Lo que pasó en el Concejo de Valledupar es digno de un territorio poco civilizado e internado en la oscuridad de las trampas políticas, no de la capital de un departamento que quiere mostrarse al mundo. Dos veces intentaron los concejales elegir la mesa directiva para el 2022, pero fueron saboteados, quizás en complicidad de algunos corporados, y no pudieron realizar la sesión.

Siglo XXI, sesiones virtuales, redes sociales y en el Concejo de Valledupar se va la luz y sabotean las sesiones cuando se van a tomar decisiones claves. Una vergüenza. El primer intento fallido fue el viernes 25 de junio. Ante los ojos del personero de Valledupar, Silvio Cuello, la sesión duró 39 minutos y no pudo siquiera iniciarse formalmente.

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Los problemas llegaron desde el primer minuto. Los autores intelectuales del saboteo al parecer compartieron el link y permitieron que muchas personas entraran aún sin identificarse. Entonces el presidente de la corporación, Manuel Gutiérrez, pidió al ingeniero retirarlos de la sesión.

A los 5 minutos, el concejal Guido Castilla se quejó por todo lo que pasaba dentro de la reunión. “Hoy en la sesión han pasado las cosas habidas y por haber. Primera vez que veo que hay tantos links extraños, hasta expulsan al ingeniero. Para eso tenemos una estrategia que es enviar una contraseña a los concejales. No vamos a permitir que nos vengan a sabotear la sesión de hoy”, señaló Castilla. La orden del presidente al ingeniero fue expulsar a  todo el que no estuviera identificado en la plataforma. Al contrario, el expulsado de esa sesión fue el presidente de la corporación. Desorden total.

Lo preocupante, según algunos concejales, es que el saboteo vendría desde la misma corporación, porque los únicos con accesos al link son los corporados. “Pedimos a los ministerios que apoyen por si hay que generar acciones legales en contra de aquellos que estén compartiendo el link y se estén prestando para sabotear la sesión”, señaló el concejal Joserth Gómez. 

20 minutos después de estar conectados, los saboteadores habían logrado que no iniciara la sesión. En medio del ‘desorden’,  los concejales Pedro Loperena y Guido Castilla insistieron al secretario de la corporación iniciar y dar el orden del día. Pero no hubo respuesta.

A los 10 minutos, el secretario del Concejo, José Luis Sierra, dejó “constancia en audio que cada vez que ingresaba a la aplicación lo sacaban”. Enseguida uno de los corporados dejó ver que serían los propios concejales quienes lideraron el saboteo. “Pida que los concejales enciendan las cámaras porque se están creando nombres falsos”.

A las 8:30, el concejal Manolo Fernández señaló que ya el tiempo para iniciar la sesión había terminado, a lo que uno de los corporados le dijo que ya había iniciado. En medio de esa discusión de si había arrancado o no la sesión, la transmisión fue terminada. Ganaron los saboteadores el viernes. Prácticas propias de lo más sucio de la política.

CERO Y VAN DOS

El sábado 26 de junio nuevamente se conectaron los concejales de Valledupar para elegir la mesa directiva del 2022.  Entonces, el primer problema era que no estaban todos los corporados. Ante eso, Guido Castilla dijo que estaban conectados 11 concejales desde un solo link. El concejal Jorge Luis Arzuaga señaló que cada uno debía conectarse desde su link porque de lo contrario se estaría ante una sesión virtual viciada. “Si existe una justificación válida que respondan, de lo contrario que cada uno se conecte de manera independiente”, señaló.

Salió en defensa de la conexión grupal el concejal Wilber Hinojosa. “Viendo lo que ha manifestado el concejal Arzuaga quiero que me justifique lo expuesto porque de lo contrario estaría atentando de manera ilegal (sic) tratando de dar parámetros jurídicos que no existen en nuestro ordenamiento jurídico”, señaló Hinojosa.

¿Qué pasa en el Concejo? ¿Por qué 11 corporados estaban conectados en un solo link? Luego de varios diálogos, un grupo de concejales abandonó la tradicional mayoría y se integraron al otro grupo que durante año y medio estuvo como minoría.

Eudes Orozco, Jhosert Gómez, Wilber Hinojosa, Thelma Gómez, Ronald Castillejo y Pedro Loperena se unieron a los concejales Jorge Pana, Jorge Daza, Guido Castilla, Mariam Muvdi, Jorge Pérez, para conformar la nueva mayoría en el recinto municipal.

Al parecer el cambio es netamente interno y surgió por el presunto descontento con quienes ‘mandaban’ la parada en el Concejo de Valledupar.

“VERGÜENZA”

Al igual que el viernes, el sábado también pasó media hora y nada que iniciaba la sesión. “Va a pasar lo mismo del viernes”, decía como premonición el concejal Castilla. “Secretario, no se preste para dilatar la sesión. Creo yo que están incurriendo en una falta gravísima y no quieren realizar la elección de la mesa directiva”,  dijo en voz alta el concejal Jorge Pérez.

“Si estos problemas los hemos tenido siempre. Quieren atemorizar a la gente”, dijo el concejal Luis Fernando Quintero. “Sea serio concejal”, respondió Pérez. Quintero pidió respeto. A eso se redujo el debate en el Concejo todo el sábado.

“Esto no se puede tolerar”, señaló el personero de la ciudad Silvio Cuello Chinchilla. “Es una vergüenza”, sentenció. El caso es que  47 minutos después de haber iniciado la sesión del sábado debió suspenderse nuevamente por los ataques cibernéticos.

Sin duda, tienen la responsabilidad los entes de control de investigar quiénes son los responsables de estos delitos informáticos que representan una vergüenza para la ciudad.

Por Redacción EL PILÓN