“No hay cosa más bonita que sentirse uno con fe y tener devoción por cualquier cosa en la vida porque desde muy niño me he podido convencer que la Virgen del Carmen es mi Santa preferida”.
Citamos y hemos transcrito parte de la primera estrofa de la canción titulada ‘La Virgen del Carmen’, de la autoría de Emiliano Alcides Zuleta Díaz, ‘El gago de oro’, rey semiprofesional del Festival Vallenato, rey de reyes de la canción inédita en el mismo festival y rey de la nota picada en la música vallenata. Tema musical que viene a nuestra mente a propósito de las fiestas en honor de la Virgen del Carmen.

Esa canción fue incluida por los Hermanos Zuleta en el LP ‘Tierra de cantores’, la cual se constituyó con justificados méritos y con el paso de los años como himno oficial de esas fiestas sagradas para los conductores y navegantes de todo el mundo.
Con ese disco sucedió algo curioso, resulta que por su contenido y esperado impacto, estaba prevista su salida al mercado el 15 de julio de 1978, y por inconvenientes técnicos y con los coros solo pudo salir el 16 de agosto del mismo año, de tal manera que no tuvo esa canción de inmediato el éxito esperado, pues fue opacada por ‘El gallo fino’, de Edilberto Daza; ‘Rio Badillo’, de Octavio Daza; ‘No me guardes luto’, de Armando Zabaleta, y ‘Dios no me deja’, de Leandro Díaz. Mientras ‘Tierra de cantores’, de la autoría de Carlos Huertas, se convirtió en himno del Festival del Retorno que inició en Fonseca diez días después, así que el canto a la Virgen permaneció como león dormido hasta las fiestas un año después, en su honor y a partir de allí se puso de moda, y se quedó para siempre en la preferencia de todos los devotos y bebedores del 16 de julio.

El problema con los coros se presentó ante la imposibilidad de Juan Piña para desplazarse desde Medellín hasta Bogotá, por lo cual recomendó, como si fuera “llanta de repuesto” nada más y nada menos que al Joe Arroyo, quien junto a Wilson Saoco era cantante titular de la orquesta de Fruko.
Como lo dijimos alguna vez, Emilianito aceptó el cambio de inmediato, con Poncho la cosa fue distinta, la vaina parecía una locura, no lograba entender cómo podía un cantante salsero, de un día para otro volverse corista vallenato.

Aquello que cuando no hay perro se montea con gatos, permitió que el Joe hiciera los coros y el resultado fue espectacular, nadie más ha podido igualar el color, tesitura y alzada de su voz como lo hizo al interpretar esa canción, y en general en todo el LP sobre todo en ‘Rio Badillo’, donde hace el uno dos con Poncho con soberbio chorro de voz. No fue aquella la única vez que el cantó al lado de Emilianito, porque juntos grabaron ‘Soy el folclor’, cipote de merengue de la autoría del viejo Cujia incluido en uno de sus LP con ‘La verdad’, y también me contó Emilianito que grabaron ‘Por ella’, de Esteban Montaño, pero nunca ha salido a la luz, y permanece grabada en los estudios de la Sony Music.

Disfrutemos y escuchemos con la atención que se merece el merengue más completo que existe para rendir tributo a una Santa en Colombia, por su rima, riqueza narrativa, voz y nota picada, por eso ningún loquito se le mide a cantarla.
No tiene la Virgen del Carmen como pagarle al hijo mayor del Viejo Emiliano y Carmen Díaz por semejante homenaje.

@Nene_AcostaM