Luis Fernando Salcedo y sus compañeros se enfermaron cuando brindaban servicio de seguridad en una mina del municipio.
El soldado Luis Fernando Salcedo Blanco, adscrito al Batallón Especial Energético y Vial N° 2 del Ejército Nacional, falleció en una clínica de Valledupar, a causa de una posible intoxicación ocasionada por alimentos en el municipio de La Jagua de Ibirico.
Junto a él salieron afectados siete compañeros, de los cuales seis permanecen bajo observación médica en la capital del Cesar.
El hecho se registró el pasado 17 de diciembre, cuando los militares brindaban servicio de seguridad en una mina de La Jagua de Ibirico, pero solo hasta la tarde del domingo se pronunció el Ejército Nacional.
“Uno de nuestros soldados fue trasladado vía aérea a la ciudad de Bogotá para recibir atención médica especializada. Según parte médico, los militares que continúan en el centro médico de Valledupar se encuentran estables y podrían ser trasladados a la ciudad de Bogotá, para continuar con exámenes especializados que permitan establecer el origen del deterioro en su salud”, comunicó la institución.
Aunque las primeras versiones apuntan a una posible intoxicación de alimento, las Fuerzas Militares aseguraron que todavía no han podido confirmar el origen del deterioro de la salud de los uniformados.
“De igual forma, un equipo epidemiológico se desplazó hasta las instalaciones del dispensario de la Décima Brigada para adelantar las verificaciones correspondientes”, puntualizó el Ejército.
EL PILÓN conoció que a los soldados les practicaron pruebas de Covid-19, malaria, dengue y leptospirosis (enfermedad infecciosa asociada a ratas), y resultaron negativas.
Luis Fernando Salcedo y sus compañeros se enfermaron cuando brindaban servicio de seguridad en una mina del municipio.
El soldado Luis Fernando Salcedo Blanco, adscrito al Batallón Especial Energético y Vial N° 2 del Ejército Nacional, falleció en una clínica de Valledupar, a causa de una posible intoxicación ocasionada por alimentos en el municipio de La Jagua de Ibirico.
Junto a él salieron afectados siete compañeros, de los cuales seis permanecen bajo observación médica en la capital del Cesar.
El hecho se registró el pasado 17 de diciembre, cuando los militares brindaban servicio de seguridad en una mina de La Jagua de Ibirico, pero solo hasta la tarde del domingo se pronunció el Ejército Nacional.
“Uno de nuestros soldados fue trasladado vía aérea a la ciudad de Bogotá para recibir atención médica especializada. Según parte médico, los militares que continúan en el centro médico de Valledupar se encuentran estables y podrían ser trasladados a la ciudad de Bogotá, para continuar con exámenes especializados que permitan establecer el origen del deterioro en su salud”, comunicó la institución.
Aunque las primeras versiones apuntan a una posible intoxicación de alimento, las Fuerzas Militares aseguraron que todavía no han podido confirmar el origen del deterioro de la salud de los uniformados.
“De igual forma, un equipo epidemiológico se desplazó hasta las instalaciones del dispensario de la Décima Brigada para adelantar las verificaciones correspondientes”, puntualizó el Ejército.
EL PILÓN conoció que a los soldados les practicaron pruebas de Covid-19, malaria, dengue y leptospirosis (enfermedad infecciosa asociada a ratas), y resultaron negativas.