Este domingo 12 de mayo los colombianos, al igual que en muchos otros países del mundo, celebramos el Día de las Madres, fecha que está cargada de una gran variedad de ingredientes y por ello nunca pasa desapercibida.

En esa amplia mezcla de aspectos que se deriva de esta fecha especial debemos darle mayor relevancia al significado de la unidad familiar, base de la armonía y la sana convivencia de una sociedad civilizada.

Es una ocasión para rendirle culto al espíritu de la maternidad, más allá de lo comercial. Es un día marcado por la gratitud, el amor y el reconocimiento hacia aquellas mujeres que nos dieron vida, nos criaron y nos guiaron con amor incondicional.

Toda motivación que apunte a compartir en familia, a revivir la amistad y a reactivar los vínculos afectivos de los seres humanos, siempre serán de mucho valor en estas nuevas y modernas dinámicas de vida que se experimentan en la actualidad, donde pareciera que lo material cada vez más le gana la carrera a lo sentimental.

Es cierto que el comercio florece en esta fecha, con una amplia gama de productos y servicios dirigidos a celebrar a las madres. Desde regalos elaborados hasta cenas lujosas, las opciones son infinitas. Sin embargo, en medio de este despliegue comercial, no perdamos de vista el verdadero significado de esta jornada: honrar el amor y el sacrificio que nuestras madres han dedicado a nuestras vidas. Un gesto sincero, aunque simple, puede tener un impacto mucho mayor que el regalo más costoso.

Es por ello que los expertos en estos temas recomiendan que, en lugar de centrarnos únicamente en regalos materiales, consideremos regalar tiempo de calidad y atención. “Un paseo tranquilo por el parque, una conversación sincera acompañada de una taza de café o incluso un simple abrazo pueden significar mucho más que cualquier obsequio material. El tiempo es el regalo más valioso que podemos ofrecer, y dedicarlo a nuestras madres en su día, es una manera genuina de demostrar nuestro amor y aprecio”, dijo a EL PILÓN una reconocida socióloga de Valledupar.

Es importante tener en cuenta las recomendaciones para celebrar de forma significativa, entre ellas se mencionan: recalcar en expresiones de gratitud, disponer de buena calidad de tiempo para la madre, desarrollar actividades encaminadas a valorar recuerdos tangibles muy significativos, ayudar para realizar tareas o proyectos que ella haya pospuesto y brindarle apoyo emocional frente a cualquier circunstancia que esté viviendo. “A veces, el mejor regalo es simplemente estar allí para ella”, dijo el padre en la misa.

Aprovechemos entonces esta oportunidad para celebrar el amor, la dedicación y la fortaleza de las mujeres que nos dieron la vida. Más allá de las flores, los chocolates y los regalos, es el amor ilimitado y los recuerdos compartidos lo que realmente hace que este día sea especial.

EXITOSO FORO DEL PATRIMONIO CULTURAL

¿Son los cementerios y sus tumbas patrimonio? Sí. ¿Es la tradición sandiegana de las mujeres ‘aguateras’ que recogían el agua en los ‘puertos’, de un brazo del río Chiríaimo, patrimonio? Sí. Entre otros temas que se expusieron en el foro patrimonial de dos días que terminó ayer con un recorrido nocturno del Centro Histórico, liderado por jóvenes universitarios, profesores, visitantes y conferencistas.