la presunta prestación de un servicio de transporte no autorizado y por no contar con los documentos necesarios para realizar el servicio de transporte internacional.
Ante las acusaciones, Alberto Ramírez Maldonado, gerente de Cootransportes Especiales del Oriente, explicó que el vehículo se encontraba en proceso de desvinculación de la compañía desde diciembre del año pasado y que desconocen cómo fue despachado de los terminales el vehículo debido a que “el Formato Único de Estrato del Contrato (FUEC), aparece expedido en Bucaramanga y la sede de la empresa es en Cúcuta”.
Ramírez agregó que el FUEC que presentó el conductor del bus y que es analizado por las autoridades es falso, señalando: “el vehículo salió de Neiva y la compañía tampoco tiene sede en esa ciudad. No sabemos quién fue el que firmó ese documento”.
Por otra parte, tras revisar un extracto de contrato en el que aparece la identificación del conductor y de la licencia que este portaba al momento del accidente, la Supertransporte identificó que uno de los dos conductores del vehículo no aparece en la base de datos del Runt.
La Supertransporte también pudo confirmar que el vehículo es modelo 2005, marca Mercedes Benz, con Soat expedido el 01 de febrero de 2018 y revisión técnico mecánica realizada el 02 de febrero de 2018 en Centro de Diagnóstico Automotor de Jamundí.
El diario Semana, a propósito de lo conocido hasta ahora reseñó que el paseo partió desde la ciudad de Cali, Valle, pero por el supuesto cierre parcial de la vía Panamericana que atraviesa los departamentos de Valle, Cauca y Nariño hasta llegar a la frontera con Ecuador, cambiaron el itinerario y decidieron avanzar hacia el sur atravesando el Huila y Putumayo (Neiva, Pitalito, Mocoa, Villa Garzón).
¿Quiénes viajaban?
Agregaron además que los pasajeros colombianos no eran desconocidos entre ellos, sino que se trataba de un grupo de amigos que viajaban en un paseo con rumbo a Lago Agrio, en Ecuador y que su regreso a Colombia sería el próximo sábado 18 de agosto. Al parecer eran habitantes de los barrios El Guabal, San Judas y Colón y el famoso viaje a Ecuador fue un regalo que hasta el momento es un completo misterio, porque la persona que todos coinciden en señalar como la encargada de invitar a ese paseo, es una vecina que también iba en el bus y se encuentra en delicado estado de salud, debido a la gravedad de las heridas que sufrió.
“Lo único que sabemos es que todo era gratis. El bus, la comida y el alojamiento; lo que se dice es que alguien que trabaja en una agencia de viajes, recibió de su patrón un regalo que consistía en disponer el bus y los gastos”, explicó Fanny Carmona, líder social del barrio El Guabal.
Por su parte, María Isabel González Londoño, una colombiana de 45 años que sobrevivió al accidente del bus colombiano señaló que el viaje fue vía Neiva y que cuando se encontraban próximos a cruzar la frontera con Ecuador, en la carretera se encontraron con un grupo de venezolanos, ellos “pidieron un aventón” para llegar a Quito.
Desde que se conoció la noticia, la Cancillería ha coordinado las acciones de asistencia en el Consulado de Colombia en Quito. La cartera pretende establecer la magnitud de la situación para poder brindar el acompañamiento a los heridos y ayudar en los trámites que se requieran con relación a los ciudadanos colombianos que fallecieron en el accidente.