Un aguacero registrado en el área municipal de Astrea, Cesar, provocó  el desbordamiento del río Ariguaní, en el tramo comprendido entre el municipio de El Paso y el corregimiento de Arjona, el cual causó afectaciones en viviendas, finca aledañas y hasta la división de la vía que permite la comunicación con otras zonas rurales.

Ante la emergencia que se presentó,  habitantes solicitaron la ayuda de los entes encargados  para que se desplazaran hasta el lugar y atendieran la situación que había causado estragos en el área, llamado que fue atendido por la Oficina de Gestión de Riesgo Departamental, la cual  llegó hasta las poblaciones que resultaron damnificadas por la emergencia ambiental.

Yolima Gutiérrez, líder de la Oficina de Gestión de Riesgo, señaló que la situación ambiental, de la cual está siendo influenciada la región Caribe, se debe a ciclones tropicales que iniciaron desde el 1 junio y 2 octubre, lo cual es producto de la tormenta tropical Franklim. 

“Estamos haciendo un llamado de alerta temprana a los coordinadores municipales, para que estemos atentos  a atender las emergencias que traigan estos fenómenos ambientales, que probablemente seguirán registrando afectaciones en el departamento”, dijo Gutiérrez.

Asimismo la funcionaria mencionó algunas de las afectaciones que  dejó el desbordamiento del afluente en el municipio de Astrea en horas de la madrugada. “Una familia que se encontraba rodeada por la inundación fue rescatada por el Cuerpo de Bomberos, siendo reubicada en la vereda El Repelón. También registramos cerca de seis fincas inundadas, dos adultos que se habían quedado atrapados, al igual que dos menores, fueron rescatados y remitidos a un centro hospitalario para que fueran atendidos”, señaló Gutiérrez.

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Finalmente, Yosama Gutiérrez, entregó algunas recomendaciones para que sean tenidas en cuenta ante los cambios de clima que se estarán registrando en lo resta del año. “Si empieza a llover  y observa cambios en el cauce del río, o sonidos fuertes que pueden estar avisando una situación lamentable, lo mejor es alejarse de la zona. En estos tiempos de lluvia los propietarios de las viviendas deben hacer ajuste a la infraestructura, no refugiarse en lugares donde hayan torres de tensión, árboles con altura extrema, sistema de cableado. Buscar siempre áreas despejadas”, indicó. 

Según lo pronosticado por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM),  en la región Caribe se esperan niveles de  precipitaciones entre el 10% y 20 %, las cuales podrían  extenderse hasta el mes de enero de 2024.

POR YUSTIN VARELA