Y aquí hago referencia a la lección que en alguna oportunidad le dio un profesor a sus alumnos sobre cómo afrontar los errores.
“Optimistas y pesimistas contribuyen a la sociedad. El optimista construye el avión, el pesimista el paracaídas”. Esta frase de George Bernard Shaw cae como anillo al dedo en esta época en la que quienes creyeron en las justas deportivas, XIX Juegos Bolivarianos en Valledupar, se la jugaron toda.
Y aquí hago referencia a la lección que en alguna oportunidad le dio un profesor a sus alumnos sobre cómo afrontar los errores.
“Sucedió que un día de clases el profesor llega, toma su marcador y en el tablero escribe la tabla de multiplicar del 9, la operación y al frente su resultado, al final después de escribir los resultados correctamente, escribió 9 x 10 igual a 91, esto generó risas y burlas entre sus estudiantes, ante esto el profesor pregunta ¿de qué se ríen, qué les causa tanta gracia?
Uno de los estudiantes se levanta y le señala al profesor el error, 9 x 10 no es 91 es 90 y alardea de haber corregido al profesor, el cual le indica: ‘Bien, esto demuestra señores que no han tenido en cuenta que he tenido diez aciertos, sobre ello no me has felicitado. Solo se han fijado en el único error que he cometido. Y así los juzgará la vida a cada uno de ustedes; el mundo no alabará los millones de aciertos que tengas, sino que se fijará en los pocos errores que cometas’
Con los XIX Juegos Bolivarianos, sucedió algo bastante singular y parecido, en la medida que el tiempo avanzaba y a las obras de los escenarios deportivos no se les notaba el progreso, según la óptica arquitectónica que cada uno manejaba, se fueron lance en ristre contra los juegos.
Generaron un ambiente hostil y llenos de malas energías para que los juegos tropezaran y se hundieran; los que en otrora figuraron como los ‘mesías’ de los juegos se dedicaron a torpedearlo. No lo lograron afortunadamente.
Hoy martes 28 de junio de 2022, van cuatro días y unas horas desde la inauguración de los juegos y en cada escenario de Valledupar, con sus respectivas subsedes el aforo del público ha sido espectacular, responden los vallenatos y toda la población que nos visita; grande han visto a Valledupar y eso nos honra de manera especial.
Volvemos a George Bernard Shaw, para que analicemos esta frase: “Un triunfador es aquel que se levanta y busca las circunstancias que desea, y si no las encuentra las fabrica”
Ser capaces de luchar y perseguir lo que queremos, es lo que el autor defiende como lo necesario para ser un triunfador.
Realmente nos hemos convertido en expertos para señalar, para cuestionar, para menospreciar y dudar de las capacidades de los demás, incluso de la propia.
“El mundo no valora los muchos aciertos de una persona, pero si se fija de manera perversa en el único error que comete”
Gracias a la doctora Ana Edurne Camacho Corredor, directora de los juegos y a cada obrero de su equipo, a todos; gracias a aquellos que hicieron posible hacer de Valledupar la capital cultural y deportiva de Colombia.
También a los que creímos que era posible lograrlo. La actitud en la vida debe ser positiva, nunca negativa, arriba Valledupar maternal centenaria y bravía; vallenato ama tu ciudad, cuídala, respétala.
A Dios lo que es de Dios y al Cesar lo que es del Cesar, su capital. Sólo Eso
Y aquí hago referencia a la lección que en alguna oportunidad le dio un profesor a sus alumnos sobre cómo afrontar los errores.
“Optimistas y pesimistas contribuyen a la sociedad. El optimista construye el avión, el pesimista el paracaídas”. Esta frase de George Bernard Shaw cae como anillo al dedo en esta época en la que quienes creyeron en las justas deportivas, XIX Juegos Bolivarianos en Valledupar, se la jugaron toda.
Y aquí hago referencia a la lección que en alguna oportunidad le dio un profesor a sus alumnos sobre cómo afrontar los errores.
“Sucedió que un día de clases el profesor llega, toma su marcador y en el tablero escribe la tabla de multiplicar del 9, la operación y al frente su resultado, al final después de escribir los resultados correctamente, escribió 9 x 10 igual a 91, esto generó risas y burlas entre sus estudiantes, ante esto el profesor pregunta ¿de qué se ríen, qué les causa tanta gracia?
Uno de los estudiantes se levanta y le señala al profesor el error, 9 x 10 no es 91 es 90 y alardea de haber corregido al profesor, el cual le indica: ‘Bien, esto demuestra señores que no han tenido en cuenta que he tenido diez aciertos, sobre ello no me has felicitado. Solo se han fijado en el único error que he cometido. Y así los juzgará la vida a cada uno de ustedes; el mundo no alabará los millones de aciertos que tengas, sino que se fijará en los pocos errores que cometas’
Con los XIX Juegos Bolivarianos, sucedió algo bastante singular y parecido, en la medida que el tiempo avanzaba y a las obras de los escenarios deportivos no se les notaba el progreso, según la óptica arquitectónica que cada uno manejaba, se fueron lance en ristre contra los juegos.
Generaron un ambiente hostil y llenos de malas energías para que los juegos tropezaran y se hundieran; los que en otrora figuraron como los ‘mesías’ de los juegos se dedicaron a torpedearlo. No lo lograron afortunadamente.
Hoy martes 28 de junio de 2022, van cuatro días y unas horas desde la inauguración de los juegos y en cada escenario de Valledupar, con sus respectivas subsedes el aforo del público ha sido espectacular, responden los vallenatos y toda la población que nos visita; grande han visto a Valledupar y eso nos honra de manera especial.
Volvemos a George Bernard Shaw, para que analicemos esta frase: “Un triunfador es aquel que se levanta y busca las circunstancias que desea, y si no las encuentra las fabrica”
Ser capaces de luchar y perseguir lo que queremos, es lo que el autor defiende como lo necesario para ser un triunfador.
Realmente nos hemos convertido en expertos para señalar, para cuestionar, para menospreciar y dudar de las capacidades de los demás, incluso de la propia.
“El mundo no valora los muchos aciertos de una persona, pero si se fija de manera perversa en el único error que comete”
Gracias a la doctora Ana Edurne Camacho Corredor, directora de los juegos y a cada obrero de su equipo, a todos; gracias a aquellos que hicieron posible hacer de Valledupar la capital cultural y deportiva de Colombia.
También a los que creímos que era posible lograrlo. La actitud en la vida debe ser positiva, nunca negativa, arriba Valledupar maternal centenaria y bravía; vallenato ama tu ciudad, cuídala, respétala.
A Dios lo que es de Dios y al Cesar lo que es del Cesar, su capital. Sólo Eso