Las noticias no son buenas para el país. Al margen de si se reconocen o auto reconocen como nueva guerrilla, líderes de las antiguas Farc regresaron a las armas por varios motivos que ustedes ya conocen...
Las noticias no son buenas para el país. Al margen de si se reconocen o auto reconocen como nueva guerrilla, líderes de las antiguas Farc regresaron a las armas por varios motivos que ustedes ya conocen por cuenta de un video que rueda por las redes sociales y se ha publicado en diferentes medios de comunicación, incluyéndonos.
La noticia es la consolidación de un pensamiento angustiante que muchos tenían desde que se firmó la paz en la Habana con la guerrilla: “Si no hay garantías del proceso volverán a las armas”, decían algunos. “Esa paz no es cierta, nunca lo fue”, decían otros.
Sin importar el mar de comentarios, reacciones que desde hace días inundan todos los canales habidos, es tan oportuno referirnos a dos momentos gestados por líderes sociales y organizaciones del Cesar y la región: un momento ya pasado y otro por venir.
Se trata de la Semana por la Paz. Adelantados en Aguachica para coincidir con los 24 años de la Consulta Popular por la Paz, se realiza desde el pasado lunes una serie de actividades conmemorativas que promueven la paz y el desarrollo de ese municipio al sur del Cesar. Allá participamos y rendimos homenaje al entonces alcalde Luis Fernando Rincón, promotor de esa iniciativa democrática de paz, ejemplo en Colombia, que fue asesinado.
Y este lunes arranca la Semana por la Paz, con una serie de actividades de las que hacemos parte como aliados de sus organizadores: el Programa de Desarrollo y Paz del Cesar.
Los momentos de tensión que se viven por estos días necesitarán de una agenda profunda y con visión clara sobre por qué debemos continuar en el camino del diálogo, partiendo de los visibles resultados que el proceso ha arrojado y que en estas páginas hemos registrado.
Una semana de actividades de paz y reconciliación requiere de exposiciones de notable calidad, que pongan en contexto real a los participantes sobre las transiciones, los matices de los procesos, y sus beneficios.
Pactos de paz, introspección sobre la reconciliación y las ventajas de llevar por la senda del dialogo a los territorios.
Evidentemente oportuno que nos sumemos a estas actividades lideradas por el Programa de Desarrollo y Paz del Cesar, de la Pastoral Social – Diócesis de Valledupar, y con el acompañamiento de EL PILÓN, para que el mensaje llegue con más fuerza a la opinión pública y se consolide mediante la integración de esfuerzos una paz en los territorios, desde los mismos debates verbales que puedan suscitarse en torno de coyunturas sociopolíticas.
Como nunca son tan necesarios estos esfuerzos, como los que hace la plataforma Diálogos Improbables en Colombia, en el Cesar y su capital, municipio que constantemente es sede de este grupo de pensadores y promotores de la acción fraterna entre opuestos.
La Semana por la Paz 2019 es en definitiva el momento para garantizar que el camino a las armas no es el camino, ni el primer ni el último. Es la palabra el escenario de la lucha, única plataforma de las diferencias que nos hacen humanos.
Las noticias no son buenas para el país. Al margen de si se reconocen o auto reconocen como nueva guerrilla, líderes de las antiguas Farc regresaron a las armas por varios motivos que ustedes ya conocen...
Las noticias no son buenas para el país. Al margen de si se reconocen o auto reconocen como nueva guerrilla, líderes de las antiguas Farc regresaron a las armas por varios motivos que ustedes ya conocen por cuenta de un video que rueda por las redes sociales y se ha publicado en diferentes medios de comunicación, incluyéndonos.
La noticia es la consolidación de un pensamiento angustiante que muchos tenían desde que se firmó la paz en la Habana con la guerrilla: “Si no hay garantías del proceso volverán a las armas”, decían algunos. “Esa paz no es cierta, nunca lo fue”, decían otros.
Sin importar el mar de comentarios, reacciones que desde hace días inundan todos los canales habidos, es tan oportuno referirnos a dos momentos gestados por líderes sociales y organizaciones del Cesar y la región: un momento ya pasado y otro por venir.
Se trata de la Semana por la Paz. Adelantados en Aguachica para coincidir con los 24 años de la Consulta Popular por la Paz, se realiza desde el pasado lunes una serie de actividades conmemorativas que promueven la paz y el desarrollo de ese municipio al sur del Cesar. Allá participamos y rendimos homenaje al entonces alcalde Luis Fernando Rincón, promotor de esa iniciativa democrática de paz, ejemplo en Colombia, que fue asesinado.
Y este lunes arranca la Semana por la Paz, con una serie de actividades de las que hacemos parte como aliados de sus organizadores: el Programa de Desarrollo y Paz del Cesar.
Los momentos de tensión que se viven por estos días necesitarán de una agenda profunda y con visión clara sobre por qué debemos continuar en el camino del diálogo, partiendo de los visibles resultados que el proceso ha arrojado y que en estas páginas hemos registrado.
Una semana de actividades de paz y reconciliación requiere de exposiciones de notable calidad, que pongan en contexto real a los participantes sobre las transiciones, los matices de los procesos, y sus beneficios.
Pactos de paz, introspección sobre la reconciliación y las ventajas de llevar por la senda del dialogo a los territorios.
Evidentemente oportuno que nos sumemos a estas actividades lideradas por el Programa de Desarrollo y Paz del Cesar, de la Pastoral Social – Diócesis de Valledupar, y con el acompañamiento de EL PILÓN, para que el mensaje llegue con más fuerza a la opinión pública y se consolide mediante la integración de esfuerzos una paz en los territorios, desde los mismos debates verbales que puedan suscitarse en torno de coyunturas sociopolíticas.
Como nunca son tan necesarios estos esfuerzos, como los que hace la plataforma Diálogos Improbables en Colombia, en el Cesar y su capital, municipio que constantemente es sede de este grupo de pensadores y promotores de la acción fraterna entre opuestos.
La Semana por la Paz 2019 es en definitiva el momento para garantizar que el camino a las armas no es el camino, ni el primer ni el último. Es la palabra el escenario de la lucha, única plataforma de las diferencias que nos hacen humanos.