A medida que Valledupar crece urbanística y poblacionalmente de la misma manera incrementa el problema de movilidad vehicular en las calles, principalmente en la zona céntrica donde el flujo de carros y motos es cada vez más exorbitante.

Los taponamientos, fallas en movilidad, congestión, infracciones, entre otros factores son los que afectan el tránsito en gran parte de la ciudad, esta situación obligó a la Alcaldía a implementar el programa ‘Muévete Bacano’ basado en actividades lúdicas en educación al volante.

En vista de que esta medida no era suficiente, la administración municipal a través de la Secretaría de Tránsito, desde julio de 2014, comenzó a implementar en Valledupar un esquema de regulación de movilidad con 20 mujeres en el marco del programa Móvil y Transfórmate.

“El año pasado se hizo el programa Muévete Bacano pero era más lúdico, lo que hicimos este año fue el programa Móvil y Transfórmate con la finalidad de que la hiciera directamente la Secretaría, estas 20 auxiliares se vincularon a la Secretaría de Tránsito y hemos ido a los colegios a dar charlas, se ha hecho lo mismo pero de una manera más efectiva entre comillas, porque ellas regulan”, manifestó el secretario de Tránsito de Valledupar, Óscar Tom Socarrás.

Sobre esta medida para apaciguar el caos de movilidad en la capital del Cesar, especialmente en los sectores más concurridos durante las horas picos, hay quienes afirman que es innecesario ese gasto que hace el Municipio.

Una labor tolerante
EL PILÓN conoció cómo es el día a día de estas ‘pedagogas’ de las vías que desde muy temprano salen a las calles para regular el tránsito de la ciudad.
Alix Jazmine Toro Peralta, es ama de casa y desde las 5:00 de la mañana comienza sus labores que va de preparar los alimentos a sus dos hijas y dejar el hogar limpio para poder cumplir con su deber de auxiliar de tránsito.
En la calle, Toro Peralta cambia su perfil de madre por una mujer encargada de regular movilidad vehicular armada de paciencia y valor para lidiar con todo tipo de infractores sobre el volante.

A pesar de que hay quienes las critican e incluso les faltan el respeto con insultos, Alix afirmó que los vallenatos sí acatan el llamado de las auxiliares de tránsito.

“Esta medida ha sido de gran acogida por los ciudadanos, el 95% acata y entiende la función de nosotras, pero siempre se va a encontrar con personas que no quieren acatar la orden. En el día a día tenemos que pedirle a Dios paciencia y calma porque no es fácil estar dispuesto a realizar esta labor”, expresó Toro Peralta.

Esta dama de la vía tiene claro que su objetivo como auxiliar de tránsito es pedagógico y aunque los ciudadanos obedecen las indicaciones, hay quienes persisten en incumplir las normas, así como hay quienes consideran que esta labor es innecesaria porque ya en la ciudad se cuentan con reguladores y Policía de Tránsito.

En la ciudad falta mucha pedagogía en cuanto a las normas de movilidad, las cuales eran desapercibidas por la gente.

De acuerdo con las mujeres que hacen parte del grupo de auxiliares, mientras realizan su trabajo procuran mantener la calma, “nosotras nunca nos enfrentamos a los conductores y dejamos que sean los agentes los que solucionen cuando no acaten nuestro llamado. La paciencia es muy importante en este trabajo”.

El Secretario de Tránsito dijo que existen quienes se aprovechan de la falta de autoridad de las auxiliares, pero ellas están respaldadas por la Policía, “ellas adolecen de autoridad en el sentido de que no pueden emitir comparendo, entonces las personas del común se vale de esto para no acatar lo que ellas dicen, de todas maneras ellas están en compañía de los guardas azules de tránsito o en su defecto los Policías de Tránsito y Transporte que las respaldan en caso tal de que alguien no quiera hacerles caso” indicó Óscar Tom Socarrás.

Inversión en la movilidad
Entre las funciones de la Secretaría de Tránsito está la de implementar programas encaminados a descongestionar las avenidas de la ciudad y para ello hay unos recursos.

Para el Municipio, el costo de las 20 auxiliares de tránsito durante este semestre fue de 300 millones de pesos aproximadamente y cubre a 20 auxiliares.

Tom Socarrás afirmó que “por ley debemos generar planes de prevención y movilidad, anualmente hay unos dineros que tiene una designación específica de acuerdo al recaudo de multas y se deben hacer planes de prevención y seguridad vial”.

Agregó que se hace necesaria la intervención de mano de obra capacitada en tránsito por lo que una vez se termine el contrato de las auxiliares será renovado el año próximo. Dicho contrato va hasta el 31 de diciembre del presente año, y capacitarán a este grupo de mujeres por medio del Sena.

En cuanto al esquema de las auxiliares de tránsito, Óscar Tom dijo que ha funcionado en materia de regulación y pedagogía pero no falta quien irrumpe la labor de estas mujeres “la comunidad ha tenido buena aceptación, hay unos casos aislados de personas que yo las llamaría desadaptadas, que las insultan, las empujan o le tratan de tirar el vehículo, pero son los menos”.
Explicó que el programa Móvil y Transfórmate cumple doble propósito a diferencia del Muévete Bacano que solamente era lúdico en el tema de educación y ahora además de estar regulando se está educando a los vallenatos.

“Fueron capacitadas a través del Sena y fueron incorporadas en julio de este año, estuvimos trabajando en los colegios, sobre todo en los que se encuentran en las avenidas principales y en otros puntos como el sector de la Galería, las clínicas y en general ha funcionado”, indicó Tom Socarrás.

Los vallenatos opinan
La función de las auxiliares de tránsito genera opiniones encontradas entre los vallenatos.

Luis Muñoz, Conductor.
La función de ellas está muy bien porque si acudieron para prestar un servicio a la comunidad hay que respetarlas como debe ser. Hay que acatar sus órdenes porque están revestidas de autoridad sobre la vía.

Campo Elías Contreras, transeúnte.
No me parece buena la función porque es un servicio que esas mujeres no saben y siempre se la mantienen hablando por la sombra. Mejor dicho zapatero a su zapato, ellas no saben de eso.

Mohamed Osman Díaz
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