El atentado suicida en Kabul, fue reivindicado por el Estado Islámico (EI).
Un atentado suicida reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI) dejó al menos 63 muertos y 182 heridos el sábado por la noche en una boda en Kabul, Afganistán.
Según las autoridades de ese país, “entre las víctimas hay mujeres y niños”. Además, informaron que el ataque fue perpetrado por “un kamikaze que hizo detonar dispositivos”.
Los manifestantes informaron a medios internacionales que mientras bailaban y festejan se produjo la explosión. De inmediato el caos se apoderó del lugar, todos corrían, gritaban, lloraban y buscaban a sus seres queridos, según informó la AFP.
El atentado fue reivindicado este domingo por la filial afgana del EI. “El hermano kamikaze (…) logró alcanzar a un gran número de apóstatas”, escribió el grupo yihadista en su cuenta de Telegram.
El EI islamistas radicales sunitas, han atacado en numerosas ocasiones a la comunidad chiita de Afganistán, de la que formaba parte las familias de los novios.
“Convirtieron mi felicidad en desgracia. Perdí a mi hermano, mis amigos y a mi familia. Nunca más podré ser feliz”, aseguró Mirwais, el hombre que contrajo matrimonio el sábado, en declaraciones a una cadena de televisión de ese país.
Hoy, en la mañana, el panorama era desolador, la sala de fiestas tenía los ventanales rotos, el techo hundido por la fuerza del estallido y el suelo tenía manchas de sangre.
Tanto las embajadas presentes en Afganistán como las misiones de la OTAN y a ONU enviaron mensajes de condena por el atentado. El primer ministro afgano, Abdulá Abdulá, condenó en Twitter el “atentado terrorista” y se solidarizó con las familias, al tiempo que declaró que “este ataque odioso e inhumano es un crimen contra la humanidad”.
Según la ONU, el mes de julio fue el más sangriento desde mayo de 2017, con más de 1.500 civiles heridos o muertos en Afganistán. En 2018, 3.804 civiles.
Fuente: AFP
El atentado suicida en Kabul, fue reivindicado por el Estado Islámico (EI).
Un atentado suicida reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI) dejó al menos 63 muertos y 182 heridos el sábado por la noche en una boda en Kabul, Afganistán.
Según las autoridades de ese país, “entre las víctimas hay mujeres y niños”. Además, informaron que el ataque fue perpetrado por “un kamikaze que hizo detonar dispositivos”.
Los manifestantes informaron a medios internacionales que mientras bailaban y festejan se produjo la explosión. De inmediato el caos se apoderó del lugar, todos corrían, gritaban, lloraban y buscaban a sus seres queridos, según informó la AFP.
El atentado fue reivindicado este domingo por la filial afgana del EI. “El hermano kamikaze (…) logró alcanzar a un gran número de apóstatas”, escribió el grupo yihadista en su cuenta de Telegram.
El EI islamistas radicales sunitas, han atacado en numerosas ocasiones a la comunidad chiita de Afganistán, de la que formaba parte las familias de los novios.
“Convirtieron mi felicidad en desgracia. Perdí a mi hermano, mis amigos y a mi familia. Nunca más podré ser feliz”, aseguró Mirwais, el hombre que contrajo matrimonio el sábado, en declaraciones a una cadena de televisión de ese país.
Hoy, en la mañana, el panorama era desolador, la sala de fiestas tenía los ventanales rotos, el techo hundido por la fuerza del estallido y el suelo tenía manchas de sangre.
Tanto las embajadas presentes en Afganistán como las misiones de la OTAN y a ONU enviaron mensajes de condena por el atentado. El primer ministro afgano, Abdulá Abdulá, condenó en Twitter el “atentado terrorista” y se solidarizó con las familias, al tiempo que declaró que “este ataque odioso e inhumano es un crimen contra la humanidad”.
Según la ONU, el mes de julio fue el más sangriento desde mayo de 2017, con más de 1.500 civiles heridos o muertos en Afganistán. En 2018, 3.804 civiles.
Fuente: AFP