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Columnista - 25 enero, 2011

Universidad Nacional; educación con calidad

BITÁCORA Por: Oscar Ariza Daza Con la concreción y arranque del proyecto de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Caribe, campus Cesar, se inicia una nueva etapa en la historia de la educación superior en el departamento. Es una excelente oportunidad para que la población acceda a la educación a muy bajos costos y con […]

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BITÁCORA

Por: Oscar Ariza Daza

Con la concreción y arranque del proyecto de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Caribe, campus Cesar, se inicia una nueva etapa en la historia de la educación superior en el departamento. Es una excelente oportunidad para que la población acceda a la educación a muy bajos costos y con la garantía de que sus programas de pregrado y postgrado gozan de calidad y reconocimiento por ser la mejor universidad pública del país, con acreditación institucional, por su trayectoria académica e investigativa reflejada en más de doscientos grupos de investigación reconocidos y categorizados ante Colciencias

La educación es la única herramienta que nos permite entrar en una modernidad asistida por el respeto a los derechos fundamentales que no son sino la respuesta ilustrada al deseo del alcanzar la paz, a través del conocimiento que nos aproxima a la madurez y a la civilidad. Así lo visiona un gobierno preocupado y comprometido en la restitución de los derechos fundamentales, entre ellos el de la educación más allá de su ciclo básico y medio.

La UNAL  está llamada a fortalecer la red de universidades públicas en el Caribe, lo que redundará en beneficio de otros centros de educación superior como la Universidad Popular del Cesar, en la medida en que podrán intercambiar saberes específicos formando redes interinstitucionales que validen la sinergia que se propone a través de las sociedades del conocimiento y que se resume en la creación de ambientes colaborativos para fortalecerse académica e investigativamente a través de la experiencia de otros.

La Universidad Nacional es una institución acreditada por alta calidad, lo que traduce que todos sus procesos, tanto académicos, administrativos, investigativos y de extensión tienen el rigor y la fortaleza suficiente para ser reconocidos en cualquier parte del país o del mundo. Eso garantiza que los cesarenses gocen de una formación superior con los mismos niveles de calidad de la sede central.

Es una oportunidad histórica para que los profesionales del Cesar puedan aspirar a postgrados a bajos costos y con alta calidad, lo que mejorará la competitividad de quienes antes no podían cursar estos programas, por no haberlos en la región o por sus precios demasiado elevados.

Los pregrados que se anuncian para el 2012 estarán en el orden de los 40, con la oportunidad de que los estudiantes que los cursan puedan trasladarse a otras sedes  en el país a seguir con sus estudios si así lo requieren.

Pero más que una oferta de programas, la universidad beneficiará los procesos productivos del Cesar a través de acompañamiento y trabajos de extensión que hacen parte del abanico de ofertas que extienden como parte de su misión, además de la reactivación económica que surge como consecuencia de su accionar.

La construcción del campus universitario en un sitio estratégico comprendido entre Valledupar y La Paz, hace del proyecto un reto mayor que necesita de la intervención de todos los sectores del departamento para que cumpla la función social de integrar. De allí que la creación de la Universidad pasa de ser un proyecto de gobierno a convertirse en patrimonio de todos los cesarenses, especialmente de la población de La Paz,  llamada a transformarse a partir de la creación de esta sede que  por dinámica propia obliga a crear una infraestructura logística para la población estudiantil, que provenga de otros municipios y regiones del país.
Así las cosas, la UNAL se convierte en un polo de desarrollo  que activa una economía formal e informal que depende de ella. El sector de la construcción,  los restaurantes, el transporte, las papelerías y  los hogares que ofrecen alojamiento y comida a estudiantes se afecta en forma positiva, es por ello que desde ya, La Paz necesita comenzar a prepararse para este nuevo reto que cambiará la dinámica social, económica y cultural del municipio.

Quizás el mayor desafío que enfrenta la región y Valledupar como tal, es empezar a repensar el proyecto de área metropolitana en el que por fin haya una integración de los municipios llamados a conformarla. Será la Universidad Nacional el elemento detonante para que este proyecto comience a andar desde una sinergia administrativa que permita un mayor crecimiento económico y sociocultural de las localidades que estarán cobijadas por el radio de acción de este importante centro de estudios superiores.

[email protected]

Columnista
25 enero, 2011

Universidad Nacional; educación con calidad

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Oscar Ariza Daza

BITÁCORA Por: Oscar Ariza Daza Con la concreción y arranque del proyecto de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Caribe, campus Cesar, se inicia una nueva etapa en la historia de la educación superior en el departamento. Es una excelente oportunidad para que la población acceda a la educación a muy bajos costos y con […]


BITÁCORA

Por: Oscar Ariza Daza

Con la concreción y arranque del proyecto de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Caribe, campus Cesar, se inicia una nueva etapa en la historia de la educación superior en el departamento. Es una excelente oportunidad para que la población acceda a la educación a muy bajos costos y con la garantía de que sus programas de pregrado y postgrado gozan de calidad y reconocimiento por ser la mejor universidad pública del país, con acreditación institucional, por su trayectoria académica e investigativa reflejada en más de doscientos grupos de investigación reconocidos y categorizados ante Colciencias

La educación es la única herramienta que nos permite entrar en una modernidad asistida por el respeto a los derechos fundamentales que no son sino la respuesta ilustrada al deseo del alcanzar la paz, a través del conocimiento que nos aproxima a la madurez y a la civilidad. Así lo visiona un gobierno preocupado y comprometido en la restitución de los derechos fundamentales, entre ellos el de la educación más allá de su ciclo básico y medio.

La UNAL  está llamada a fortalecer la red de universidades públicas en el Caribe, lo que redundará en beneficio de otros centros de educación superior como la Universidad Popular del Cesar, en la medida en que podrán intercambiar saberes específicos formando redes interinstitucionales que validen la sinergia que se propone a través de las sociedades del conocimiento y que se resume en la creación de ambientes colaborativos para fortalecerse académica e investigativamente a través de la experiencia de otros.

La Universidad Nacional es una institución acreditada por alta calidad, lo que traduce que todos sus procesos, tanto académicos, administrativos, investigativos y de extensión tienen el rigor y la fortaleza suficiente para ser reconocidos en cualquier parte del país o del mundo. Eso garantiza que los cesarenses gocen de una formación superior con los mismos niveles de calidad de la sede central.

Es una oportunidad histórica para que los profesionales del Cesar puedan aspirar a postgrados a bajos costos y con alta calidad, lo que mejorará la competitividad de quienes antes no podían cursar estos programas, por no haberlos en la región o por sus precios demasiado elevados.

Los pregrados que se anuncian para el 2012 estarán en el orden de los 40, con la oportunidad de que los estudiantes que los cursan puedan trasladarse a otras sedes  en el país a seguir con sus estudios si así lo requieren.

Pero más que una oferta de programas, la universidad beneficiará los procesos productivos del Cesar a través de acompañamiento y trabajos de extensión que hacen parte del abanico de ofertas que extienden como parte de su misión, además de la reactivación económica que surge como consecuencia de su accionar.

La construcción del campus universitario en un sitio estratégico comprendido entre Valledupar y La Paz, hace del proyecto un reto mayor que necesita de la intervención de todos los sectores del departamento para que cumpla la función social de integrar. De allí que la creación de la Universidad pasa de ser un proyecto de gobierno a convertirse en patrimonio de todos los cesarenses, especialmente de la población de La Paz,  llamada a transformarse a partir de la creación de esta sede que  por dinámica propia obliga a crear una infraestructura logística para la población estudiantil, que provenga de otros municipios y regiones del país.
Así las cosas, la UNAL se convierte en un polo de desarrollo  que activa una economía formal e informal que depende de ella. El sector de la construcción,  los restaurantes, el transporte, las papelerías y  los hogares que ofrecen alojamiento y comida a estudiantes se afecta en forma positiva, es por ello que desde ya, La Paz necesita comenzar a prepararse para este nuevo reto que cambiará la dinámica social, económica y cultural del municipio.

Quizás el mayor desafío que enfrenta la región y Valledupar como tal, es empezar a repensar el proyecto de área metropolitana en el que por fin haya una integración de los municipios llamados a conformarla. Será la Universidad Nacional el elemento detonante para que este proyecto comience a andar desde una sinergia administrativa que permita un mayor crecimiento económico y sociocultural de las localidades que estarán cobijadas por el radio de acción de este importante centro de estudios superiores.

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