Que Carlos Morón Cuello y Gelca Gutiérrez Barranco en el contexto de Valledupar y la región se destaquen no es una simple casualidad, es producto del profesionalismo y en especial del interés que le han impreso a una educación superior de calidad desde el sector de las universidades privadas y de la claridad que han tenido cuando han ocupado espacios en lo público.

Morón Cuello le ha dado carácter, seriedad y presencia local a la Universidad de Santander, UDES, en esta parte del país, y Gutiérrez Barranco le ha impreso a la Fundación Universitaria del Área Andina, con sede en nuestra ciudad, la idea de ser una universidad de avanzada.

Orgullo deben sentir ambas universidades de contar en sus sedes de Valledupar con un hombre serio y sin señalamientos como Carlos Morón, y una mujer que con principios lo que se propone lo logra, como Gelca Gutiérrez. ¿Quién tendría algo que decir en contra de ellos? Desde la academia han construido ciudad y región.

La Gobernación y las alcaldías del Cesar deberían trabajar más de la mano con estas dos universidades. Así lo ha venido haciendo el Atlántico y Barranquilla con las universidades privadas.  En gran parte el cambio que ha logrado para convertirse esta en ciudad importante, lo debe a los centros de pensamiento en los que participa el sector de la educación superior y la respuesta que se ha encontrado en las universidades privadas.

A mí en lo personal me gusta que el abogado Morón y la ingeniera Industrial Gutiérrez se hagan competencia de la sana, de la que busca construir y en la que no se desconoce al maestro por parte de la pupila; tienen una relación de respeto con intereses superiores y no menores; esos son los liderazgos que necesita Valledupar.

En ellos dos, nada de corrupción o conductas inapropiadas. En una ciudad como Valledupar, donde casi todos nos conocemos y donde se sabe quién es quien, no se conoce conductas al margen de la ley del rector Carlos Morón o de la rectora Gelca Gutiérrez, lo cual además de sus conocimientos y experiencia les permite representar bien a sus universidades.

Más dirigentes como Carlos Morón Cuello y Gelca Gutiérrez Barranco necesitan Valledupar y el Cesar, personas que nos dejan bien frente a los demás y nos representan bien en cualquier lugar. En este fin de año la Asamblea Departamental del Cesar por iniciativa mía ha reconocido a estos dos profesionales, lo cual es más que merecido.

Sea esta  la oportunidad para pedirle a Morón Cuello y a Gutiérrez Barranco que en el futuro dupliquen sus esfuerzos por Valledupar y el Cesar. Nuestra capital en especial necesita de estos liderazgos. Es con la sociedad con la que se construye ciudad y las universidades son además de indispensables, fundamentales.