Hoy hablaré sobre fútbol y política, dos temas fascinantes de la población colombiana. La ocasión lo amerita, porque antier la selección mayor del fútbol colombiano revivió la esperanza de participar en el próximo Mundial de Fútbol que realizará la FIFA en el 2018. La  euforia es tan grande que ya muchos fanáticos del fútbol se sienten viendo jugando a nuestra selección en Rusia. Ojalá así sea.

El partido disputado con la selección de Bolivia tuvo un final dramático después  de haber ganado cómodamente el primer tiempo 2 a 0, en el segundo tiempo los jugadores de Colombia decayeron  y Bolivia empató, pero ganaron en el tiempo complementario con golazo marcado por Edwin Cardona de pase oportuno del juvenil Marlos Moreno, sin duda alguna, futura figura internacional del fútbol que deparará múltiples satisfacciones a los aficionados a tan maravilloso deporte.

Con los cambios realizados por el entrenador José Pékermam, la selección colombiana le ganó bien a la ecuatoriana, hasta ese momento invicta y única puntera en la eliminatoria que permite jugar en el Mundial de Fútbol. Todos los futbolistas de Colombia actuaron bien, tanto, que merecieron ganar por un marcador más alto que el 3 a 1, ya que el talentoso James Rodríguez en su afán de anotar goles le negó pases a Carlos Bacca, uno de ellos fue el que el mismo Bacca desaprovechó la oportunidad de anotar otro gol al creer que James lo metería; en cambio, Juan Guillermo Cuadrado, le cedió el segundo gol a Bacca, teniendo él la posibilidad de anotarlo con cierta facilidad.

James Rodríguez es un extraordinario futbolista que no necesita demostrarle su habilidad a Zidane, el entrenador del Real Madrid, sino ayudar a la selección de Colombia en marcar el mayor número  de goles necesarios para desempatar puestos, como Uruguay que desalojó a Ecuador del primer lugar por su promedio de goles. En todo caso, Colombia debe seguir jugando en equipo como procedió contra Ecuador, para permanecer en el 5° puesto de la clasificación, del cual no debe bajar sino subir, de lo contrario tendría que disputar el repechaje que concede  la opción de disputar la Copa Mundo de fútbol.

Mañana hay gran expectativa por la marcha nacional convocada por el uribismo con el propósito de  protestar contra el presidente Santos. Nadie que tenga siquiera algo de sensatez participará en una marcha de cariz netamente político, solo los áulicos del partido Centro Democrático participarán en tal protesta.

Aunque la mayoría de la gente se encuentra pasando difíciles penurias, está más interesada en que el presidente Santos logre un acuerdo de paz con la guerrilla, que junto con la corrupción y el narcotráfico son unos de los principales factores de la mala situación del país.

Si bien el uribismo quiso aprovechar la inconformidad presente  en este momento, el presidente Santos se le adelantó anunciando la apertura del proceso de paz con el ELN, aunque incierto, es una circunstancia que no se debe menospreciar, por lo tanto, le disminuirá muchedumbre a la marcha que con tanta vehemencia el expresidente Uribe le ha solicitado acompañamiento. Mañana se verá la cantidad de asistentes.