Debe reconocerse el éxito del gobierno en la reactivación de la ruta del sol 3 de la que ayer más de 30 kilómetros de doble calzada en el departamento se dieron al servicio, junto a la rehabilitación de 18 kilómetros de una calzada. 

Al ritmo que va Yuma, liderada por la italiana Impregilo, si no hay imprevistos, en un año habrá doble calzada toda la ruta en el tramo Valledupar-Bosconia- San Roque. También son  importantes los empleos y servicios y el pago que se viene haciendo a los acreedores y proveedores, en desarrollo del acuerdo del consorcio Ariguaní, una sociedad del grupo de la concesión, ante la Superintendencia de Sociedades.

Si entre Mariangola y Bosconia se habilitó la doble calzada en 18 kilómetros, y más cerca de Valledupar 4,4 kilómetros es posible que iniciemos el nuevo año 21 completando unos 30 kilómetros más. Ha sido un esfuerzo de la ANI, entidad contratante, en cabeza de Manuel Felipe Gutiérrez, y merecen también aplauso los trabajadores y directivos del concesionario.

Un aspecto crucial son las variantes, la circunvalar de Bosconia  y la forma que adopte la doble calzada al acceder a la ciudad por la glorieta del Obelisco.

El gobierno Duque, reiterando empatía con nuestra cultura, le dio un espaldarazo a la ciudad y a su alcalde, al declarar tres Áreas de Desarrollo Naranja, ADN, denominadas, Viejo Valledupar, Confidencias y Caminitos del Valle, que comprenden, respectivamente, el Centro Histórico fundacional, la zona gastronómica del parque Novalito y la calle 13, vía en la que se pueden hacer bellos bulevares peatonales  laterales, y la zona delimitada por  Hurtado, La Casa en el Aire, el Parque de La Provincia, y el Parque de la Leyenda. 

Esas ADN, establecidas en el Plan Nacional de Desarrollo, como zonas específicas dentro de los municipios en las cuales se atraen ciertas inversiones públicas pero principalmente las privadas, se establece un régimen de incentivos fiscales y se promueve la música, las artes, la artesanía, la gastronomía, el diseño, el patrimonio material e inmaterial, la creatividad,  impulsarán el turismo cultural.

Esta es una decisión que esperamos no se quede en una declaración más y debe inscribirse dentro de las tareas que asumió el municipio cuando se tramitó ante la Unesco,  de manera exitosa, el reconocimiento internacional de la musical Valledupar como una ‘Ciudad Creativa”.  Reiteramos la urgente necesidad de desarrollar los compromisos y que las palabras sean cosas tangibles que la gente vea y viva. El aporte que pueda hacer la coterránea Diana Molina desde el Ministerio de Cultura se empieza a ver, junto a la formulación que la Oficina de Planeación Municipal, con su Asesora Cecilia Castro, hizo de las  zonas para su declaración.

Ahora se necesita promoción de las ADN, que debería desarrollar una institución congelada como Provalledupar.  En el caso del centro llamamos la atención a que las obras en actual ejecución se complementen con la recuperación de los centros de manzana.

Y que los créditos prometidos por Bancoldex y el Banco Agrario del convenio de ayer sean desembolsos efectivos para nuestras Pymes.