La Semana Santa es una de las más accidentadas del año, porque a la par del aumento en el tráfico de vehículos por las carreteras del país, en esta temporada aumenta la imprudencia de los conductores.
La Semana Santa es una de las más accidentadas del año, porque a la par del aumento en el tráfico de vehículos por las carreteras del país, en esta temporada aumenta la imprudencia de los conductores.
En 2018 hubo alrededor de 74 muertos en accidentes y seis mil conductores sancionados por infringir las normas de tránsito; se redujo en un 21 por ciento la accidentabilidad con relación a la misma temporada de 2017. Sin embargo, las reducciones no son las deseadas y por ello hay que trabajar con más ahínco en la sensibilización sobre el riesgo de salir a las carreteras sin respetar las señales de tránsito y con vehículos sin buenas condiciones técnico mecánicas.
Una de las vías más transitadas del país en estos días santos es la Troncal de Oriente, que hace parte de la Ruta del Sol
Una de las vías más transitadas del país en estos días santos es la Troncal de Oriente, que hace parte de la Ruta del Sol, la cual atraviesa el Cesar de sur a norte y de norte a sur, conectando al interior con la costa. En este y otros tramos viales las autoridades han intensificado los controles.
Destacamos que en el Cesar, la Policía contará con 1.500 uniformados desplegados en actividades específicas de seguridad vial, protección del patrimonio cultural, protección ambiental, seguridad ciudadana y promoción del turismo, con 45 puestos de control. No obstante, ese pie de fuerza no es garantía de que cada viajero pasará una feliz Semana Mayor, la principal garantía es el autocuidado de cada uno.
Los componentes tecnológicos, como radares para detección de la velocidad, alcosensores, monitoreo por cámaras de vigilancia, entre otros, son medidas disuasivas para un mejor control, pero la clave es la prevención.
Exhortamos a los conductores a que vean las normas de tránsito con respeto, lo más parecido posible a los mandamientos de la ley de Dios, en carretera, ya que no respetarlas acarrea graves consecuencias y en el peor de los casos significa la muerte.
Adelantar en curva, exceder los límites de velocidad, manipular el celular mientras se conduce, no guardar distancia de seguridad y no descansar lo suficiente antes de emprender largos viajes son algunos de los pecados capitales en carretera.
También pedimos que la prevención se extienda a piscinas, balnearios, iglesias, procesiones y otros sitios de asistencia masiva.
Estas advertencias o recomendaciones, como las quieran tomar, las hacemos para que en estos días de reflexión y descanso las personas las tengan en cuenta, para que esta temporada no se convierta en un lamento.
La Semana Santa es una de las más accidentadas del año, porque a la par del aumento en el tráfico de vehículos por las carreteras del país, en esta temporada aumenta la imprudencia de los conductores.
La Semana Santa es una de las más accidentadas del año, porque a la par del aumento en el tráfico de vehículos por las carreteras del país, en esta temporada aumenta la imprudencia de los conductores.
En 2018 hubo alrededor de 74 muertos en accidentes y seis mil conductores sancionados por infringir las normas de tránsito; se redujo en un 21 por ciento la accidentabilidad con relación a la misma temporada de 2017. Sin embargo, las reducciones no son las deseadas y por ello hay que trabajar con más ahínco en la sensibilización sobre el riesgo de salir a las carreteras sin respetar las señales de tránsito y con vehículos sin buenas condiciones técnico mecánicas.
Una de las vías más transitadas del país en estos días santos es la Troncal de Oriente, que hace parte de la Ruta del Sol
Una de las vías más transitadas del país en estos días santos es la Troncal de Oriente, que hace parte de la Ruta del Sol, la cual atraviesa el Cesar de sur a norte y de norte a sur, conectando al interior con la costa. En este y otros tramos viales las autoridades han intensificado los controles.
Destacamos que en el Cesar, la Policía contará con 1.500 uniformados desplegados en actividades específicas de seguridad vial, protección del patrimonio cultural, protección ambiental, seguridad ciudadana y promoción del turismo, con 45 puestos de control. No obstante, ese pie de fuerza no es garantía de que cada viajero pasará una feliz Semana Mayor, la principal garantía es el autocuidado de cada uno.
Los componentes tecnológicos, como radares para detección de la velocidad, alcosensores, monitoreo por cámaras de vigilancia, entre otros, son medidas disuasivas para un mejor control, pero la clave es la prevención.
Exhortamos a los conductores a que vean las normas de tránsito con respeto, lo más parecido posible a los mandamientos de la ley de Dios, en carretera, ya que no respetarlas acarrea graves consecuencias y en el peor de los casos significa la muerte.
Adelantar en curva, exceder los límites de velocidad, manipular el celular mientras se conduce, no guardar distancia de seguridad y no descansar lo suficiente antes de emprender largos viajes son algunos de los pecados capitales en carretera.
También pedimos que la prevención se extienda a piscinas, balnearios, iglesias, procesiones y otros sitios de asistencia masiva.
Estas advertencias o recomendaciones, como las quieran tomar, las hacemos para que en estos días de reflexión y descanso las personas las tengan en cuenta, para que esta temporada no se convierta en un lamento.