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Columnista - 13 enero, 2012

Arte de la Nº 5.

DOS PUNTOS Por: Germán Piedrahíta R. Si no se permite el reconteo, el Concejo de Valledupar es moralmente ilegal. Se inició el año hablando de la esférica. De la número cinco. Del deporte de multitudes. Del fútbol. De nuevo Messi declarado como el mejor del mundo. Inobjetable. Pekerman nuevo director técnico de la selección Colombia. […]

DOS PUNTOS

Por: Germán Piedrahíta R.

Si no se permite el reconteo, el Concejo de Valledupar es moralmente ilegal.

Se inició el año hablando de la esférica. De la número cinco. Del deporte de multitudes. Del fútbol. De nuevo Messi declarado como el mejor del mundo. Inobjetable. Pekerman nuevo director técnico de la selección Colombia. Esperado y deseado como extranjero para reventar las roscas.
Solo espero que no quiera seguir el camino del filósofo del “perder es ganar un poco”, que tras sus triunfos iniciales con una selección de continuidad, jugadores en la sub 17, después en la sub 20 y la mayoría en el Nacional, formaron el equipo que no podemos olvidar. Fue una cadena que no es fácil repetir en la parte final, tener a la base de la selección en un solo equipo. Pero Maturana se perdió y de España salió por su empecinamiento de “crear” su fútbol. Paso al Perú, perdió; en Centroamérica, perdió y llego a Millonarios y… Su tesis del 4-5-1 nunca sirvió y nadie en el mundo juega esas posturas de él y sus áulicos, Bolillo y Álvarez de 4-1-4-1 o su 4-4-1-1.
Que alguien nos explique cual es la función del 1 entre defensas y volantes o que debe hacer el uno entre volantes y un delantero.  Colombia lo trata de jugar cuando ningún club en el mundo ni siquiera lo intenta y todos nuestros jugadores llegan de esquemas tradicionales y funcionales, los  4-4-2 y 4-3-3, todos ellos con volantes de creación.
Colombia, como pocos países tiene en estos momentos jugadores de calidad en todas las posiciones porque me niego a creer que funcionen en los mejores equipos del planeta y cuando se reúnen no den pie con bola y lo siento, claro, cuando veo al goleador Falcao García, como un gladiador loco correr tras bolas que parecen lanzadas por las catapultas romanas.
Veo los volantes de creación sentados en la banca mientras los de destrucción no están preparados, en dos días, para “volverse” de creación. La defensa es una muralla de lujo, pero desbaratada cuando a un central lo envían de marcador o viceversa. Todo el que haya jugado sabe que  un esquema para que salga bien debe repetirse y en el nuevo sistema las selecciones no tienen tiempo para ensayar, sólo reunir a los mejores y, cada uno en su puesto, repetir movimientos y cubrir posibles errores mientras se analizan las falencias del contrario y se decide que sistema aplicar.
Como me he sentido un poco técnico, me atrevo a comentar que Colombia de local debería jugar un 4-3-3 con un volante de creación, uno mixto y uno de contención y de visitante un 4-4-2 con un volante de creación, dos mixtos y uno de de contención. Delanteros, estamos bien, con o sin Falcao.
Nos quedan los periodistas deportivos a los que sentimos arrodillados, acomodados o lambones, pues no son capaces de decir las cosas por sus nombres y los escuchamos hablando de partidos que pareciera que sólo ellos ven y como en los noticieros sólo pasan las pocas jugadas valiosas, pues el que no vio el juego, todo se lo cree.
El fútbol es el arte del pensamiento manejado con los pies, y el ballet de sus movimientos llevan al paroxismo cuando finalizan en una anotación que es gritada con bello cantado de tenor napolitano en esas tres letras universales: gol.

Num só transporte, a multidao contrita
Em alto de morte se levanta e grita
Seu unísono canto de esperança

Garrincha, o anjo, escuta e atende: GOOOOL /
é pura imagem: una G que chuta um O/
Dentro de meta, um L.  ¡É pura dança¡

Vinicius de Moraes.
Sí tenemos equipo para ir al mundial.

[email protected]

Columnista
13 enero, 2012

Arte de la Nº 5.

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Germán Piedrahíta R.

DOS PUNTOS Por: Germán Piedrahíta R. Si no se permite el reconteo, el Concejo de Valledupar es moralmente ilegal. Se inició el año hablando de la esférica. De la número cinco. Del deporte de multitudes. Del fútbol. De nuevo Messi declarado como el mejor del mundo. Inobjetable. Pekerman nuevo director técnico de la selección Colombia. […]


DOS PUNTOS

Por: Germán Piedrahíta R.

Si no se permite el reconteo, el Concejo de Valledupar es moralmente ilegal.

Se inició el año hablando de la esférica. De la número cinco. Del deporte de multitudes. Del fútbol. De nuevo Messi declarado como el mejor del mundo. Inobjetable. Pekerman nuevo director técnico de la selección Colombia. Esperado y deseado como extranjero para reventar las roscas.
Solo espero que no quiera seguir el camino del filósofo del “perder es ganar un poco”, que tras sus triunfos iniciales con una selección de continuidad, jugadores en la sub 17, después en la sub 20 y la mayoría en el Nacional, formaron el equipo que no podemos olvidar. Fue una cadena que no es fácil repetir en la parte final, tener a la base de la selección en un solo equipo. Pero Maturana se perdió y de España salió por su empecinamiento de “crear” su fútbol. Paso al Perú, perdió; en Centroamérica, perdió y llego a Millonarios y… Su tesis del 4-5-1 nunca sirvió y nadie en el mundo juega esas posturas de él y sus áulicos, Bolillo y Álvarez de 4-1-4-1 o su 4-4-1-1.
Que alguien nos explique cual es la función del 1 entre defensas y volantes o que debe hacer el uno entre volantes y un delantero.  Colombia lo trata de jugar cuando ningún club en el mundo ni siquiera lo intenta y todos nuestros jugadores llegan de esquemas tradicionales y funcionales, los  4-4-2 y 4-3-3, todos ellos con volantes de creación.
Colombia, como pocos países tiene en estos momentos jugadores de calidad en todas las posiciones porque me niego a creer que funcionen en los mejores equipos del planeta y cuando se reúnen no den pie con bola y lo siento, claro, cuando veo al goleador Falcao García, como un gladiador loco correr tras bolas que parecen lanzadas por las catapultas romanas.
Veo los volantes de creación sentados en la banca mientras los de destrucción no están preparados, en dos días, para “volverse” de creación. La defensa es una muralla de lujo, pero desbaratada cuando a un central lo envían de marcador o viceversa. Todo el que haya jugado sabe que  un esquema para que salga bien debe repetirse y en el nuevo sistema las selecciones no tienen tiempo para ensayar, sólo reunir a los mejores y, cada uno en su puesto, repetir movimientos y cubrir posibles errores mientras se analizan las falencias del contrario y se decide que sistema aplicar.
Como me he sentido un poco técnico, me atrevo a comentar que Colombia de local debería jugar un 4-3-3 con un volante de creación, uno mixto y uno de contención y de visitante un 4-4-2 con un volante de creación, dos mixtos y uno de de contención. Delanteros, estamos bien, con o sin Falcao.
Nos quedan los periodistas deportivos a los que sentimos arrodillados, acomodados o lambones, pues no son capaces de decir las cosas por sus nombres y los escuchamos hablando de partidos que pareciera que sólo ellos ven y como en los noticieros sólo pasan las pocas jugadas valiosas, pues el que no vio el juego, todo se lo cree.
El fútbol es el arte del pensamiento manejado con los pies, y el ballet de sus movimientos llevan al paroxismo cuando finalizan en una anotación que es gritada con bello cantado de tenor napolitano en esas tres letras universales: gol.

Num só transporte, a multidao contrita
Em alto de morte se levanta e grita
Seu unísono canto de esperança

Garrincha, o anjo, escuta e atende: GOOOOL /
é pura imagem: una G que chuta um O/
Dentro de meta, um L.  ¡É pura dança¡

Vinicius de Moraes.
Sí tenemos equipo para ir al mundial.

[email protected]