Días antes, el Ministerio de Salud negó la autorización a la Alcaldía de Barranquilla sobre la asistencia de público al partido de Colombia contra Venezuela en el Estadio Metropolitano de Barranquilla, por la pandemia que atraviesa todo el mundo. Sin embargo, la orden de Minsalud no fue acatada por la Federación Colombiana de Fútbol, que permitió la presencia de hinchas.

Al parecer, sí hubo hinchas que ingresaron a ver a James Rodríguez y compañía en el debut por las clasificatorias al Mundial de Catar 2022. El hecho generó sorpresas y reacciones de rechazo que se hicieron virales en las redes sociales.

Claramente eran personas ajenas al personal autorizado de logística, medios de comunicación acreditados, policías, personal de salud, de mantenimiento de la cancha y comitivas deportivas. En las tribunas, al menos de occidental, estuvieron influencers invitados por patrocinadores.

La preocupante situación, que puso en riesgo la logística y la salud de los que permanecían debidamente en el interior del estadio, fue recibida por la administración distrital, que preparó una reunión de emergencia liderada por el secretario de Gobierno, Clemente Fajardo.

Sin embargo, la Alcaldía de Barranquilla, a través de las redes sociales, informó que “funcionarios del Distrito escoltaron fuera del estadio Metropolitano al personal no autorizado que se encontraba allí. Solo permanece personal que cumple una labor en el partido”.

Pero dicho operativo fue liderado en campo por el director de la Oficina de Seguridad y Convivencia, Nelson Patrón. Pero no solo continuaron los autorizados, sino hinchas ubicados en los nuevos palcos de prensa que se localizan en la segunda planta.