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Columnista - 7 mayo, 2020

Pandemia o sindemia

Lo que está viviendo la humanidad, necesariamente nos tiene que llevar a elucubrar una serie de reflexiones, y es por ello, que este escrito lo hemos titulado de la anterior manera, convencidos que la civilización humana no puede seguir actuando con tantos disparates, lo que nos conduce pensar que el mundo esta cambiando a cada […]

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Lo que está viviendo la humanidad, necesariamente nos tiene que llevar a elucubrar una serie de reflexiones, y es por ello, que este escrito lo hemos titulado de la anterior manera, convencidos que la civilización humana no puede seguir actuando con tantos disparates, lo que nos conduce pensar que el mundo esta cambiando a cada rato, y claro, nos debe conducir a construir uno mejor ya que no podemos seguir viviendo ante tantos desequilibrios y con tantas estupideces, con irreverente petulancia para ubicarnos cómodamente como “hombres estúpidamente inteligentes”, tal como lo expresara José Mujica, el expresidente del Uruguay.

Todo lo que estamos experimentado son ejemplos de la naturaleza que no castiga pero da buenos ejemplos en la medida que nos dice a gritos que hay que respetar o saber tratar para que nos respeten; en tal sentido, podemos observar que nos encontramos viviendo en un planeta enfermo y que debemos trabajar juntos para que nos renovemos, vale decir, trabajar juntos generando consciencia, sacudiendo las injusticias que deben superarse solidariamente, tal como lo está demostrando o demandando el coronavirus.

Pero vamos al grano, hoy por hoy a nivel global crecen y se agravan los problemas comunes, que entre otros, también tienen connotación de pandemia, es necesario mencionar: la pobreza, el hambre, la dificultad económica, las enfermedades (covid-19) y el deterioro generalizado de la naturaleza, muy a pesar a que las naciones desde hace algún tiempo vienen proponiendo soluciones que hasta ahora no arrojan avances significativos.

Ya sabemos que la pandemia tiene connotación global y cuando hablamos de varias pandemias, como las que estamos viviendo y que a veces no las reconocemos, nos encontramos frente a lo que se denomina sindemia, no hay duda, al encontrarnos inmersos en el coronavirus, en el calentamiento global, alta pobreza  en casi todas las naciones, pero además, millones de habitantes con hambre que hacen parte protuberante de los ocho mil millones que tiene el planeta.

¿Será que nosotros los seres humanos tendremos tanta resiliencia para sobreponernos a estas graves vivencias? Con todos los ejemplos, con todas las imágenes asustadoras y experiencias alrededor del mundo y no aprendemos. No vemos correctivos, no hay mitigaciones suficientes y no hay amortiguaciones para los daños que diariamente causamos. Podemos afirmar que el mundo esta repleto de diagnósticos, identificación de causas y efectos de propósitos de enmienda, de planes, de programas, más y más propuestas de mejoramiento pero nunca de las acciones.

Decir finalmente que en nuestro planeta siguen las emisiones de gases contaminantes, la destrucción de los bosques, el calentamiento de la tierra, los desajustes climáticos, el empobrecimiento, el hambre, y grandes dificultades económicas, sin mencionar otros males que aquejan al mundo. Seguiremos en otra oportunidad porque nos queda mucho por decir.

Nota: Con lo expresado anteriormente, ¿Sera pandemia o sindemia lo que vivimos en estos momentos?

Columnista
7 mayo, 2020

Pandemia o sindemia

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Hernán Maestre Martínez

Lo que está viviendo la humanidad, necesariamente nos tiene que llevar a elucubrar una serie de reflexiones, y es por ello, que este escrito lo hemos titulado de la anterior manera, convencidos que la civilización humana no puede seguir actuando con tantos disparates, lo que nos conduce pensar que el mundo esta cambiando a cada […]


Lo que está viviendo la humanidad, necesariamente nos tiene que llevar a elucubrar una serie de reflexiones, y es por ello, que este escrito lo hemos titulado de la anterior manera, convencidos que la civilización humana no puede seguir actuando con tantos disparates, lo que nos conduce pensar que el mundo esta cambiando a cada rato, y claro, nos debe conducir a construir uno mejor ya que no podemos seguir viviendo ante tantos desequilibrios y con tantas estupideces, con irreverente petulancia para ubicarnos cómodamente como “hombres estúpidamente inteligentes”, tal como lo expresara José Mujica, el expresidente del Uruguay.

Todo lo que estamos experimentado son ejemplos de la naturaleza que no castiga pero da buenos ejemplos en la medida que nos dice a gritos que hay que respetar o saber tratar para que nos respeten; en tal sentido, podemos observar que nos encontramos viviendo en un planeta enfermo y que debemos trabajar juntos para que nos renovemos, vale decir, trabajar juntos generando consciencia, sacudiendo las injusticias que deben superarse solidariamente, tal como lo está demostrando o demandando el coronavirus.

Pero vamos al grano, hoy por hoy a nivel global crecen y se agravan los problemas comunes, que entre otros, también tienen connotación de pandemia, es necesario mencionar: la pobreza, el hambre, la dificultad económica, las enfermedades (covid-19) y el deterioro generalizado de la naturaleza, muy a pesar a que las naciones desde hace algún tiempo vienen proponiendo soluciones que hasta ahora no arrojan avances significativos.

Ya sabemos que la pandemia tiene connotación global y cuando hablamos de varias pandemias, como las que estamos viviendo y que a veces no las reconocemos, nos encontramos frente a lo que se denomina sindemia, no hay duda, al encontrarnos inmersos en el coronavirus, en el calentamiento global, alta pobreza  en casi todas las naciones, pero además, millones de habitantes con hambre que hacen parte protuberante de los ocho mil millones que tiene el planeta.

¿Será que nosotros los seres humanos tendremos tanta resiliencia para sobreponernos a estas graves vivencias? Con todos los ejemplos, con todas las imágenes asustadoras y experiencias alrededor del mundo y no aprendemos. No vemos correctivos, no hay mitigaciones suficientes y no hay amortiguaciones para los daños que diariamente causamos. Podemos afirmar que el mundo esta repleto de diagnósticos, identificación de causas y efectos de propósitos de enmienda, de planes, de programas, más y más propuestas de mejoramiento pero nunca de las acciones.

Decir finalmente que en nuestro planeta siguen las emisiones de gases contaminantes, la destrucción de los bosques, el calentamiento de la tierra, los desajustes climáticos, el empobrecimiento, el hambre, y grandes dificultades económicas, sin mencionar otros males que aquejan al mundo. Seguiremos en otra oportunidad porque nos queda mucho por decir.

Nota: Con lo expresado anteriormente, ¿Sera pandemia o sindemia lo que vivimos en estos momentos?