El fin de año se acerca y los vallenatos preparan sus carteras para despedir este 2020 con la mayor bonanza posible en la mesa. Por ello los productos cárnicos como el lomo fino, el cual el kilo está  a $ 22.000 pesos, la punta gorda a $ 21.000 pesos, el muchacho a $ 19.000 pesos y las costillas de res a $ 10.000 pesos se convierten en las carnes más apetecidas por los compradores ante su suavidad y sus múltiples usos culinarios.

Así lo aseguró Juan Jiménez, carnicero del Mercado Público de Valledupar. De acuerdo con este comerciante, la famosa compra de fin de año es la más esperada por los vendedores de esa plaza comercial porque allí esperan recuperar las ganancias perdidas en este mes de diciembre en el  que generalmente obtenían altos ingresos económicos, pero por la pandemia se ha reducido por el temor de muchos vallenatos de ir a comprar alimentos a sitios que reúnen muchas personas.

“Ha sido difícil la venta este año porque las personas tienen mucho temor de acercarse a los puestos y ese mismo flujo de compradores que llegaban en los años anteriores ha disminuido casi en un 60 %”, aseguró el comerciante.

Sin embargo, hay quienes de manera optimista le apuestan a la buena suerte y esperan que  del 25 al 31 de diciembre las ganancias que obtengan  los ayude a equilibrar las ventas como Diana Aguilar. Esta carnicera cree firmemente que podrá atender el mayor número de vallenatos que decidan comprar en su puesto y de esta forma pasar un fin de año alegre con sus familiares, recuperando la inversión en carnes que hizo, que para estas fechas ya se había acabado. Esta comerciante asegura que el 24 y 31 de diciembre del 2019 obtuvo una ganancia aproximadamente de un  millón quinientos mil pesos.

De acuerdo Jair Pinto, gerente del Mercado Público de Valledupar, en los más de 100 metros cuadros que componen este espacio comercial están establecidos 870 comerciantes que venden carne, pollo, gallina, queso, legumbres, entre otros productos. Esta cifra es menor a la del año pasado que cerraba en 1.000 vendedores formales que pagaban impuestos en el lugar, es decir que 130 personas desertaron del mercado este 2020.

EL PLATO FUERTE DE LOS VALLENATOS

El recorrido de los compradores inicia generalmente en el sector de las carnes según la ama de casa Ana Morales. Esta vallenata llegó al Mercado a las siete de la mañana en compañía de sus dos nietos de quince y diecisiete años para comprar lo que necesitará para su cena de fin de año.

“Venía tradicionalmente con mi mamá cinco o seis días antes del 31 de diciembre para escoger las carnes más frescas del Mercado. Este año haremos ocho kilos de lomo fino con puré de papa y ensalada de zanahoria con maíz granizado. Lo primero que compro es la carne porque es lo más costoso”, comentó Morales.

Esta ama de casa señaló que a su cena de fin de año asisten 17 personas entre nietos, hermanos y demás familiares, por lo que comprará treinta libras de papa, doce  libras de zanahoria y diecisiete mazorcas. Según los precios sondeados en la plaza comercial, el kilo de lomo fino tiene un valor de $25.000 pesos,  la libra de papa cuesta  $400 pesos,  la zanahoria $ 1.500 y las mazorcas $ 500 pesos, lo cual daría una sumatoria de $ 238.000 pesos.

El  precio del capo y la  emparejadura de res es de $18.000 pesos, el  lomo de cerdo cuesta $17.000 pesos, la costilla de cerdo $14.000, el pernil de cerdo $12.00 pesos, la costilla de res $ 10.000;  el  pecho  $13.000 pesos,  la batata $12.000 pesos, la sobrebarriga $13.000 y la  falda $14.000 pesos, según los precios sondeados en el Mercado Municipal de Valledupar. 

LEGUMBRES DE COLORES

El bastimento y las verduras son la sazón de las carnes y el acompañamiento perfecto de las cenas, según Fredy Cavarga, vendedor de hortalizas en el Mercado Municipal desde hace treinta años. Este comerciante aseguró que los vallenatos han comprando mayoritariamente zanahorias, cebollín, cebollas y demás verduras para preparar el sancocho tradicional y chivos guisados.

De acuerdo con la tabla de precios y los fijados por algunos vendedores de la plaza, los vallenatos pueden encontrar la libra de yuca en $400 pesos, la libra de malanga en $2.000 pesos, el kilo de cebolla blanca en  $2.500, el kilo de cebolla roja en $3.000 pesos,  el kilo de tomate en $4.000 pesos, el kilo de ahuyama en $1.000 pesos y la libra de cebollín en $2.000 pesos.

Cavarga comentó que le ha ido mal en las ventas de este año por la pandemia de la covid -19 que ha alejado a gran parte de su clientela y por los vendedores ambulantes que no pagan impuestos, pero que aún así se ubican en puntos estratégicos para capturar a los compradores. Aseveró  que el 31 de diciembre del año pasado vendió dos millones de pesos, pero que en estos días se ha ido a su casa con solo $ 400.000 pesos

POLLOS DE LA GRAN CENA

La tradicional gallina criolla se ha mantenido en la mesa de  cesarenses como Miguel Romero, quien asegura que la cena de fin de año no tiene sentido sin su “gallina especial” rellena de cuatro carnes: cerdo, carne de res, chivo y jamón. Este soldador y  padre de dos hijos comentó que su familia disfruta la cena del 31 porque es el día en el  que sus seres queridos se reúnen para compartir la mesa y comer  “como si no hubiese un mañana”. 

De acuerdo con la comerciante María de Jesús Valencia, la gallina semicriolla dependiendo del tamaño tiene un precio que ronda entre  $18.000 pesos y $17.000 pesos. Por otro lado, Fernando Gerardino, vendedor de pollos, comentó que para este año el pollo manaurero está en $6.800 pesos el kilo, la colombina manaurera en $6.000 pesos y el muslo manaurero en $ 5.500 pesos.

Para los amantes del queso duro y semiduro los precios rondan entre $9.000 pesos y $15.000 pesos. La canasta de huevo tiene un valor de $10.000 pesos, la panela en $10.000 pesos y el suero criollo en $5.000 pesos, según el vendedor de productos lácteos Iván Ocampo.

Namieh Baute Barrios / EL PILÓN