Durante el cierre del tercer Congreso ACP, “Trabajando juntos por un mejor futuro”, las regalías estuvieron en el centro de la discusión. Durante la última jornada se realizó un debate de candidatos y precandidatos a la Presidencia de la República, quienes presentaron ante el público sus visiones frente al sector de hidrocarburos y al futuro del panorama energético del país.

En un debate liderado por la periodista Claudia Palacios, varios de los candidatos coincidieron en que debe modificarse el Sistema General de Regalías. Por un lado, el precandidato del Centro Democrático, Iván Duque, sostuvo que las regiones productoras deben recibir más recursos que los actuales y que debería pensarse en una redistribución al sistema de tal manera que, por ejemplo, 50 % de los recursos vayan a la nación y 50 % para las regiones.

Seguidamente, la candidata por el partido Alianza Verde, Claudia López, sostuvo que lo más importante no es si hay un cambio o no, sino que el presupuesto de la nación y de las regiones no debe depender exclusivamente de las regalías, pues esto genera riesgos para la estabilidad fiscal. A su turno el candidato independiente Juan Carlos Pinzón, se comprometió a llevar una reforma al régimen de regalías si es elegido presidente: “no puede pasar que haya áreas que producen riqueza y sean pobres. Es necesario invertir en esas áreas del país y el mecanismo de obras por impuestos puede funcionar”, puntualizó.

La candidata independiente Marta Lucía Ramírez también abogó por un cambio en la distribución de las regalías de 40 % para la nación y 60 % para las regiones productoras, estos recursos –sostuvo– deberían utilizarse para desarrollar infraestructura y establecer mecanismos de veeduría y participación en los territorios.

El también precandidato por el Centro Democrático, Carlos Holmes Trujillo, señaló que es necesario revisar el sistema de regalías actual, crear el Fondo Sembrar con recursos de regalías que financie grandes proyectos de desarrollo y cambiar la regalía fija por regalías variables según el tamaño del proyecto.

El candidato independiente Gustavo Petro explicó que desde su perspectiva el país debe hacer una transición de cinco años hacia una economía cero carbonos, que debería durar mientras se agotan las reservas petroleras. Durante este tiempo, señaló, que las regalías existentes deberían financiar la transición económica propuesta.

Los candidatos coincidieron en la necesidad de fortalecer la presencia del Estado en las regiones, para garantizar una institucionalidad sólida que pueda resolver las necesidades básicas de las regiones y así evitar que se confunda el rol de la industria privada con el de la acción gubernamental.
‘Trabajando juntos para un mejor futuro’

La clausura del Congreso inició con la intervención del presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo, Francisco José Lloreda Mera. El líder gremial enfatizó en su intervención en la necesidad de realizar un esfuerzo colectivo para que el sector de hidrocarburos siga siendo un instrumento de desarrollo para el país y de beneficio para todos los colombianos.

“Estamos aquí porque nos resistimos a pensar que terminaremos siendo importadores de petróleo y gas en cinco años, teniendo de ambos bajo tierra; que se desaprovechará la capacidad del sector de aportar recursos de inversión al país: $64 billones para los próximos cuatro años; que pondremos en riesgo la seguridad energética de Colombia; o a vivir de reforma tributaria en reforma tributaria hasta espantar la inversión nacional y extranjera –ya inquieta– y extenuar la capacidad fiscal de los ciudadanos”, expresó Lloreda Mera.

Luego de su intervención se presentó un saludo del presidente Juan Manuel Santos Calderón, quien pese a no poder asistir al Congreso por encontrarse en la Asamblea General de las Naciones Unidas en New York, envió un mensaje a través de un vídeo en el que se dirigió a los representantes de la industria y reiteró su compromiso de reunirse cada seis meses con las empresas del sector para observar su evolución e identificar oportunidades de mejora. Recalcó que se ha definido una agenda de trabajo con la industria, de la cuál resaltó la reglamentación del Certificado de Reembolso Tributario (CERT).

Finalmente, el vicepresidente Óscar Naranjo se dirigió al auditorio expresando su agradecimiento con la industria por no haber claudicado y haber mantenido sus inversiones en las regiones en las épocas más difíciles del país, y a pesar de ser víctimas de atentados terroristas y secuestros.

“Estamos en un punto de inflexión en la historia. Tenemos un conflicto que comienza a quedar atrás en nuestra historia y marca un antes y un después (…) Ustedes fueron los únicos que permanecieron en las regiones, además del Estado, en un territorio hostil y peligroso. Les pido que usemos lecciones aprendidas de esa experiencia para contribuir al mejor desempeño institucional en todo el territorio”, señaló.

Expresó además que en esta nueva realidad es importante impulsar la inversión en las regiones y que herramientas como los Contratos Paz, los Planes Paz y los Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial, PDET, permitirán realizar toda una transformación para mejorar la calidad de vida de las personas en las regiones. Resaltó, a título personal, su opinión de que el régimen de regalías debe ser revisado para que las regiones productoras no sigan percibiendo que la industria no les deja beneficios.

“No significa regresar al régimen anterior, pero sí es necesario efectuar algunas correcciones y realizar algunos ajustes”, precisó.

En esto coincidió el presidente de la ACP, quien explicó que “las regalías no son la única explicación al malestar en las regiones productoras, pero es central. Sobre ello hemos insistido desde hace años y lo hacemos de nuevo: Es necesario reformar el actual sistema general de regalías si queremos que haya más producción de petróleo y gas en Colombia. Las regiones petroleras reclaman con razón un sistema de regalías más justo y equitativo, más efectivo en su ejecución, y blindado contra la corrupción”.

El tercer Congreso ACP cerró con una asistencia de 620 personas, entre empresarios, trabajadores de la industria de hidrocarburos, académicos, funcionarios públicos de alto nivel que durante dos días discutieron sobre el futuro de la industria de hidrocarburos en Colombia.