Nuevos hallazgos. En mi exploración de antiguos recortes de prensa atesorados, esta vez di con dos en donde literatura y sabiduría se fusionan. El primero, “Instrucciones de Shuruppak”, texto sumerio de cuando el ‘papel’ era todavía «tablilla de arcilla», alrededor de 2.500 a.C. Su valor es más de carácter moral que literario. Un ideal moral […]
Nuevos hallazgos. En mi exploración de antiguos recortes de prensa atesorados, esta vez di con dos en donde literatura y sabiduría se fusionan. El primero, “Instrucciones de Shuruppak”, texto sumerio de cuando el ‘papel’ era todavía «tablilla de arcilla», alrededor de 2.500 a.C. Su valor es más de carácter moral que literario. Un ideal moral de clara transculturación con los semitas del Antiguo Testamento (Proverbios, diez mandamientos…). Sus temas son el respeto filial, el robo, el asesinato, la administración y organización social del reino… Por su estilo, son textos que emparentan con la antigua sabiduría del próximo Oriente.
Como arriba se dice, esta tradición sumeria viene en formato de «instrucciones». Con anuencia del ocupado lector, ofrezco esta selecta muestra de sabiduría.
El segundo documento es «Un poema de hace “27 siglos”», siglo VIII antes de nuestra era; atribuido al poeta chino Kuan-tseu. Memorable pieza, fundante de la tradición literaria china. Establece una armonía entre Hombre y Naturaleza. Quizá venga de allá la tradición indígena que a la tierra llama «madre», que para el ‘blanco’ es a veces objeto de mofa. Trágica ironía son los incendios, que estuvieron a nada de entrar a Bogotá. La obcecada obstinación nos podría llevar a la extinción. Entre tanto, recordemos el poema chino.
Si das un pescado a un hombre,
se alimentará una vez;
Si le enseñas a pescar,
se alimentará toda su vida
Si tus planes son para un año, siembra trigo.
Si son para diez años, planta un árbol.
Si son para cien años, instruye al pueblo.
Sembrando trigo una vez, cosecharás una vez.
Plantando un árbol, cosecharás diez veces.
Instruyendo al pueblo, cosecharás cien veces.
Kuan-tseu
Se le puede acotar a Kuan-tseu que, de un ciudadano instruido se puede esperar que plante uno o más árboles, no así del necio. Con una inferencia: el rol del educador en la formación de una conciencia ambiental en los estudiantes es, hoy por hoy, fundamental y urgente.
Por Donaldo Mendoza
Nuevos hallazgos. En mi exploración de antiguos recortes de prensa atesorados, esta vez di con dos en donde literatura y sabiduría se fusionan. El primero, “Instrucciones de Shuruppak”, texto sumerio de cuando el ‘papel’ era todavía «tablilla de arcilla», alrededor de 2.500 a.C. Su valor es más de carácter moral que literario. Un ideal moral […]
Nuevos hallazgos. En mi exploración de antiguos recortes de prensa atesorados, esta vez di con dos en donde literatura y sabiduría se fusionan. El primero, “Instrucciones de Shuruppak”, texto sumerio de cuando el ‘papel’ era todavía «tablilla de arcilla», alrededor de 2.500 a.C. Su valor es más de carácter moral que literario. Un ideal moral de clara transculturación con los semitas del Antiguo Testamento (Proverbios, diez mandamientos…). Sus temas son el respeto filial, el robo, el asesinato, la administración y organización social del reino… Por su estilo, son textos que emparentan con la antigua sabiduría del próximo Oriente.
Como arriba se dice, esta tradición sumeria viene en formato de «instrucciones». Con anuencia del ocupado lector, ofrezco esta selecta muestra de sabiduría.
El segundo documento es «Un poema de hace “27 siglos”», siglo VIII antes de nuestra era; atribuido al poeta chino Kuan-tseu. Memorable pieza, fundante de la tradición literaria china. Establece una armonía entre Hombre y Naturaleza. Quizá venga de allá la tradición indígena que a la tierra llama «madre», que para el ‘blanco’ es a veces objeto de mofa. Trágica ironía son los incendios, que estuvieron a nada de entrar a Bogotá. La obcecada obstinación nos podría llevar a la extinción. Entre tanto, recordemos el poema chino.
Si das un pescado a un hombre,
se alimentará una vez;
Si le enseñas a pescar,
se alimentará toda su vida
Si tus planes son para un año, siembra trigo.
Si son para diez años, planta un árbol.
Si son para cien años, instruye al pueblo.
Sembrando trigo una vez, cosecharás una vez.
Plantando un árbol, cosecharás diez veces.
Instruyendo al pueblo, cosecharás cien veces.
Kuan-tseu
Se le puede acotar a Kuan-tseu que, de un ciudadano instruido se puede esperar que plante uno o más árboles, no así del necio. Con una inferencia: el rol del educador en la formación de una conciencia ambiental en los estudiantes es, hoy por hoy, fundamental y urgente.
Por Donaldo Mendoza