Tragedia en el Río Badillo Promediaban las cinco y cuarto, o cinco y media de la tarde, cuando una avalancha sorprendió a los bañistas que disfrutaban de las frías aguas del río Badillo, en el balneario del corregimiento ‘La Vega’, al norte de Valledupar. Pese a los llamados de atención que hicieron las autoridades y […]
Tragedia en el Río Badillo
Promediaban las cinco y cuarto, o cinco y media de la tarde, cuando una avalancha sorprendió a los bañistas que disfrutaban de las frías aguas del río Badillo, en el balneario del corregimiento ‘La Vega’, al norte de Valledupar.
Pese a los llamados de atención que hicieron las autoridades y miembros de la comunidad para que las personas que estaban en el agua abandonaran el río, muchos hicieron caso omiso y fueron arrasados por la fuerte creciente, que dejó como saldo cuatro personas muertas.
En el momento todo fue confusión, las personas gritaban y lloraban buscando a los familiares y amigos con los que estaban de paseo aprovechando el puente festivo.
De inmediato las autoridades civiles y la policía acantonada en el corregimiento de Patillal, organismos de socorro como el cuerpo de bomberos voluntarios de Valledupar, la Defensa Civil seccional Cesar y miembros de la comunidad, iniciaron las acciones para rescatar a tres personas que se encontraban montadas en un árbol en medio de las turbulentas aguas.
Cuando las personas que se encontraban en las ramas de un árbol eran puestas a salvo, se conoció la noticia que la creciente había arrastrado a dos mujeres y a dos hombres quienes disfrutaban de un paseo.
Voluntarios del Cuerpo de Bomberos, la Defensa Civil, el corregidor de La Vega, Noé Vicente Corzo y varios miembros de la comunidad iniciaron la búsqueda de los cuerpos, pero se metió la noche y les tocó suspender las labores.
A las 5:45 de la mañana, el corregidor con su bloque de búsqueda, los bomberos y la Defensa Civil, se dividieron en varios grupos para reiniciar la operación de rescate de los cuerpos.
A escaso un kilómetro de donde sucedieron los hechos, en el sitio conocido como ‘El Alférez’, el grupo de rescatistas encontró incrustados entre árboles y piedras los cuerpos de Elena Patricia Gutiérrez Alvarado y Shirley Isabel Zequeda Torres.
Horas más tarde, fueron encontrados los cadáveres de Gustavo Araújo Torres y José Salomón Peña Lerech, quien había llegado procedente de Cartagena el pasado jueves 3 de junio a cerrar unos negocios y a disfrutar del lanzamiento de la nueva producción de Silvestre Dangond y Juancho de la Espriella, Cantinero.
El cuerpo sin vida de Gustavo Araújo Torres, fue encontrado en la margen izquierda del río Badillo, a la altura de la finca Las Cuevas, mientras que José Salomón Peña Lerech, fue ubicado por los bloques de rescate entre las fincas Los Mangos y La Vega Abajo.
Miembros del Cuerpo Técnico de Investigación CTI, se trasladaron hasta los sitios donde fueron encontrados los cuerpos de las personas que habían sido arrastradas por la avalancha en el río Badillo, para practicar las diligencias de inspección y levantamiento de los cadáveres.
Los cadáveres fueron trasladados a Medicina Legal donde les practicaron las necropsias, para que sus familiares le den cristiana sepultura.
“Estoy vivo de milagro”
Víctor Torres, primo de José Salomón (muerto), quien se salvó de morir en la avalancha del río Badillo, le dijo a EL PILÓN que “estábamos con un grupo de amigos bañándonos en el río, cuando empezó la lluvia, nos bañábamos tranquilamente y de pronto se vino la creciente y nos arrastró a todos. Yo pude salir, pero no supe nada más de mis compañeros”, dijo.
“Fue un momento muy difícil, nosotros llegamos a almorzar y nos quedamos en el río, cuando sucedió la tragedia, yo me aferré a Dios y creo que estoy vivo es de milagro”, señaló.
Torres reconoce que las autoridades les pidieron varias veces que salieran del agua, pero fue muy tarde porque la creciente los sorprendió y arrasó con las personas que estaban en el lugar.
Víctor Torres, de 34 años, natural de Cartagena, había llegado a Valledupar en compañía de unos amigos para disfrutar del lanzamiento del trabajo de Silvestre y aprovechando el puente festivo se quedaron departiendo en Valledupar. “No conocía el río, los amigos me invitaron y nos venimos para acá y ya vieron lo que sucedió”, agregó.
Organismos de socorro
actuaron de inmediato
Los organismos de socorro, como la Defensa Civil y el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Valledupar actuaron de inmediato, y lograron salvar de las turbulentas aguas a tres personas y rescatar en un tiempo record los cadáveres de las cuatro personas que habían sido arrastradas por la avalancha del río Badillo.
Más de 70 voluntarios de las dos entidades, con el apoyo de la comunidad se desplegaron en el sector para rescatar los cuerpos sin vida y entregárselos a las autoridades competentes.
Las víctimas de esta tragedia que ocurrió en las aguas del río Badillo en el balneario de La Vega, donde una avalancha que arrastraba piedras, palos y lodo acabó con sus vidas eran dos mujeres residentes en Valledupar y dos hombres naturales de Cartagena, Bolívar.
Una de las muertas es Elena Patricia Gutiérrez Alvarado, de 29 años, natural de Chimichagua, abogada quien trabajaba en la parte de asuntos jurídicos del almacén de la gobernación del Cesar.
Elena Patricia residía en el barrio Cañaguate de Valledupar y se encontraba departiendo con unos amigos que llegaron procedentes de Cartagena.
Shirley Isabel Zequeda Torres, de 29 años, viuda, natural de Valledupar, quien residía en el barrio Cañaguate, se dedicaba al comercio y tenía un hijo de 6 años.
Gustavo Araújo Torres, de 33 años, natural de Cartagena quien se dedicaba al comercio y había llegado a Valledupar a acompañar a un primo que estaba cerrando un negocio en la capital del Cesar.
José Salomón Peña Lerech, de 29 años, natural de Cartagena, de oficio comerciante, quien tenía dos meses de estar radicado en Valledupar donde se dedicaba al comercio de minutos de celular, deja una niña de 3 años.
Fueron muchas las personas que participaron del rescate de las personas que quedaron aislados en los árboles y piedras, y también de los cuerpos de las que murieron a consecuencia de los golpes que recibieron al ser arrastrados por la avalancha en el Badillo.
Noé Vicente Corzo
corregidor de La Vega
La creciente tomó por sorpresa a los turistas, varios quedaron guindados en unas piedras y en un árbol y desafortunadamente a otros los arrastró la corriente y murieron.
Iniciamos las labores de rescate con el apoyo de la comunidad y los organismos de socorro.
Todos los fines de semana contamos con el apoyo de la policía de Patillal, los agentes cuando comenzó a llover se acercaron a los bañistas para pedirles que se salieran del agua y ellos dijeron que no se preocuparan que ya se salían y no pasó mucho tiempo cuando los sorprendió la avalancha.
Álvaro Muegue
Voluntario de los Bomberos
Para rescatar a las personas que estaban en medio de la creciente en una isla, utilizamos arnet, cuerdas y se utilizó la técnica requerida para estos casos, rescatamos a tres personas con el apoyo de la comunidad.
Un joven de la comunidad se atrevió a desafiar la creciente y se lanzó para llegar hasta donde estaban las personas, pasó la cuerda y así pudimos rescatarlas.
En la mañana iniciamos los trabajos para rescatar los cadáveres de las personas que fueron arrastradas por la avalancha.
Jhonny Molina
habitante de La Vega
Para nosotros fue un éxito este rescate, porque nunca lo habíamos hecho y sin importar el riesgo rescatamos a las personas que estaban en peligro de ser arrastrados por la corriente. Yo los vi cuando estaban montados en un árbol y comenzamos con el rescate, luego caminamos varios kilómetros río abajo para encontrar los cuerpos.
Leonardo Daniel Barrio
habitante de La Vega
Yo vi a las personas en el árbol, me encomendé a Dios y me lance al agua para ayudar a estas personas. Me tocó subir varios metros para que la corriente me tirara cerca de donde estaban estas personas.
Leonardo quien arriesgó su vida para salvar a las personas que estaban en peligro, demandó de la administración municipal la ubicación de un grupo de rescate en el balneario para evitar más hechos dolorosos. “Esta no es la primera vez que me toca sacar gente del río, ya he rescatado a por lo menos 20 personas en este balneario”, señaló.
El Coronel Luis Felipe Valencia Hurtado – comandante de la Defensa Civil seccional Cesar, quien participó de las labores de rescate en el río Badillo, indicó que la entidad cuenta con un grupo de voluntarios preparados para este tipo de actividades, quienes pusieron a prueba su conocimiento y preparación en el rescate de las personas que estaban en el árbol y los cadáveres.
Valencia Hurtado señaló que en esta época de lluvias no es recomendable bañarse en los ríos en horas de la tarde.
“Estamos pendientes de formar un convenio con la alcaldía, pero por la ley de garantías no se han girado los recursos, nosotros tenemos el personal preparado para ubicarlo tanto en los ríos guatapuri y Badillo, pero se requieren de unos recursos”, señaló el oficial retirado.
Por su parte, el secretario municipal de gobierno, Rober Romero Ramírez, hizo un llamado a la comunidad para que no abusen de los ríos y atiendan el requerimiento de las autoridades para evitar estas situaciones lamentables.
Tragedia en el Río Badillo Promediaban las cinco y cuarto, o cinco y media de la tarde, cuando una avalancha sorprendió a los bañistas que disfrutaban de las frías aguas del río Badillo, en el balneario del corregimiento ‘La Vega’, al norte de Valledupar. Pese a los llamados de atención que hicieron las autoridades y […]
Tragedia en el Río Badillo
Promediaban las cinco y cuarto, o cinco y media de la tarde, cuando una avalancha sorprendió a los bañistas que disfrutaban de las frías aguas del río Badillo, en el balneario del corregimiento ‘La Vega’, al norte de Valledupar.
Pese a los llamados de atención que hicieron las autoridades y miembros de la comunidad para que las personas que estaban en el agua abandonaran el río, muchos hicieron caso omiso y fueron arrasados por la fuerte creciente, que dejó como saldo cuatro personas muertas.
En el momento todo fue confusión, las personas gritaban y lloraban buscando a los familiares y amigos con los que estaban de paseo aprovechando el puente festivo.
De inmediato las autoridades civiles y la policía acantonada en el corregimiento de Patillal, organismos de socorro como el cuerpo de bomberos voluntarios de Valledupar, la Defensa Civil seccional Cesar y miembros de la comunidad, iniciaron las acciones para rescatar a tres personas que se encontraban montadas en un árbol en medio de las turbulentas aguas.
Cuando las personas que se encontraban en las ramas de un árbol eran puestas a salvo, se conoció la noticia que la creciente había arrastrado a dos mujeres y a dos hombres quienes disfrutaban de un paseo.
Voluntarios del Cuerpo de Bomberos, la Defensa Civil, el corregidor de La Vega, Noé Vicente Corzo y varios miembros de la comunidad iniciaron la búsqueda de los cuerpos, pero se metió la noche y les tocó suspender las labores.
A las 5:45 de la mañana, el corregidor con su bloque de búsqueda, los bomberos y la Defensa Civil, se dividieron en varios grupos para reiniciar la operación de rescate de los cuerpos.
A escaso un kilómetro de donde sucedieron los hechos, en el sitio conocido como ‘El Alférez’, el grupo de rescatistas encontró incrustados entre árboles y piedras los cuerpos de Elena Patricia Gutiérrez Alvarado y Shirley Isabel Zequeda Torres.
Horas más tarde, fueron encontrados los cadáveres de Gustavo Araújo Torres y José Salomón Peña Lerech, quien había llegado procedente de Cartagena el pasado jueves 3 de junio a cerrar unos negocios y a disfrutar del lanzamiento de la nueva producción de Silvestre Dangond y Juancho de la Espriella, Cantinero.
El cuerpo sin vida de Gustavo Araújo Torres, fue encontrado en la margen izquierda del río Badillo, a la altura de la finca Las Cuevas, mientras que José Salomón Peña Lerech, fue ubicado por los bloques de rescate entre las fincas Los Mangos y La Vega Abajo.
Miembros del Cuerpo Técnico de Investigación CTI, se trasladaron hasta los sitios donde fueron encontrados los cuerpos de las personas que habían sido arrastradas por la avalancha en el río Badillo, para practicar las diligencias de inspección y levantamiento de los cadáveres.
Los cadáveres fueron trasladados a Medicina Legal donde les practicaron las necropsias, para que sus familiares le den cristiana sepultura.
“Estoy vivo de milagro”
Víctor Torres, primo de José Salomón (muerto), quien se salvó de morir en la avalancha del río Badillo, le dijo a EL PILÓN que “estábamos con un grupo de amigos bañándonos en el río, cuando empezó la lluvia, nos bañábamos tranquilamente y de pronto se vino la creciente y nos arrastró a todos. Yo pude salir, pero no supe nada más de mis compañeros”, dijo.
“Fue un momento muy difícil, nosotros llegamos a almorzar y nos quedamos en el río, cuando sucedió la tragedia, yo me aferré a Dios y creo que estoy vivo es de milagro”, señaló.
Torres reconoce que las autoridades les pidieron varias veces que salieran del agua, pero fue muy tarde porque la creciente los sorprendió y arrasó con las personas que estaban en el lugar.
Víctor Torres, de 34 años, natural de Cartagena, había llegado a Valledupar en compañía de unos amigos para disfrutar del lanzamiento del trabajo de Silvestre y aprovechando el puente festivo se quedaron departiendo en Valledupar. “No conocía el río, los amigos me invitaron y nos venimos para acá y ya vieron lo que sucedió”, agregó.
Organismos de socorro
actuaron de inmediato
Los organismos de socorro, como la Defensa Civil y el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Valledupar actuaron de inmediato, y lograron salvar de las turbulentas aguas a tres personas y rescatar en un tiempo record los cadáveres de las cuatro personas que habían sido arrastradas por la avalancha del río Badillo.
Más de 70 voluntarios de las dos entidades, con el apoyo de la comunidad se desplegaron en el sector para rescatar los cuerpos sin vida y entregárselos a las autoridades competentes.
Las víctimas de esta tragedia que ocurrió en las aguas del río Badillo en el balneario de La Vega, donde una avalancha que arrastraba piedras, palos y lodo acabó con sus vidas eran dos mujeres residentes en Valledupar y dos hombres naturales de Cartagena, Bolívar.
Una de las muertas es Elena Patricia Gutiérrez Alvarado, de 29 años, natural de Chimichagua, abogada quien trabajaba en la parte de asuntos jurídicos del almacén de la gobernación del Cesar.
Elena Patricia residía en el barrio Cañaguate de Valledupar y se encontraba departiendo con unos amigos que llegaron procedentes de Cartagena.
Shirley Isabel Zequeda Torres, de 29 años, viuda, natural de Valledupar, quien residía en el barrio Cañaguate, se dedicaba al comercio y tenía un hijo de 6 años.
Gustavo Araújo Torres, de 33 años, natural de Cartagena quien se dedicaba al comercio y había llegado a Valledupar a acompañar a un primo que estaba cerrando un negocio en la capital del Cesar.
José Salomón Peña Lerech, de 29 años, natural de Cartagena, de oficio comerciante, quien tenía dos meses de estar radicado en Valledupar donde se dedicaba al comercio de minutos de celular, deja una niña de 3 años.
Fueron muchas las personas que participaron del rescate de las personas que quedaron aislados en los árboles y piedras, y también de los cuerpos de las que murieron a consecuencia de los golpes que recibieron al ser arrastrados por la avalancha en el Badillo.
Noé Vicente Corzo
corregidor de La Vega
La creciente tomó por sorpresa a los turistas, varios quedaron guindados en unas piedras y en un árbol y desafortunadamente a otros los arrastró la corriente y murieron.
Iniciamos las labores de rescate con el apoyo de la comunidad y los organismos de socorro.
Todos los fines de semana contamos con el apoyo de la policía de Patillal, los agentes cuando comenzó a llover se acercaron a los bañistas para pedirles que se salieran del agua y ellos dijeron que no se preocuparan que ya se salían y no pasó mucho tiempo cuando los sorprendió la avalancha.
Álvaro Muegue
Voluntario de los Bomberos
Para rescatar a las personas que estaban en medio de la creciente en una isla, utilizamos arnet, cuerdas y se utilizó la técnica requerida para estos casos, rescatamos a tres personas con el apoyo de la comunidad.
Un joven de la comunidad se atrevió a desafiar la creciente y se lanzó para llegar hasta donde estaban las personas, pasó la cuerda y así pudimos rescatarlas.
En la mañana iniciamos los trabajos para rescatar los cadáveres de las personas que fueron arrastradas por la avalancha.
Jhonny Molina
habitante de La Vega
Para nosotros fue un éxito este rescate, porque nunca lo habíamos hecho y sin importar el riesgo rescatamos a las personas que estaban en peligro de ser arrastrados por la corriente. Yo los vi cuando estaban montados en un árbol y comenzamos con el rescate, luego caminamos varios kilómetros río abajo para encontrar los cuerpos.
Leonardo Daniel Barrio
habitante de La Vega
Yo vi a las personas en el árbol, me encomendé a Dios y me lance al agua para ayudar a estas personas. Me tocó subir varios metros para que la corriente me tirara cerca de donde estaban estas personas.
Leonardo quien arriesgó su vida para salvar a las personas que estaban en peligro, demandó de la administración municipal la ubicación de un grupo de rescate en el balneario para evitar más hechos dolorosos. “Esta no es la primera vez que me toca sacar gente del río, ya he rescatado a por lo menos 20 personas en este balneario”, señaló.
El Coronel Luis Felipe Valencia Hurtado – comandante de la Defensa Civil seccional Cesar, quien participó de las labores de rescate en el río Badillo, indicó que la entidad cuenta con un grupo de voluntarios preparados para este tipo de actividades, quienes pusieron a prueba su conocimiento y preparación en el rescate de las personas que estaban en el árbol y los cadáveres.
Valencia Hurtado señaló que en esta época de lluvias no es recomendable bañarse en los ríos en horas de la tarde.
“Estamos pendientes de formar un convenio con la alcaldía, pero por la ley de garantías no se han girado los recursos, nosotros tenemos el personal preparado para ubicarlo tanto en los ríos guatapuri y Badillo, pero se requieren de unos recursos”, señaló el oficial retirado.
Por su parte, el secretario municipal de gobierno, Rober Romero Ramírez, hizo un llamado a la comunidad para que no abusen de los ríos y atiendan el requerimiento de las autoridades para evitar estas situaciones lamentables.