Y ADEMÁS Por: ALBERO HERAZO PALMERA Por las calles de Valledupar deambulan desesperadas muchas personas, entre ellos muchos amigos en busca de un trabajo permanente. Hacen parte del “ejército” de desocupados o subempleados que cada trimestre son contados como objetos por expertos en el manejo de las estadísticas. Este es el mal que está de […]
Y ADEMÁS
Por: ALBERO HERAZO PALMERA
Por las calles de Valledupar deambulan desesperadas muchas personas, entre ellos muchos amigos en busca de un trabajo permanente. Hacen parte del “ejército” de desocupados o subempleados que cada trimestre son contados como objetos por expertos en el manejo de las estadísticas.
Este es el mal que está de moda. Y así lo reconocen sus propias víctimas. El problema de moda, el desempleo, es aun más grave si se tiene en cuenta los altos índices. En el país hay 2.5 millones de desempleados.
Y ¿Dónde están las personas que se han quedado sin trabajo en los últimos años?. Se calcula que más del 80% de ellos se independizó, es decir, ingresó a la informalidad mediante el montaje de pequeños negocios, algunos de los cuales sobreviven, en tanto que otros se quebraron rápidamente.
Al incremento de la informalidad también contribuyo el plan de reducción del tamaño del Estado, iniciado durante el gobierno del presidente Cesar Gaviria personaje de ingrata recordación para el país y el partido Liberal.
Miles de funcionarios se acogieron a los planes voluntarios de retiro, que incluyeron jugosas indemnizaciones, las cuales fueron a parar a negocios informales ante la dificultad de ubicarse laboralmente.
El tema del empleo ha cobrado ya primerísima categoría, siendo uno de los grandes retos del Gobierno de Juan Manuel Santo. El nuevo gobierno reitero su compromiso de reducir a un digito el desempleo, que en Junio fue de 11.6%.
Todo lo que podemos decir al respecto ya se ha dicho. Pero no sobra insistir en que día ha día, minuto a minuto tenemos que pensar en ello, ser consciente de su gravedad. Es un problema de carácter humano, político.
Los actuales candidatos a la alcaldía Y a la gobernación deben comenzar a manejar este lenguaje, pero con honradez pues estamos harto de tantas mentiras sobre este tema.
No poder llevar el pan a la casa es, más que triste, cruel. Y convierte ha desesperados seres humanos en criminales, ladrones o simplemente en personas que violan la ley. El desempleo es muy alto. Algún amigo muy cercano me manifestaba esta semana que su auto control y buen humor no lo ha dejado naufragar. Lo más duro para él dice, es cuando sale y todos en la casa están esperando que regrese con alguna esperanza de trabajo y le preguntan: ¿Qué hay de nuevo papá?. Será que esto da lástima?.
Las autoridades, las empresas privadas, el gobierno nacional deben estimular con urgencia la creación de empleo. Menos mal este tema está entre las 12 prioridades legislativas del ejecutivo, ya que este “trabajará por la ley de formalización labora y del primer empleo, que busca estimular la generación de trabajo digno para los más jóvenes”.
EL COMPLEJO DEL AVESTRUZ.
A raíz del nuevo gobierno, los vallenatos Uribistas están pendiente de un puestecito tiene el complejo del avestruz: gente que siempre esconde la cabeza a pesar que quieren llegan antes que nadie.
INCREMENTO DE LA DELINCUENCIA
Cada día es más difícil vivir en Valledupar, en donde roban residencias y el atraco en plena vía pública es pan de cada minuto. Esta ciudad está plagada de elementos de pésima conducta para quienes es lo mismo despojar de sus pertenecías a los desprevenidos transeúntes de sus celulares o a usuarios de los cajeros automáticos. Aquí no más en la Plaza Alfonso López hay una pandilla de ladronzuelos de la cual fui víctima y además usted encuentra viciosos, lesbianas y maricas que tiene asolado el sector.
Resultaría inconsecuente responsabilizar a la policía, pero debe admitirse, sin que con ellos conlleve acusación alguna, que los métodos vigentes han sido absolutos para contrarrestar el incremento de la delincuencia.
Posdata:
Si el nuevo presidente Juan Manuel Santos gobierna con el cuidado que hasta ahora parece haberle invertido a la conformación de su gabinete, podríamos decir, respirando hondo, que arrancamos bien. Y finalmente los envidiosos es la especie de reptiles más divertida y aquí en Valledupar los hay, y por desgracia en abundancia
Y ADEMÁS Por: ALBERO HERAZO PALMERA Por las calles de Valledupar deambulan desesperadas muchas personas, entre ellos muchos amigos en busca de un trabajo permanente. Hacen parte del “ejército” de desocupados o subempleados que cada trimestre son contados como objetos por expertos en el manejo de las estadísticas. Este es el mal que está de […]
Y ADEMÁS
Por: ALBERO HERAZO PALMERA
Por las calles de Valledupar deambulan desesperadas muchas personas, entre ellos muchos amigos en busca de un trabajo permanente. Hacen parte del “ejército” de desocupados o subempleados que cada trimestre son contados como objetos por expertos en el manejo de las estadísticas.
Este es el mal que está de moda. Y así lo reconocen sus propias víctimas. El problema de moda, el desempleo, es aun más grave si se tiene en cuenta los altos índices. En el país hay 2.5 millones de desempleados.
Y ¿Dónde están las personas que se han quedado sin trabajo en los últimos años?. Se calcula que más del 80% de ellos se independizó, es decir, ingresó a la informalidad mediante el montaje de pequeños negocios, algunos de los cuales sobreviven, en tanto que otros se quebraron rápidamente.
Al incremento de la informalidad también contribuyo el plan de reducción del tamaño del Estado, iniciado durante el gobierno del presidente Cesar Gaviria personaje de ingrata recordación para el país y el partido Liberal.
Miles de funcionarios se acogieron a los planes voluntarios de retiro, que incluyeron jugosas indemnizaciones, las cuales fueron a parar a negocios informales ante la dificultad de ubicarse laboralmente.
El tema del empleo ha cobrado ya primerísima categoría, siendo uno de los grandes retos del Gobierno de Juan Manuel Santo. El nuevo gobierno reitero su compromiso de reducir a un digito el desempleo, que en Junio fue de 11.6%.
Todo lo que podemos decir al respecto ya se ha dicho. Pero no sobra insistir en que día ha día, minuto a minuto tenemos que pensar en ello, ser consciente de su gravedad. Es un problema de carácter humano, político.
Los actuales candidatos a la alcaldía Y a la gobernación deben comenzar a manejar este lenguaje, pero con honradez pues estamos harto de tantas mentiras sobre este tema.
No poder llevar el pan a la casa es, más que triste, cruel. Y convierte ha desesperados seres humanos en criminales, ladrones o simplemente en personas que violan la ley. El desempleo es muy alto. Algún amigo muy cercano me manifestaba esta semana que su auto control y buen humor no lo ha dejado naufragar. Lo más duro para él dice, es cuando sale y todos en la casa están esperando que regrese con alguna esperanza de trabajo y le preguntan: ¿Qué hay de nuevo papá?. Será que esto da lástima?.
Las autoridades, las empresas privadas, el gobierno nacional deben estimular con urgencia la creación de empleo. Menos mal este tema está entre las 12 prioridades legislativas del ejecutivo, ya que este “trabajará por la ley de formalización labora y del primer empleo, que busca estimular la generación de trabajo digno para los más jóvenes”.
EL COMPLEJO DEL AVESTRUZ.
A raíz del nuevo gobierno, los vallenatos Uribistas están pendiente de un puestecito tiene el complejo del avestruz: gente que siempre esconde la cabeza a pesar que quieren llegan antes que nadie.
INCREMENTO DE LA DELINCUENCIA
Cada día es más difícil vivir en Valledupar, en donde roban residencias y el atraco en plena vía pública es pan de cada minuto. Esta ciudad está plagada de elementos de pésima conducta para quienes es lo mismo despojar de sus pertenecías a los desprevenidos transeúntes de sus celulares o a usuarios de los cajeros automáticos. Aquí no más en la Plaza Alfonso López hay una pandilla de ladronzuelos de la cual fui víctima y además usted encuentra viciosos, lesbianas y maricas que tiene asolado el sector.
Resultaría inconsecuente responsabilizar a la policía, pero debe admitirse, sin que con ellos conlleve acusación alguna, que los métodos vigentes han sido absolutos para contrarrestar el incremento de la delincuencia.
Posdata:
Si el nuevo presidente Juan Manuel Santos gobierna con el cuidado que hasta ahora parece haberle invertido a la conformación de su gabinete, podríamos decir, respirando hondo, que arrancamos bien. Y finalmente los envidiosos es la especie de reptiles más divertida y aquí en Valledupar los hay, y por desgracia en abundancia