Con el preámbulo de mi columna de ayer, hago una breve aproximación a una reflexión acerca de las potencialidades de la ciudad para constituir una nueva organización político-administrativa como sede su espacio físico y aledaños que respondan a las nuevas condiciones de desarrollo que estamos abordando, lo cual amerita la búsqueda de condiciones territoriales que […]
Con el preámbulo de mi columna de ayer, hago una breve aproximación a una reflexión acerca de las potencialidades de la ciudad para constituir una nueva organización político-administrativa como sede su espacio físico y aledaños que respondan a las nuevas condiciones de desarrollo que estamos abordando, lo cual amerita la búsqueda de condiciones territoriales que permitan a la población entre otros aspectos mejorar su sistema de vida. Estructura que permite conformar áreas integradas que puedan responder al desarrollo equitativo desde lo local y con proyectos de desarrollo regional que se proyecten hacia afuera, pero con fuertes lazos internos, sin desligarse de los proyectos nacionales.
El entorno es un elemento determinante en cuanto a la articulación de éste con la ciudad región, lo cual implica considerar la ciudad como un sistema abierto para que se puedan dar los flujos e intercambios de diversa índole, generando así una dinámica tanto del sistema urbano con el medio ambiente, interactuando con éste la ciudad región que dinamiza tanto el centro como la periferia, en mayor o menor medida.
Según uno de los famosos teóricos de este tema, Jordán, dice que serían tres los niveles para dar cuenta de la articulación entre procesos de globalización y procesos de urbanización en la región (América Latina, nota del autor):
• Los grados y formas de enlace–vínculos entre territorios y la economía–comunidad global.
• Los grados y tipos de transformaciones urbano–territoriales, producto o efecto de los variados tipos de articulaciones.
• Las razones y causas, principalmente endógenas y de políticas, que explican los grados de reproducción y traslación, o no, de los efectos exógenos a nivel territorial. Destaca aspectos como: la Identidad, medio ambiente, participación, proyecto político compartido, competitividad y mercadeo, conectividad, seguridad ciudadana, gobernabilidad, son los ocho problemas más importantes a resolver en la construcción de una ciudad región. No es menor la tarea. A éstos, se agrega en esta oportunidad una novena asunto: la seguridad alimentaria, las ciudades importan algunos alimentos básicos de lo que no está exento el Cesar y por tanto toda ciudad convive con un problema de seguridad alimentaria que, por cierto, cuando afecta a un porcentaje más o menos alto de la población, pasa a ser un problema nacional.
Según Wong la “Identidad local con ciudadanía global parece ser la tendencia la preocupación por los fenómenos analizados. El individuo contemporáneo se identifica con su territorio original–local, pero propende simultáneamente a desplegar y compartir hábitos y patrones de comportamiento globales” que posibilitan los elementos de la identidad regional, constituidas por: creencias, continuidad histórica, elementos que congregan y permiten unirse para tomar decisiones. Un espacio geográfico particular. Refuerza el sentido de pertenencia a partir de características compartidas.
Son muchos los teóricos que han abordado este asunto y hay varias experiencias en el país sobre el particular. Este como dije es un ligero acercamiento al tema, viable, pero que amerita el estudio de los teóricos y de las experiencias que existen en el país y en distintos países donde campean la globalización especie de telón de fondo, la urbanización, la revisión de la noción tradicional de ciudad, hacia el logro de una propuesta definitiva del asunto.
Con el preámbulo de mi columna de ayer, hago una breve aproximación a una reflexión acerca de las potencialidades de la ciudad para constituir una nueva organización político-administrativa como sede su espacio físico y aledaños que respondan a las nuevas condiciones de desarrollo que estamos abordando, lo cual amerita la búsqueda de condiciones territoriales que […]
Con el preámbulo de mi columna de ayer, hago una breve aproximación a una reflexión acerca de las potencialidades de la ciudad para constituir una nueva organización político-administrativa como sede su espacio físico y aledaños que respondan a las nuevas condiciones de desarrollo que estamos abordando, lo cual amerita la búsqueda de condiciones territoriales que permitan a la población entre otros aspectos mejorar su sistema de vida. Estructura que permite conformar áreas integradas que puedan responder al desarrollo equitativo desde lo local y con proyectos de desarrollo regional que se proyecten hacia afuera, pero con fuertes lazos internos, sin desligarse de los proyectos nacionales.
El entorno es un elemento determinante en cuanto a la articulación de éste con la ciudad región, lo cual implica considerar la ciudad como un sistema abierto para que se puedan dar los flujos e intercambios de diversa índole, generando así una dinámica tanto del sistema urbano con el medio ambiente, interactuando con éste la ciudad región que dinamiza tanto el centro como la periferia, en mayor o menor medida.
Según uno de los famosos teóricos de este tema, Jordán, dice que serían tres los niveles para dar cuenta de la articulación entre procesos de globalización y procesos de urbanización en la región (América Latina, nota del autor):
• Los grados y formas de enlace–vínculos entre territorios y la economía–comunidad global.
• Los grados y tipos de transformaciones urbano–territoriales, producto o efecto de los variados tipos de articulaciones.
• Las razones y causas, principalmente endógenas y de políticas, que explican los grados de reproducción y traslación, o no, de los efectos exógenos a nivel territorial. Destaca aspectos como: la Identidad, medio ambiente, participación, proyecto político compartido, competitividad y mercadeo, conectividad, seguridad ciudadana, gobernabilidad, son los ocho problemas más importantes a resolver en la construcción de una ciudad región. No es menor la tarea. A éstos, se agrega en esta oportunidad una novena asunto: la seguridad alimentaria, las ciudades importan algunos alimentos básicos de lo que no está exento el Cesar y por tanto toda ciudad convive con un problema de seguridad alimentaria que, por cierto, cuando afecta a un porcentaje más o menos alto de la población, pasa a ser un problema nacional.
Según Wong la “Identidad local con ciudadanía global parece ser la tendencia la preocupación por los fenómenos analizados. El individuo contemporáneo se identifica con su territorio original–local, pero propende simultáneamente a desplegar y compartir hábitos y patrones de comportamiento globales” que posibilitan los elementos de la identidad regional, constituidas por: creencias, continuidad histórica, elementos que congregan y permiten unirse para tomar decisiones. Un espacio geográfico particular. Refuerza el sentido de pertenencia a partir de características compartidas.
Son muchos los teóricos que han abordado este asunto y hay varias experiencias en el país sobre el particular. Este como dije es un ligero acercamiento al tema, viable, pero que amerita el estudio de los teóricos y de las experiencias que existen en el país y en distintos países donde campean la globalización especie de telón de fondo, la urbanización, la revisión de la noción tradicional de ciudad, hacia el logro de una propuesta definitiva del asunto.