Desde hace más de cincuenta años, en el municipio de San Diego, Cesar, celebran con devoción la Semana Santa; de lunes a miércoles santo los niños participan activamente en las actividades religiosas y de jueves a domingo de resurrección las celebraciones están a cargo de los adultos.
Desde hace más de cincuenta años, en el municipio de San Diego, Cesar, celebran con devoción la Semana Santa; de lunes a miércoles santo los niños participan activamente en las actividades religiosas y de jueves a domingo de resurrección las celebraciones están a cargo de los adultos.
Para conservar esa tradición y garantizar la seguridad de propios y visitantes, la administración municipal emitió el decreto 16-025 del 15 de marzo de 2016 con el que ordena a la Policía Nacional realizar controles respectivos a los establecimientos públicos aledaños al recorrido de las procesiones y actos religiosos. De igual forma, a esos establecimientos les quedó prohibida la venta de bebidas alcohólicas entre 24 y 27 de marzo.
Otra de las normas establecidas en restringir la circulación de vehículos en la plaza principal de esta localidad y en las rutas de las procesiones religiosas. El incumplimiento de medida conlleva a la inmovilización hasta por 24 horas y una multa que oscila entre uno y 10 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
La tradición de la Semana Mayor en este municipio del Cesar se desprende de la fe que profesaban muchos sandieganos que cada año viajaban al corregimiento de Valencia de Jesús, en jurisdicción de Valledupar, otro epicentro de las celebraciones de Semana Santa, para pagar sus mandas o promesas a la imagen del Nazareno. De ese grupo de Nazarenos que iban a Valencia una parte decidió hacer una celebración similar de Semana Santa en San Diego, que ya lleva más de medio siglo.
Andreina Bandera / EL PILÓN
[email protected]
Desde hace más de cincuenta años, en el municipio de San Diego, Cesar, celebran con devoción la Semana Santa; de lunes a miércoles santo los niños participan activamente en las actividades religiosas y de jueves a domingo de resurrección las celebraciones están a cargo de los adultos.
Desde hace más de cincuenta años, en el municipio de San Diego, Cesar, celebran con devoción la Semana Santa; de lunes a miércoles santo los niños participan activamente en las actividades religiosas y de jueves a domingo de resurrección las celebraciones están a cargo de los adultos.
Para conservar esa tradición y garantizar la seguridad de propios y visitantes, la administración municipal emitió el decreto 16-025 del 15 de marzo de 2016 con el que ordena a la Policía Nacional realizar controles respectivos a los establecimientos públicos aledaños al recorrido de las procesiones y actos religiosos. De igual forma, a esos establecimientos les quedó prohibida la venta de bebidas alcohólicas entre 24 y 27 de marzo.
Otra de las normas establecidas en restringir la circulación de vehículos en la plaza principal de esta localidad y en las rutas de las procesiones religiosas. El incumplimiento de medida conlleva a la inmovilización hasta por 24 horas y una multa que oscila entre uno y 10 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
La tradición de la Semana Mayor en este municipio del Cesar se desprende de la fe que profesaban muchos sandieganos que cada año viajaban al corregimiento de Valencia de Jesús, en jurisdicción de Valledupar, otro epicentro de las celebraciones de Semana Santa, para pagar sus mandas o promesas a la imagen del Nazareno. De ese grupo de Nazarenos que iban a Valencia una parte decidió hacer una celebración similar de Semana Santa en San Diego, que ya lleva más de medio siglo.
Andreina Bandera / EL PILÓN
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