El Tribunal Administrativo del Cesar rechazó en la demanda instaurada contra el concejal de Valledupar, Yesith Triana Amaya, al no encontrar fundamentos en los señalamientos por doble militancia. El proceso inició durante la pasada contienda electoral, cuando Basilio Padilla, presidente del Partido Liberal, señaló que el concejal no estaba apoyando políticamente al candidato a la Alcaldía de Valledupar por esa colectividad, Rober Romero, sino a Augusto Ramírez Uhía, por el movimiento Avanzar es posible.

Basado en el supuesto apoyo del concejal al entonces candidato Ramírez Uhía, la dirección departamental del Partido Liberal decidió el 1 de octubre de 2015 quitar la voz y voto en la Corporación, coartándolo de participar en los debates hasta el pasado 31 de diciembre, y en caso de ser reelegido, como en efecto ocurrió, tal sanción iría hasta el 31 de diciembre del 2019.

En su momento, el presidente departamental del Partido Liberal se refirió al caso de la siguiente forma: “esto era algo que se veía venir por la cantidad de pruebas que fueron enviadas a la dirección nacional del partido con relación a la doble militancia, no se retiran los avales porque ese es el papel del Consejo Nacional Electoral”.

Sin embargo, el 13 de octubre de ese mismo año el Partido Liberal devolvió la voz y el voto al concejal Triana Amaya, luego de ser escuchado en el Tribunal Nacional Disciplinario de la colectividad, a donde se presentó voluntariamente con varias pruebas que habrían demostrado que sí estaba apoyando a Rober Romero a la Alcaldía de Valledupar, y a Arturo Calderón a la Gobernación del Cesar.

Tras ser escuchado y agotar el procedimiento, se estableció que el concejal no incurrió en doble militancia, por lo que levantó la sanción impuesta.