Terminó la Semana Santa y de inmediato se alistaron los acordeones para una de las fiestas culturales más importantes de Colombia, el Festival de la Leyenda Vallenata, que este año tiene el lema ‘Vallenato para el Mundo’.
Terminó la Semana Santa y de inmediato se alistaron los acordeones para una de las fiestas culturales más importantes de Colombia, el Festival de la Leyenda Vallenata, que este año tiene el lema ‘Vallenato para el Mundo’.
Desde su génesis el vallenato se fue enriqueciendo con las vivencias del Caribe, a través de las crónicas cantadas por los juglares, al punto que hoy este género es la mejor carta de presentación de la región y del país ante el mundo. La música de caja guacharaca y acordeón tiene elementos del mundo, como el acordeón alemán, que han sido nutridos por nuestros juglares para convertirla en un género sin fronteras.
En esa tarea los juglares tienen refuerzo de diferentes gestores culturales, entre esos la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, organización que hace 52 años montó una fiesta musical en el marco de la conmemoración de la leyenda vallenata; es decir, esta fiesta de acordeones toma su nombre de la conmemoración del milagro que, según los historiadores, la virgen del Rosario hizo hace 443 años al revivir a las tropas españolas envenenadas por los indígenas del Valle del Cacique Upar.
Ese tinte religioso del Festival Vallenato pervive, pues se mantiene en la programación la misa y procesión en honor a la virgen del Rosario y consagración de los indígenas a la virgen. De la meditación al jolgorio, así es la gente Caribe.
Esperamos que así como la Semana Santa es un tiempo de reflexión y recogimiento, para mejorar la salud espiritual de los creyentes, el Festival Vallenato no solo sea parranda, que además coexistan los espacios propicios para reflexionar sobre la importancia de nuestras raíces culturales, para entender la evolución pero reforzando las estrategias de salvaguarda del género que desde hace más de tres años la Unesco declaró patrimonio inmaterial de la humanidad.
En ese sentido, esta casa editorial también aporta su grano de arena y este miércoles realiza el foro ‘La musa de ayer y hoy en el vallenato’, un espacio académico para discutir con estudiosos de la cultura y con los compositores de ayer y de hoy sobre el mañana de la composición de la música vallenata.
Todos debemos entender la magnitud del vallenato, del Festival Vallenato que permanentemente nos visibiliza ante el mundo, evento en el que cada abril le abrimos la puerta a gente de todas las latitudes que viene a palpar el entorno en el que se ha cultivado el género musical más representativo del país.
Hay que disponer de todo lo que esté a nuestro alcance para generar el ambiente más confortable en estos días de festividad. No debemos estar pendientes de que pueden dejarnos los visitantes, sino de todo lo que como buenos anfitriones podemos ofrecer. Hoy se abren los primeros acordeones en las categorías de acordeoneros menores. ¡Bienvenidos todos a la capital mundial del vallenato!
Terminó la Semana Santa y de inmediato se alistaron los acordeones para una de las fiestas culturales más importantes de Colombia, el Festival de la Leyenda Vallenata, que este año tiene el lema ‘Vallenato para el Mundo’.
Terminó la Semana Santa y de inmediato se alistaron los acordeones para una de las fiestas culturales más importantes de Colombia, el Festival de la Leyenda Vallenata, que este año tiene el lema ‘Vallenato para el Mundo’.
Desde su génesis el vallenato se fue enriqueciendo con las vivencias del Caribe, a través de las crónicas cantadas por los juglares, al punto que hoy este género es la mejor carta de presentación de la región y del país ante el mundo. La música de caja guacharaca y acordeón tiene elementos del mundo, como el acordeón alemán, que han sido nutridos por nuestros juglares para convertirla en un género sin fronteras.
En esa tarea los juglares tienen refuerzo de diferentes gestores culturales, entre esos la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, organización que hace 52 años montó una fiesta musical en el marco de la conmemoración de la leyenda vallenata; es decir, esta fiesta de acordeones toma su nombre de la conmemoración del milagro que, según los historiadores, la virgen del Rosario hizo hace 443 años al revivir a las tropas españolas envenenadas por los indígenas del Valle del Cacique Upar.
Ese tinte religioso del Festival Vallenato pervive, pues se mantiene en la programación la misa y procesión en honor a la virgen del Rosario y consagración de los indígenas a la virgen. De la meditación al jolgorio, así es la gente Caribe.
Esperamos que así como la Semana Santa es un tiempo de reflexión y recogimiento, para mejorar la salud espiritual de los creyentes, el Festival Vallenato no solo sea parranda, que además coexistan los espacios propicios para reflexionar sobre la importancia de nuestras raíces culturales, para entender la evolución pero reforzando las estrategias de salvaguarda del género que desde hace más de tres años la Unesco declaró patrimonio inmaterial de la humanidad.
En ese sentido, esta casa editorial también aporta su grano de arena y este miércoles realiza el foro ‘La musa de ayer y hoy en el vallenato’, un espacio académico para discutir con estudiosos de la cultura y con los compositores de ayer y de hoy sobre el mañana de la composición de la música vallenata.
Todos debemos entender la magnitud del vallenato, del Festival Vallenato que permanentemente nos visibiliza ante el mundo, evento en el que cada abril le abrimos la puerta a gente de todas las latitudes que viene a palpar el entorno en el que se ha cultivado el género musical más representativo del país.
Hay que disponer de todo lo que esté a nuestro alcance para generar el ambiente más confortable en estos días de festividad. No debemos estar pendientes de que pueden dejarnos los visitantes, sino de todo lo que como buenos anfitriones podemos ofrecer. Hoy se abren los primeros acordeones en las categorías de acordeoneros menores. ¡Bienvenidos todos a la capital mundial del vallenato!