Lleno de emoción, Jerónimo Andrés Villazón a sus ocho años recibió un regalo poco usual para un niño de su edad, fue su tío Erick Cotes, quien le obsequio un acordeón, instrumento que le cambió la vida a este pequeño, lo encaminó por la ruta del folclor.

Jerónimo es pequeño, pero grande en talento, vallenato de nacimiento, con apenas 12 años de edad, tiempo en que ya ha cosechado numerosos triunfos.

Este año Jerónimo se presentó en el Festival de la Leyenda Vallenata, quedando como semifinalista. También participó en el Festival Cuna de Acordeones en Villanueva, La Guajira, donde fue uno de los finalistas de este certamen. Allí demostró que tiene talento y que poco a poco van llegando los reconocimientos.

El pasado 13 de octubre, ante cientos de espectadores Jerónimo dio la pelea enfrentándose con 29 concursantes de la categoría infantil, tocando el acordeón como nunca antes lo había hecho, cuando cayó la media noche, cansado y a su vez ansioso. Este vallenato fue coronado rey infantil en el Festival del Río Grande de la Magdalena celebrado en Barrancabermeja Santander.
Jerónimo cumplió uno sueños en compañía de sus amigos Martín Elías Vitola, en la Guacharaca, y Juan Manuel Vitola, en la caja. Durante la competencia se presentó con el paseo, ‘Agonía’ de Leandro Díaz; el merengue: ‘La gira’ de Juan Manuel Muegues, y la puya ‘Tocando con berraquera’ de su propia autoría, y el son ‘Alto de rosario’ de Alejo Durán.

Para este rey “no se debe sentir rivalidad entre los concursantes”, por eso en cada una de sus presentaciones Jerónimo crea lazos de amistad, considerada por sus padres como una de sus virtudes, además de ser disciplinado en cada una de las cosas que se propone.

Jerónimo sueña con ser un acordeonero reconocido, y tocar junto a los grandes del folclor vallenato, además seguir esforzándose para llegar a ser un rey profesional.

Por: Katherín Machado/ EL PILÓN