A un accidente casero atribuye el Comandante de la Policía Cesar, coronel Juan Pablo Guerrero, el hecho registrado el pasado sábado en una vivienda de la invasión Enmanuel, en el sur de Valledupar, donde dos menores resultaron heridos con tiros de escopeta.

El coronel Juan Pablo Guerrero, precisó que los menores de 11 y 17 años, respectivamente, habrían sido víctimas de la indebida manipulación de un arma de fuego que era de propiedad de alguno de los adultos residentes en la vivienda.
De acuerdo con las entrevistas realizadas por la Policía de Infancia y Adolescencia en el lugar de los hechos, se pudo evidenciar una serie de contradicciones en las declaraciones de los integrantes de la familia de los menores afectados, por lo cual quedó desvirtuada la primera hipótesis que daba cuenta de la presencia de sujetos encapuchados que dispararon contra los niños.
“Estamos en un proceso de recolección de información, conocemos que el arma estaba al interior de un inmueble”, dijo el alto oficial.
Agregó que el dueño del arma podría ser investigado por el delito de porte ilegal de armas, aunque la escopeta no ha sido encontrada, “el arma fue sustraída de allí para evitar precisamente la responsabilidad en lo sucedido”.
La Policía adelanta la investigación del caso en coordinación con la Fiscalía General de la Nación y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar,  que entrarán a determinar la posible responsabilidad penal por los padres de los menores afectados.
Los menores que tienen perdigones de escopeta incrustados en diferentes partes del cuerpo se recuperan en el hospital ‘Rosario Pumarejo de López’.