Entre enero y agosto de este año, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar registró 17.713 nuevos casos de agresión y vulneración de derechos contra niñas y adolescentes de sexo femenino.
Entre enero y agosto de este año, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar registró 17.713 nuevos casos de agresión y vulneración de derechos contra niñas y adolescentes de sexo femenino. La entidad defensora de los derechos de los menores de edad en Colombia asegura que el abuso sexual es uno de los delitos más frecuentes contra las niñas. En 2016, el ICBF atendió 8.780 niñas y adolescentes por esta causa, y en lo que va del año 2017 se han reportado 6.217 casos. Según el Instituto Nacional de Medicina Legal, en Colombia cada día 43 niñas son víctimas de este tipo de violencia.
No son cifras nuevas, la tendencia de violencia en todas sus manifestaciones contra los menores de edad, especialmente contra las niñas, siempre se ha registrado y aunque han pasado vigencias en las que los números disminuyen, es un problema que no ha sido atendido como debe ser, aún quedan muchas cosas por hacer, compromisos por cumplir y estrategias por aplicar.
El Día Internacional de la Niña que se conmemoró esta semana, es relativamente nuevo. La fecha fue instaurada en diciembre de 2011 y busca acortar las brechas de género desde la capacitación y la formación. Naciones Unidas acordó esta fecha para “reconocer los derechos de las niñas y los problemas excepcionales que las niñas confrontan en todo el mundo”, con el argumento de que “con frecuencia, en las aldeas, los barrios marginales y los campamentos de refugiados de todo el mundo, las niñas se quedan atrás: no reciben alimentos nutritivos ni atención médica ni una educación de calidad y se ven expuestas a la violencia sexual”.
En Colombia esa motivación que tuvo Naciones Unidas es evidente. El informe Forensis 2016 asegura que durante el decenio 2007-2016 se conocieron 122.328 casos de violencias contra niños, niñas y adolescentes (NNA) ocurridos en Colombia, lo que significa aproximadamente 12.233 casos por año, 840 por mes y 28 por día. Las tasas más elevadas del periodo se presentaron durante 2011 y 2009 y, por el contrario, la menor tasa se registró en 2013. En el último año la cifra ascendió a 10.082 casos, 353 menos que en 2015, que significó una tasa de 65,25 por 100.000 habitantes.
Hoy expresamos con preocupación que de esas cifras, el departamento del Cesar aporta cientos de casos, los que muchas veces pasan inadvertidos para el resto de la comunidad. En el Cesar hay niñas violentadas, física, sicológica y sexualmente.
En el 2016, según Forensis, reportaron 99 casos de menores de edad que fueron víctima de violencia, de ellos 50 fueron niñas. El mayor número ocurrió en Valledupar, con 24 casos, y en Aguachica nueve. ¿Cuántos casos se quedan sin denunciar y pasan a engrosar los números de subregistros? ¿Qué está pasando en los barrios de Valledupar y Aguachica, donde se registran la mayoría de casos? ¿Qué hacen las autoridades en el Cesar para enfrentar la violencia contra las niñas?
Nos unimos al llamado que hizo la directora general de, ICBF, Karen Abudinen Abuchaibe, a la sociedad para que renueve su compromiso para defender y respetar los derechos de las niñas y para construir entornos adecuados que permitan hacer de la equidad de género una realidad.
Entre enero y agosto de este año, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar registró 17.713 nuevos casos de agresión y vulneración de derechos contra niñas y adolescentes de sexo femenino.
Entre enero y agosto de este año, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar registró 17.713 nuevos casos de agresión y vulneración de derechos contra niñas y adolescentes de sexo femenino. La entidad defensora de los derechos de los menores de edad en Colombia asegura que el abuso sexual es uno de los delitos más frecuentes contra las niñas. En 2016, el ICBF atendió 8.780 niñas y adolescentes por esta causa, y en lo que va del año 2017 se han reportado 6.217 casos. Según el Instituto Nacional de Medicina Legal, en Colombia cada día 43 niñas son víctimas de este tipo de violencia.
No son cifras nuevas, la tendencia de violencia en todas sus manifestaciones contra los menores de edad, especialmente contra las niñas, siempre se ha registrado y aunque han pasado vigencias en las que los números disminuyen, es un problema que no ha sido atendido como debe ser, aún quedan muchas cosas por hacer, compromisos por cumplir y estrategias por aplicar.
El Día Internacional de la Niña que se conmemoró esta semana, es relativamente nuevo. La fecha fue instaurada en diciembre de 2011 y busca acortar las brechas de género desde la capacitación y la formación. Naciones Unidas acordó esta fecha para “reconocer los derechos de las niñas y los problemas excepcionales que las niñas confrontan en todo el mundo”, con el argumento de que “con frecuencia, en las aldeas, los barrios marginales y los campamentos de refugiados de todo el mundo, las niñas se quedan atrás: no reciben alimentos nutritivos ni atención médica ni una educación de calidad y se ven expuestas a la violencia sexual”.
En Colombia esa motivación que tuvo Naciones Unidas es evidente. El informe Forensis 2016 asegura que durante el decenio 2007-2016 se conocieron 122.328 casos de violencias contra niños, niñas y adolescentes (NNA) ocurridos en Colombia, lo que significa aproximadamente 12.233 casos por año, 840 por mes y 28 por día. Las tasas más elevadas del periodo se presentaron durante 2011 y 2009 y, por el contrario, la menor tasa se registró en 2013. En el último año la cifra ascendió a 10.082 casos, 353 menos que en 2015, que significó una tasa de 65,25 por 100.000 habitantes.
Hoy expresamos con preocupación que de esas cifras, el departamento del Cesar aporta cientos de casos, los que muchas veces pasan inadvertidos para el resto de la comunidad. En el Cesar hay niñas violentadas, física, sicológica y sexualmente.
En el 2016, según Forensis, reportaron 99 casos de menores de edad que fueron víctima de violencia, de ellos 50 fueron niñas. El mayor número ocurrió en Valledupar, con 24 casos, y en Aguachica nueve. ¿Cuántos casos se quedan sin denunciar y pasan a engrosar los números de subregistros? ¿Qué está pasando en los barrios de Valledupar y Aguachica, donde se registran la mayoría de casos? ¿Qué hacen las autoridades en el Cesar para enfrentar la violencia contra las niñas?
Nos unimos al llamado que hizo la directora general de, ICBF, Karen Abudinen Abuchaibe, a la sociedad para que renueve su compromiso para defender y respetar los derechos de las niñas y para construir entornos adecuados que permitan hacer de la equidad de género una realidad.