Todo lo que quería Jorge Arturo Díaz, de 38 años de edad, era manejar bicicleta, hacer deporte y regresar a casa. Pero el plan salió mal, en el camino fue embestido por una camioneta que lo dejó sin vida al sur del departamento del Cesar. 

Nadie pudo hacer nada por él. El fuerte impacto ocasionó que sufriera politraumatismos en distintas partes del cuerpo y que quedara tendido en inmediaciones de la vía que comunica a Aguachica con Gamarra.   

Díaz disfrutaba de un día de descanso, irónicamente, terminó perdiendo la vida por las imprudencias viales que tanto trató de prevenir en su trabajo, el cual ejercía como patrullero de la Policía Nacional, a la que se encontraba adscrito en la seccional de Tránsito y Transporte, en una unidad de control y seguridad de Aguachica.      

Llevaba 18 años, cinco meses y dos días de servicio en esa loable labor, con la que también sostenía su hogar conformado por su esposa y dos hijos. Él era natural de Río Negro, Santander.    

La historia de Jorge Arturo Díaz se unió a los seis casos de ciclistas, que durante los primeros nueve meses del año murieron en las vías del departamento, según el último informe del Instituto de Medicina Legal. 

Una realidad que anualmente se repite, por la vulnerabilidad a la que están expuestas las personas que practican ciclismo. Por ejemplo, según el observatorio de Seguridad Vial, ONSV, este actor vial es el tercero que más aporta víctimas en las carreteras del Cesar. El primer puesto lo ocupan los motociclistas, con 58 casos y el segundo, los usuarios de vehículos, con 26.

Los accidentes de tránsito son más comunes los fines de semana, sobre todo en los puentes festivos; por eso la Policía Seccional de Tránsito y Transporte intensifica por esos días los operativos de seguridad vial, tal como lo tiene previsto durante este puente de ‘Independencia de Cartagena’, en el que mediante los puestos de control les recuerdan a los ciudadanos las normas básicas de tránsito, como no exceder los límites de velocidad, no adelantar en zonas prohibidas, no conducir en estado de embriaguez, entre otras. 

Sin embargo, esto muchas veces no es suficiente para garantizar la seguridad de los ciclistas en las vías. Al respecto, Cristian Gómez Molina, presidente de la Liga de Ciclismo del Cesar manifestó que hacen falta mejores políticas en torno a la cultura vial y una infraestructura que le dé mayor protección al ciclista. 

“Hay que mejorar la cultura para que entre todos podamos contribuir. Lo primero es saber  mantener la distancia de los vehículos con los ciclistas y también la responsabilidad de este actor, quien debe manejar bicicleta por la parte derecha”, acotó Gómez Molina. 

También agregó que existe un retraso para mejorar la infraestructura vial y tener ciclorrutas o carriles especiales para los usuarios de ciclas.