No es primera vez que el presidente de Colombia se inmiscuye en temas internos de otros países.
El presidente de Perú Pedro Castillo desató el miércoles 7 de diciembre un fuerte caos institucional después de ordenar cerrar temporalmente el Congreso y decretar un gobierno de excepción, medidas que lo dejaron por fuera del poder.
Tras este caos, el presidente de Colombia Gustavo Petro decidió dar su opinión, aunque nadie “se lo pidió”. Petro no solo calificó como “una derrota” el que destituyeran a Castillo por intentar disolver el Congreso de Perú sino que también pidió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que, aplicando la Convención Americana de Derechos Humanos, expida medidas cautelares para quien fue su homólogo hasta el pasado miércoles.
Esta no es la primera vez que el presidente colombiano se inmiscuye en temas internos de otros países, pero, en esta ocasión, la Cancillería de Perú sí ‘le tensó las orejas’ al mandatario.
“En el Perú existe pleno respeto a los derechos humanos, al debido proceso y a la separación de poderes, lo que garantiza el acceso de todos nuestros ciudadanos a una justicia independiente. El Gobierno del Perú continuará profundizando la amistad, cooperación e integración que unen a ambos pueblos, en base al respeto mutuo, la plena vigencia del derecho internacional y los valores compartidos sobre democracia y derechos humanos”, expresó en Twitter la Cancillería de Perú.
De la misma manera, la congresista del partido Acción Popular Maricarmen Alva, le dijo a Petro: “Yo le solicito que no se inmiscuya en los temas internos de nuestro país. Está violando el derecho internacional, el principio de no intervención. No tiene ningún derecho a hacerlo. Además, la Corte Interamericana no tiene que meterse tampoco en nada de los temas internos nuestros. Nosotros sabemos por qué Castillo se ha vacado. Todo el mundo lo sabe acá, no se está contraviniendo ningún principio de elegir o ser elegido, es increíble esa frase”.
No es primera vez que el presidente de Colombia se inmiscuye en temas internos de otros países.
El presidente de Perú Pedro Castillo desató el miércoles 7 de diciembre un fuerte caos institucional después de ordenar cerrar temporalmente el Congreso y decretar un gobierno de excepción, medidas que lo dejaron por fuera del poder.
Tras este caos, el presidente de Colombia Gustavo Petro decidió dar su opinión, aunque nadie “se lo pidió”. Petro no solo calificó como “una derrota” el que destituyeran a Castillo por intentar disolver el Congreso de Perú sino que también pidió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que, aplicando la Convención Americana de Derechos Humanos, expida medidas cautelares para quien fue su homólogo hasta el pasado miércoles.
Esta no es la primera vez que el presidente colombiano se inmiscuye en temas internos de otros países, pero, en esta ocasión, la Cancillería de Perú sí ‘le tensó las orejas’ al mandatario.
“En el Perú existe pleno respeto a los derechos humanos, al debido proceso y a la separación de poderes, lo que garantiza el acceso de todos nuestros ciudadanos a una justicia independiente. El Gobierno del Perú continuará profundizando la amistad, cooperación e integración que unen a ambos pueblos, en base al respeto mutuo, la plena vigencia del derecho internacional y los valores compartidos sobre democracia y derechos humanos”, expresó en Twitter la Cancillería de Perú.
De la misma manera, la congresista del partido Acción Popular Maricarmen Alva, le dijo a Petro: “Yo le solicito que no se inmiscuya en los temas internos de nuestro país. Está violando el derecho internacional, el principio de no intervención. No tiene ningún derecho a hacerlo. Además, la Corte Interamericana no tiene que meterse tampoco en nada de los temas internos nuestros. Nosotros sabemos por qué Castillo se ha vacado. Todo el mundo lo sabe acá, no se está contraviniendo ningún principio de elegir o ser elegido, es increíble esa frase”.