Para que el cultivo de cacao sea en un futuro cercano uno de los principales renglones productores y exportadores del agro colombiano, Corpoica desarrolla una investigación tendiente a impactar en el mercado internacional, denominada ‘Sistemas agroforestales: opción para la adaptación y mitigación del cambio climático en la cacao del Caribe’.
Para que el cultivo de cacao sea en un futuro cercano uno de los principales renglones productores y exportadores del agro colombiano, Corpoica desarrolla una investigación tendiente a impactar en el mercado internacional, denominada ‘Sistemas agroforestales: opción para la adaptación y mitigación del cambio climático en la cacao del Caribe’.
De acuerdo con el ingeniero forestal, Darwin Lombo, la ruta a seguir es que Colombia se convierta en el productor de cacao más importante a nivel global, que sea el nicho de cacaos “finos y de aroma”, para lo cual Corpoica investiga, registra y libera clones (variedades) de cacao sobresalientes, con la calidad requerida y con buena productividad.
“En Colombia actualmente la productividad no es la más competitiva. Existen aproximadamente unas 160 mil hectáreas de cacao tradicionales, el 50 % produce menos de 300 kilos por hectárea, y las otras 80 mil que han sido sembradas en la última década, aunque más productivas, tampoco llegan siquiera a una tonelada por hectárea”, aseguró el experto.
En la finca El Porvenir, ubicada en la vereda Sabanas de León, en el municipio de Manaure-Cesar, a 827 metros sobre el nivel del mar, en terreno ondulado con suelos fértiles, Adalberto Baquero y su familia tienen un área de siete hectáreas históricamente dedicada a la siembra de café. Sin embargo, el propietario de la finca, estableció hace 18 años, cinco hectáreas de cacao con clones como ICS 95 y criollos asociado con árboles de nogal bajero y árboles de aguacate criollo. En la actualidad sus hijos están a cargo de las actividades de manejo y cosecha de cacao, con una productividad que no supera la media tonelada por hectárea.
El director del Centro de Investigación Motilonia, Mario Augusto Zapata Tamayo, explicó que “en el mes de noviembre de 2016, Corpoica para ampliar el registro de sus clones en el departamento del Cesar, estableció en la finca El Porvenir una parcela de una hectárea, para ampliar el registro de los clones TCS 01 y TCS 06. Inicialmente se realizó el respectivo análisis de suelos que permitió diseñar el programa de manejo agronómico, identificando la fertilidad del suelo, la disponibilidad de nutrientes y orientando el régimen de enmiendas a realizar en el cultivo. También se estableció en toda la parcela riego por micro aspersión, que se realiza durante la época seca con un caudal disponible de tres cuartos de pulgada y el uso de tres microaspersores, los cuales son cambiados de lugar cada 12 horas, tratando de cubrir la mayor área posible de la parcela y optimizando el uso del recurso hídrico”.
El funcionario explicó que la variedad de cacao TCS 01 es un clon de cacao con alto potencial productivo y de buena calidad organoléptica (sabor a nuez), con una densidad de siembra recomendada de 900 clones certificados por hectárea. Entre sus ventajas comparativas más sobresalientes están: aumentar la producción por hectárea de 950 kilogramos (kg) a 1.500 kg, ya que la almendra pesa dos veces más que el promedio de peso de la almendra nacional (1,7 gramos); la productividad por árbol es de 3 kg al año, después de 18 meses de haber sido establecido; y debido a la genética de este cacao hay una disminución en la producción de cascarilla de 9,5 % a 10,9 %.
Mientras que la variedad de cacao TCS 06 es un clon con alto potencial productivo y con muy buena calidad organoléptica. La densidad de siembra recomendada es de 900 clones certificados por hectárea. Sus ventajas comparativas son: alta concentración de sabor a nuez y cacao, que le permite cumplir con características exigidas por los mercados especializados; la productividad por árbol es de 2 kg en un año. Por lo general se logra 82 % de mazorcas sanas, por lo que se disminuyen los costos por insumos y mano de obra en control de enfermedades.
En la finca El Porvenir, según Zapata Tamayo, “los clones de cacao TCS01 y TCS06 están acompañados en un modelo de asocio de Sistema Agro Forestal, como opción productiva de corto y mediano plazo está asociado un cultivo de plátano hartón con una producción estimada de 12 toneladas por hectárea por año. Como opción productiva a largo plazo se plantaron árboles maderables de roble, del cual se estima un volumen de madera con corteza de roble de 3,0 metros cúbicos por hectárea con una densidad final de 100 árboles por hectárea. Corpoica con el uso de los genotipos de cacao TCS 01 y TCS 06, mas las recomendaciones agronómicas, espera una producción por encima de 1000 kilos por hectárea, aumentando de esta forma la productividad y competitividad”.
Annelise Barriga Ramírez/EL PILÓN
Para que el cultivo de cacao sea en un futuro cercano uno de los principales renglones productores y exportadores del agro colombiano, Corpoica desarrolla una investigación tendiente a impactar en el mercado internacional, denominada ‘Sistemas agroforestales: opción para la adaptación y mitigación del cambio climático en la cacao del Caribe’.
Para que el cultivo de cacao sea en un futuro cercano uno de los principales renglones productores y exportadores del agro colombiano, Corpoica desarrolla una investigación tendiente a impactar en el mercado internacional, denominada ‘Sistemas agroforestales: opción para la adaptación y mitigación del cambio climático en la cacao del Caribe’.
De acuerdo con el ingeniero forestal, Darwin Lombo, la ruta a seguir es que Colombia se convierta en el productor de cacao más importante a nivel global, que sea el nicho de cacaos “finos y de aroma”, para lo cual Corpoica investiga, registra y libera clones (variedades) de cacao sobresalientes, con la calidad requerida y con buena productividad.
“En Colombia actualmente la productividad no es la más competitiva. Existen aproximadamente unas 160 mil hectáreas de cacao tradicionales, el 50 % produce menos de 300 kilos por hectárea, y las otras 80 mil que han sido sembradas en la última década, aunque más productivas, tampoco llegan siquiera a una tonelada por hectárea”, aseguró el experto.
En la finca El Porvenir, ubicada en la vereda Sabanas de León, en el municipio de Manaure-Cesar, a 827 metros sobre el nivel del mar, en terreno ondulado con suelos fértiles, Adalberto Baquero y su familia tienen un área de siete hectáreas históricamente dedicada a la siembra de café. Sin embargo, el propietario de la finca, estableció hace 18 años, cinco hectáreas de cacao con clones como ICS 95 y criollos asociado con árboles de nogal bajero y árboles de aguacate criollo. En la actualidad sus hijos están a cargo de las actividades de manejo y cosecha de cacao, con una productividad que no supera la media tonelada por hectárea.
El director del Centro de Investigación Motilonia, Mario Augusto Zapata Tamayo, explicó que “en el mes de noviembre de 2016, Corpoica para ampliar el registro de sus clones en el departamento del Cesar, estableció en la finca El Porvenir una parcela de una hectárea, para ampliar el registro de los clones TCS 01 y TCS 06. Inicialmente se realizó el respectivo análisis de suelos que permitió diseñar el programa de manejo agronómico, identificando la fertilidad del suelo, la disponibilidad de nutrientes y orientando el régimen de enmiendas a realizar en el cultivo. También se estableció en toda la parcela riego por micro aspersión, que se realiza durante la época seca con un caudal disponible de tres cuartos de pulgada y el uso de tres microaspersores, los cuales son cambiados de lugar cada 12 horas, tratando de cubrir la mayor área posible de la parcela y optimizando el uso del recurso hídrico”.
El funcionario explicó que la variedad de cacao TCS 01 es un clon de cacao con alto potencial productivo y de buena calidad organoléptica (sabor a nuez), con una densidad de siembra recomendada de 900 clones certificados por hectárea. Entre sus ventajas comparativas más sobresalientes están: aumentar la producción por hectárea de 950 kilogramos (kg) a 1.500 kg, ya que la almendra pesa dos veces más que el promedio de peso de la almendra nacional (1,7 gramos); la productividad por árbol es de 3 kg al año, después de 18 meses de haber sido establecido; y debido a la genética de este cacao hay una disminución en la producción de cascarilla de 9,5 % a 10,9 %.
Mientras que la variedad de cacao TCS 06 es un clon con alto potencial productivo y con muy buena calidad organoléptica. La densidad de siembra recomendada es de 900 clones certificados por hectárea. Sus ventajas comparativas son: alta concentración de sabor a nuez y cacao, que le permite cumplir con características exigidas por los mercados especializados; la productividad por árbol es de 2 kg en un año. Por lo general se logra 82 % de mazorcas sanas, por lo que se disminuyen los costos por insumos y mano de obra en control de enfermedades.
En la finca El Porvenir, según Zapata Tamayo, “los clones de cacao TCS01 y TCS06 están acompañados en un modelo de asocio de Sistema Agro Forestal, como opción productiva de corto y mediano plazo está asociado un cultivo de plátano hartón con una producción estimada de 12 toneladas por hectárea por año. Como opción productiva a largo plazo se plantaron árboles maderables de roble, del cual se estima un volumen de madera con corteza de roble de 3,0 metros cúbicos por hectárea con una densidad final de 100 árboles por hectárea. Corpoica con el uso de los genotipos de cacao TCS 01 y TCS 06, mas las recomendaciones agronómicas, espera una producción por encima de 1000 kilos por hectárea, aumentando de esta forma la productividad y competitividad”.
Annelise Barriga Ramírez/EL PILÓN