BAGDAD (AP)
Una serie de explosiones dejaron un saldo de 17 personas muertas el jueves en la capital iraquí, dijeron las autoridades, provocando miedo en una ciudad que ya estaba tensa mientras parte de la población votaba por adelantado antes de elecciones parlamentarias del domingo.
Los rebeldes han amenazado repetidamente con usar violencia para perturbar las elecciones que determinarán quién se hará responsable del país mientras las fuerzas de Estados Unidos se retiran y dejan sin resolver las profundas divisiones sociales.
Fueron tres explosiones mortales el jueves. En principio, un misil Katyusha mató a siete personas en el vecindario Hurriya a unos 500 metros de una casilla electoral que no había abierto todavía, dijo la policía.
El segundo ataque se dio en el vecindario de Mansur cuando un hombre-bomba detonó su chaleco explosivo cerca de un grupo de soldados alineados para votar, matando a seis y dejando 18 heridos.
En el tercer estallido, otro hombre-bomba se voló cerca de policías que esperaban ir a votar, matando a cuatro e hiriendo a 14 más, de acuerdo con registros de la policía y de hospitales.
La Misión de Asistencia de Naciones Unidas a Irak estimó que entre 600.000 y 700.000 personas votarían el jueves. Se espera que voten 19 millones de los 28 millones que pueden hacerlo además de iraquíes en 16 países alrededor del mundo.
Funcionarios estadounidenses e iraquíes han advertido que los insurgentes podrían lanzar ataques para interferir en las elecciones del 7 de marzo.