Con la nueva forma de escoger personeros se esperaba que lo concejos municipales realizaran un concurso transparente y alejado de vicios politiqueros y burocráticos para complacer intereses oscuros, lo mismo se pensaba en la elección de contralores; sin embargo, en todo el país se presentaron escándalos y advertencias sobre irregularidades desde la escogencia de la […]
Con la nueva forma de escoger personeros se esperaba que lo concejos municipales realizaran un concurso transparente y alejado de vicios politiqueros y burocráticos para complacer intereses oscuros, lo mismo se pensaba en la elección de contralores; sin embargo, en todo el país se presentaron escándalos y advertencias sobre irregularidades desde la escogencia de la institución encargada de efectuar el examen, así como los criterios de los concejales para designar a estos funcionarios.
Pero el caso de Valledupar es el más vergonzoso, después de la batalla de acciones de tutela se continúo con la entrevista a los aspirantes, una de las etapas más delicadas del proceso; pero allí los concejales demostraron su verdadera cara, por muy mal que el señor Campo enfrentara ese crucial momento, no creo que mereciera esa humillante calificación; actualmente este tipo de audiencias son públicas al tratarse de cargos tan importantes y con unas competencias tan sensibles como la defensa y promoción de los Derechos Humanos, Derecho Internacional Humanitario, ejercer potestad disciplinaria propia de la Personería como lo consagra la Ley 734 del 2002, entre otras funciones que llegan al corazón del ciudadano.
Si no lo saben los señores concejales y estoy seguro que no lo saben, la entrevista a los aspirantes a Fiscal General de la Nación se transmite por el canal institucional, para que los colombianos tengan la oportunidad de escuchar las preguntas de los Honorables Magistrados de la Corte Suprema de Justicia y las respuesta de quien aspira a dirigir el máximo organismo instructor en materia penal en nuestro país, ahora se escudan los concejales en el aparente carácter subjetivo de la entrevista, en la vida nada es absoluto y la subjetividad se predica en la libertad de preguntar por diversos aspectos en una entrevista, pero la subjetividad no puede confundirse con arbitrariedad y por mucho que en una entrevista quien la dirige no esté de acuerdo con el entrevistado, la seriedad, convicción y preparación que demuestre el aspirante es determinante para la calificación, siendo así es imposible creer que el actual personero no superara los cinco puntos en esa entrevista.
Calificar al señor Alfonso Campo Martínez de la manera como lo hicieron es un acto casi que criminal, al igual que la elección del Contralor Municipal, quien aparece no sólo inscribiendo sonrientemente la candidatura del actual alcalde, sino que aporta una fuerte suma de dinero a esa campaña. Algo debe hacer la Procuraduría, establecer si en efecto las preguntas y respuesta en la entrevista del señor Campo merecía darle el resultado que obtuvo; por lo general el entrevistador debe tener una claridad conceptual igual o mejor que el entrevistado sobre el tema por el que se le pregunta, en este caso sería bueno que la Procuraduría indagara si los señores sabios de la Mesa Directiva del Concejo conocen a fondo las competencias propias de la Personería.
En un aparte del libro el General en su Laberinto está consignada una frase que siempre me ha gustado “Un Congreso jamás ha salvado una República”, en este caso podría decir un Concejo jamás ha salvado un municipio, es por ello señora Procuradora Regional que le corresponde poner orden ante semejante vulgaridad de este remedo de demócratas instalados en el Concejo Municipal.
Con la nueva forma de escoger personeros se esperaba que lo concejos municipales realizaran un concurso transparente y alejado de vicios politiqueros y burocráticos para complacer intereses oscuros, lo mismo se pensaba en la elección de contralores; sin embargo, en todo el país se presentaron escándalos y advertencias sobre irregularidades desde la escogencia de la […]
Con la nueva forma de escoger personeros se esperaba que lo concejos municipales realizaran un concurso transparente y alejado de vicios politiqueros y burocráticos para complacer intereses oscuros, lo mismo se pensaba en la elección de contralores; sin embargo, en todo el país se presentaron escándalos y advertencias sobre irregularidades desde la escogencia de la institución encargada de efectuar el examen, así como los criterios de los concejales para designar a estos funcionarios.
Pero el caso de Valledupar es el más vergonzoso, después de la batalla de acciones de tutela se continúo con la entrevista a los aspirantes, una de las etapas más delicadas del proceso; pero allí los concejales demostraron su verdadera cara, por muy mal que el señor Campo enfrentara ese crucial momento, no creo que mereciera esa humillante calificación; actualmente este tipo de audiencias son públicas al tratarse de cargos tan importantes y con unas competencias tan sensibles como la defensa y promoción de los Derechos Humanos, Derecho Internacional Humanitario, ejercer potestad disciplinaria propia de la Personería como lo consagra la Ley 734 del 2002, entre otras funciones que llegan al corazón del ciudadano.
Si no lo saben los señores concejales y estoy seguro que no lo saben, la entrevista a los aspirantes a Fiscal General de la Nación se transmite por el canal institucional, para que los colombianos tengan la oportunidad de escuchar las preguntas de los Honorables Magistrados de la Corte Suprema de Justicia y las respuesta de quien aspira a dirigir el máximo organismo instructor en materia penal en nuestro país, ahora se escudan los concejales en el aparente carácter subjetivo de la entrevista, en la vida nada es absoluto y la subjetividad se predica en la libertad de preguntar por diversos aspectos en una entrevista, pero la subjetividad no puede confundirse con arbitrariedad y por mucho que en una entrevista quien la dirige no esté de acuerdo con el entrevistado, la seriedad, convicción y preparación que demuestre el aspirante es determinante para la calificación, siendo así es imposible creer que el actual personero no superara los cinco puntos en esa entrevista.
Calificar al señor Alfonso Campo Martínez de la manera como lo hicieron es un acto casi que criminal, al igual que la elección del Contralor Municipal, quien aparece no sólo inscribiendo sonrientemente la candidatura del actual alcalde, sino que aporta una fuerte suma de dinero a esa campaña. Algo debe hacer la Procuraduría, establecer si en efecto las preguntas y respuesta en la entrevista del señor Campo merecía darle el resultado que obtuvo; por lo general el entrevistador debe tener una claridad conceptual igual o mejor que el entrevistado sobre el tema por el que se le pregunta, en este caso sería bueno que la Procuraduría indagara si los señores sabios de la Mesa Directiva del Concejo conocen a fondo las competencias propias de la Personería.
En un aparte del libro el General en su Laberinto está consignada una frase que siempre me ha gustado “Un Congreso jamás ha salvado una República”, en este caso podría decir un Concejo jamás ha salvado un municipio, es por ello señora Procuradora Regional que le corresponde poner orden ante semejante vulgaridad de este remedo de demócratas instalados en el Concejo Municipal.