Consternados se encuentran los habitantes de los barrios de invasión Villa Consuelo y Francisco Javier, al noroccidente de Valledupar, luego que al mediodía de ayer, dos jóvenes fueron asesinados a tiros mientras se bañaban en una poza.
Al noroccidente de Valledupar
Consternados se encuentran los habitantes de los barrios de invasión Villa Consuelo y Francisco Javier, al noroccidente de Valledupar, luego que al mediodía de ayer, dos jóvenes fueron asesinados a tiros mientras se bañaban en una poza.
Se trata de José Gregorio Caro Villegas, de 24 años, quien residía con una tía suya, en el barrio Villa Consuelo. Era hijo de Solmery Villegas Díaz y trabajaba en oficios varios.
Y Edinson Campo Escando, de 24 años, oriundo del municipio La Jagua de Ibirico, tenía cinco años de estar radicado en el barrio Francisco Javier de Valledupar y trabajaba como vendedor de mangos.
El crimen de los dos jóvenes ocurrió, cuando ambos se bañaban en la poza ubicada a un kilómetro de los barrios Villa Consuelo y Francisco Javier, zona inhóspita en la que habitantes de este sector subnormal acostumbran a bañarse y lavar ropa, ya que no cuentan con el servicio de agua potable.
La Policía acordonó la zona mientras los peritos de la Fiscalía realizaban la inspección y levantamiento de los cadáveres semidesnudos, con el fin de recolectar evidencias que permitan esclarecer el crimen.
“Eran unos muchachos sanos que no tenían problemas con nadie, la verdad estamos sorprendidos con sus muertes”, dijo a EL PILÓN un vecino de Edinson Campo Escando.
Entre tanto, el comandante de la Policía en el Departamento del Cesar, Coronel Hugo Javier Velásquez Pulido manifestó que todavía no hay pistas sobre lo sucedido y que la investigación del caso fue asumida por el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía.
RESTRICCIONES A LA PRENSA
La Policía no permitió el ingreso a la zona de los reporteros de los diferentes medios de comunicación de la ciudad que hacían el cubrimiento del hecho violento. Sin embargo, algunos comunicadores se las ingeniaron para poder obtener la información y trepándose en los arboles para captar las imágenes.
Consternados se encuentran los habitantes de los barrios de invasión Villa Consuelo y Francisco Javier, al noroccidente de Valledupar, luego que al mediodía de ayer, dos jóvenes fueron asesinados a tiros mientras se bañaban en una poza.
Al noroccidente de Valledupar
Consternados se encuentran los habitantes de los barrios de invasión Villa Consuelo y Francisco Javier, al noroccidente de Valledupar, luego que al mediodía de ayer, dos jóvenes fueron asesinados a tiros mientras se bañaban en una poza.
Se trata de José Gregorio Caro Villegas, de 24 años, quien residía con una tía suya, en el barrio Villa Consuelo. Era hijo de Solmery Villegas Díaz y trabajaba en oficios varios.
Y Edinson Campo Escando, de 24 años, oriundo del municipio La Jagua de Ibirico, tenía cinco años de estar radicado en el barrio Francisco Javier de Valledupar y trabajaba como vendedor de mangos.
El crimen de los dos jóvenes ocurrió, cuando ambos se bañaban en la poza ubicada a un kilómetro de los barrios Villa Consuelo y Francisco Javier, zona inhóspita en la que habitantes de este sector subnormal acostumbran a bañarse y lavar ropa, ya que no cuentan con el servicio de agua potable.
La Policía acordonó la zona mientras los peritos de la Fiscalía realizaban la inspección y levantamiento de los cadáveres semidesnudos, con el fin de recolectar evidencias que permitan esclarecer el crimen.
“Eran unos muchachos sanos que no tenían problemas con nadie, la verdad estamos sorprendidos con sus muertes”, dijo a EL PILÓN un vecino de Edinson Campo Escando.
Entre tanto, el comandante de la Policía en el Departamento del Cesar, Coronel Hugo Javier Velásquez Pulido manifestó que todavía no hay pistas sobre lo sucedido y que la investigación del caso fue asumida por el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía.
RESTRICCIONES A LA PRENSA
La Policía no permitió el ingreso a la zona de los reporteros de los diferentes medios de comunicación de la ciudad que hacían el cubrimiento del hecho violento. Sin embargo, algunos comunicadores se las ingeniaron para poder obtener la información y trepándose en los arboles para captar las imágenes.