Hijo de una dinastía musical:

Hay luto en el folclor y los acordeones vallenatos, por el fallecimiento del Décimo Segundo Rey de la Leyenda, Rafael Antonio Salas Mendoza, quien se destacó por su amor por la música Vallenata, la cual aprendió a través de su padre, “Toño” Salas y su tío Emiliano Zuleta Baquero, hijos de la legendaria Vieja Sara.

El Rey Vallenato 1979 era oriundo de El Plan – Guajira, contaba con 58 años de edad, falleció tranquilo, en la Clínica Valledupar, en la madrugada de ayer, acompañado de sus familiares, hijas y de los sacerdotes Sulivan Granados y Dilson Torrejano.

Su hija, Marieth Salas, comentó a diario EL PILÓN que “Rafa” como lo llamaban, fue muy querido por su familia y amigos, apegado a sus nietos;  aparte de su pasión por la música, le gustaban mucho los animales y la plantas el cual cuidaba como celaba su acordeón. “Mi papá siempre dijo que el no estaba solo, pues vio la solidaridad y el acompañamiento de sus amigos, compañeros, familiares y comunidad en general que lo apreciaron y reconocían en él un legado de la música vallenata”.

El cuerpo sin vida de Rafael Salas, es Velado en la funeraria Los Ángeles, donde familiares, amigos, compañeros y paisanos le dan su último adiós. El Sepelio se realizará hoy a las tres de la tarde, en la parroquia San José Obrero, del barrio Primero de Mayo y será sepultado en el cementerio Jardines del Ecce Homo.

La Fundación Festival de la Leyenda Vallenata lamenta el deceso del Rey Vallenato de 1979, quien jugó un papel importante en la difusión del Festival y fue un amigo fiel, solidario, grato y un maestro del acordeón.

El presidente de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, Rodolfo Molina Araujo, sobre el deceso del Rey Vallenato, Rafael Salas, indicó que “Rafa, no solamente fue un  Rey Vallenato, si no, uno de esos hombres que dejó su huella en su paso por la vida, a través de su acordeón, de sus canciones y de su ejemplo. El, fue un incesante trabajador del folclor y fue un hijo fiel del Festival de la Leyenda Vallenata. Registramos con dolor la partida del Rey Vallenato, Rafael Salas, que cumplió con su misión y dejó su mejor enseñanza, sacar adelante esa gran dinastía de donde procedía”.

Rey Vallenato 1979
Rafael Salas, décimo segundo Rey Vallenato, tiene una larga y pesada carga genealógica a sus espaldas. Es nada menos que el hijo del legendario Antonio “Toño” Salas y sobrino juglar vallenato Emiliano Zuleta Baquero. Había nacido en El Plan – Guajira el 17 de septiembre de 1952.
En el Festival de la Leyenda Vallenata recorrió todas las categorías como acordeonero, destacándose sus actuaciones en 1971 y en 1975 cuando ocupó las segundas posiciones como Aficionado.  En 1973, en las semiprofesionales, ocupó el tercer puesto y en 1976, el segundo.
Grabó varios discos de larga duración y sus más destacadas interpretaciones las hizo al lado del desaparecido cantante Armando Moscote, considerado el Rey de la Canción Inédita; Ivo Diaz, entre otros.
A “Rafa” como se le decía cariñosamente en el ambiente, se le buscaba con mucha frecuencia para animar las parrandas, porque se le consideraba un parrandero por excelencia, “para esta temporada, donde se avecina el Festival Vallenato, en otros tiempos ya estaba contratado para amenizar las mejores parrandas Vallenatas” recuerdan sus amigos más allegados.