Ojalá que no se cumplan los pronósticos del Ideam y los meses de octubre, noviembre y parte de diciembre sean los más lluviosos del año, como en las mejores épocas. Ya San Franco, no Ovalle, si no el de La Paz cumplió con un cuatro de octubre invernal y esperamos que San Rafael, el tupero […]
Ojalá que no se cumplan los pronósticos del Ideam y los meses de octubre, noviembre y parte de diciembre sean los más lluviosos del año, como en las mejores épocas. Ya San Franco, no Ovalle, si no el de La Paz cumplió con un cuatro de octubre invernal y esperamos que San Rafael, el tupero mayor, haga lo mismo el 24 cuando vayamos a saludarle y a pedirle, en esta oportunidad con una carretera asfaltada y una plaza bellamente remodelada gracias a la buena gestión del gobernador Luis Alberto Monsalvo que cumplió con la promesa hecha a los tuperos, que desde los tiempos de Jupa la esperaban, pues era ofrecimiento y mentira obligada de cuanto político iba a las fiestas patronales.
Ojalá Franco piense continuar esta obra rápidamente, este sí Franco el de Edna, la simpática Ia como le dicen sus más allegados y termine la carretera de El Porvenir que acerca a El Tupe o Los Tupes al Valle, queda a un brinquito y los visitantes le den vida a esa histórica y aguerrida población que sabemos, porque a bastante 24 hemos ido, que hacen unos deliciosos pasteles de gallina y puerco criollo, suculentos y aromáticos sancochos de chivo, carne de res, gallina o cerdo o todos unidos en un tetrafásico y exquisitos guisos de las mismas carnes o conejos adobados o adornados con el amigo del pueblo, ya sea de palitos o blanco, amarillos y dominicos de Los Encantos y yuca harinosa que a manos llenas brindan en cualquier casa, pero especialmente donde Manuela Molina, Tavo Márquez, Beatriz Villero o cualquier Becerra, Daza, Padilla, Suárez o Villero, pues todos son pródigos y atentos con quienes los visitan.
Ojalá San Francisco y San Rafael ayudados por Santo Tomás de Villanueva, la patillalera Virgen de Las Mercedes, la Virgen del Carmen de Manaure, la milagrosa molinera Virgen del Rosario, la Divina Pastora, Santa de la devoción de mi compadre Armando León Quintero y codacense hasta la cacha, de la Virgen del Perpetuo Socorro, la sandiegana por excelencia, la europea (léase Urumitera) Virgen de La Chiquinquirá y todo el terraplén de Santos que tiene nuestra religión católica a quienes adoramos y veneramos, duélale a quien le duela, comandado por Santo Ecce Homo, ese que se encuentra abandonado a sol y agua, irrespetado y olvidado y con un futuro incierto por culpa de los que profesan una religión diferente al cristianismo y que por lo que veo, le espera un futuro peor.
Retomo la idea, para que intercedan ante nuestro Dios y consiga que se enfríen las aguas del Pacífico y hayan torrenciales aguaceros en todo el mes de octubre, noviembre y diciembre y nuestros amigos agricultores y ganaderos vuelvan a sonreír, porque hoy parecen unos zombis por las angustias económicas que padecen viendo como no han podido sembrar y los hatos se disminuyen con las muertes de sus reses.
Ayer oí a Franco, el hijo de Sarita y Adalberto, exponer el proyecto de construir, ya como gobernador, un inmenso reservorio en el río Guatapurí y uno más pequeño en El Badillo, con un costo de $160 mil millones, cuarenta por año, que no es nada, es una cifra insignificante en relación con el beneficio que prestarán estas magníficas obras. Ojalá así sea y veamos a Jaime de la mano de Franco, superadas las diferencias electorales, realizando obras en esta bella, acogedora y pródiga ciudad a quien tanto le debemos. ¡Ojalá así sea!
Ojalá que no se cumplan los pronósticos del Ideam y los meses de octubre, noviembre y parte de diciembre sean los más lluviosos del año, como en las mejores épocas. Ya San Franco, no Ovalle, si no el de La Paz cumplió con un cuatro de octubre invernal y esperamos que San Rafael, el tupero […]
Ojalá que no se cumplan los pronósticos del Ideam y los meses de octubre, noviembre y parte de diciembre sean los más lluviosos del año, como en las mejores épocas. Ya San Franco, no Ovalle, si no el de La Paz cumplió con un cuatro de octubre invernal y esperamos que San Rafael, el tupero mayor, haga lo mismo el 24 cuando vayamos a saludarle y a pedirle, en esta oportunidad con una carretera asfaltada y una plaza bellamente remodelada gracias a la buena gestión del gobernador Luis Alberto Monsalvo que cumplió con la promesa hecha a los tuperos, que desde los tiempos de Jupa la esperaban, pues era ofrecimiento y mentira obligada de cuanto político iba a las fiestas patronales.
Ojalá Franco piense continuar esta obra rápidamente, este sí Franco el de Edna, la simpática Ia como le dicen sus más allegados y termine la carretera de El Porvenir que acerca a El Tupe o Los Tupes al Valle, queda a un brinquito y los visitantes le den vida a esa histórica y aguerrida población que sabemos, porque a bastante 24 hemos ido, que hacen unos deliciosos pasteles de gallina y puerco criollo, suculentos y aromáticos sancochos de chivo, carne de res, gallina o cerdo o todos unidos en un tetrafásico y exquisitos guisos de las mismas carnes o conejos adobados o adornados con el amigo del pueblo, ya sea de palitos o blanco, amarillos y dominicos de Los Encantos y yuca harinosa que a manos llenas brindan en cualquier casa, pero especialmente donde Manuela Molina, Tavo Márquez, Beatriz Villero o cualquier Becerra, Daza, Padilla, Suárez o Villero, pues todos son pródigos y atentos con quienes los visitan.
Ojalá San Francisco y San Rafael ayudados por Santo Tomás de Villanueva, la patillalera Virgen de Las Mercedes, la Virgen del Carmen de Manaure, la milagrosa molinera Virgen del Rosario, la Divina Pastora, Santa de la devoción de mi compadre Armando León Quintero y codacense hasta la cacha, de la Virgen del Perpetuo Socorro, la sandiegana por excelencia, la europea (léase Urumitera) Virgen de La Chiquinquirá y todo el terraplén de Santos que tiene nuestra religión católica a quienes adoramos y veneramos, duélale a quien le duela, comandado por Santo Ecce Homo, ese que se encuentra abandonado a sol y agua, irrespetado y olvidado y con un futuro incierto por culpa de los que profesan una religión diferente al cristianismo y que por lo que veo, le espera un futuro peor.
Retomo la idea, para que intercedan ante nuestro Dios y consiga que se enfríen las aguas del Pacífico y hayan torrenciales aguaceros en todo el mes de octubre, noviembre y diciembre y nuestros amigos agricultores y ganaderos vuelvan a sonreír, porque hoy parecen unos zombis por las angustias económicas que padecen viendo como no han podido sembrar y los hatos se disminuyen con las muertes de sus reses.
Ayer oí a Franco, el hijo de Sarita y Adalberto, exponer el proyecto de construir, ya como gobernador, un inmenso reservorio en el río Guatapurí y uno más pequeño en El Badillo, con un costo de $160 mil millones, cuarenta por año, que no es nada, es una cifra insignificante en relación con el beneficio que prestarán estas magníficas obras. Ojalá así sea y veamos a Jaime de la mano de Franco, superadas las diferencias electorales, realizando obras en esta bella, acogedora y pródiga ciudad a quien tanto le debemos. ¡Ojalá así sea!