Al conocerse el borrador del anteproyecto del Presupuesto General de la Nación para el 2018, que rondaría los $229 billones de pesos, autoridades del Cesar prendieron las alertas por la reducción en materia ambiental.
El documento filtrado por Semana Sostenible, indica que entidades del sector ambiental como el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), Parques Nacionales Naturales y el Instituto Humboldt, sufrirían gruesos recortes que en total dejarían al sector con un 60 % menos del presupuesto asignado en el 2017.

De esta manera, para trabajar por el medio ambiente existiría un recorte cercano a los $400.000 millones, por lo que el presupuesto pasaría de $632.000 millones a $232.000 millones en 2018. Siendo Parques Nacionales con una reducción de $13.875 millones; seguida del Ideam, cuyo presupuesto se reduciría en una cifra cercana a los $10.000 millones; mientras que el Instituto Alexander Von Humboldt sufriría un recorte de $3.500 millones, las entidades más afectadas por la nueva asignación de recursos.

Para el secretario de Ambiente Departamental, Andrés Arturo Fernández, es algo grave para Colombia y el mundo, “máxime cuando desde las regiones venimos trabajando en temas ambientales con mucho esfuerzo y el país ha insistido en continuar apostándole a los compromisos adquiridos en el COP 21 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS-“.

Fernández explicó que, a diferencia de otros sectores, dicho recorte obligará a incrementar los esfuerzos con la participación de todos los sectores.

“Desde el gobierno departamental el año pasado invertimos $2.600 millones en ocho proyectos, llegando a cada rincón del departamento, especialmente en proyectos de reforestación para cuencas hidrográficas abastecedoras de acueductos municipales, con el fin de asegurar agua para el futuro de los habitantes del Cesar. En el 2017, buscamos triplicar esta inversión con proyectos mucho más ambiciosos, utilizando recursos del Sistema General de Regalías, dirigidos a proyectos de protección y conservación de nuestros ecosistemas estratégicos a través de reforestación, estufas ecológicas, preservación de humedales y educación ambiental”, declaró Fernández
Mientras que para el próximo año espera que el horizonte jurídico que afronta el río Cesar “ya esté definido para poder contribuir con una obra de limpieza y saneamiento ambiental, como está consignado en nuestro Plan de Acción y Plan de Desarrollo Departamental”.

El ambientalista Miguelángel Sierra, considera mucho más drástica la designación de recursos a nivel nacional, porque en municipios como Valledupar, que tienen una inversión solamente del uno por ciento del ingreso bruto para el manejo del medio ambiente, los proyectos del orden nacional ayudan en gran parte.

“Nos preocupan los índices de inversión. En 2018, Valledupar tendrá unos $580 millones para inversión en medio ambiente y entonces les pregunto a las autoridades ¿Qué pasará con el río Cesar? Lo que se nos viene día a día es dramático; el cambio climático nos está pasando factura y todavía le bajan al presupuesto a medio ambiente para quienes investigan, eso quiere decir que los dejarán con los brazos cruzados”, indicó Sierra.

Por ejemplo, el Ideam hace unos años presentó un análisis que identificó al Cesar como una de las regiones más afectadas por los procesos de la desertificación a nivel nacional, con un cubrimiento de 950.719 hectáreas en ecosistemas secos (42.04 % ), de los que 613.795 hectáreas se encuentran en desertificación (27.14 %).

“En 2018, Valledupar tendrá unos $580 millones para inversión en medio ambiente y entonces les pregunto a las autoridades ¿Qué pasará con el río Cesar? Lo que se nos viene día a día es dramático”: Miguelángel Sierra.

Los municipios con mayor área en ecosistemas secos y con problemas de desertificación son: El Paso, Astrea, San Diego, Bosconia, Valledupar (40 %), La Paz, Becerril, Codazzi y El Copey.

Por Carlos Mario Jiménez
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