Como Carlos Darío Ibarra Gutiérrez, oriundo del municipio de El Copey, Cesar, fue identificado uno de los cuatro militares muertos en el atentado contra un helicóptero Black Hawk UH-60 adscrito a la Brigada Móvil No. 33 del Ejército, en hechos ocurridos el lunes en zona rural de Teorema, Norte de Santander. Los militares se encontraban realizando acompañamiento […]
Como Carlos Darío Ibarra Gutiérrez, oriundo del municipio de El Copey, Cesar, fue identificado uno de los cuatro militares muertos en el atentado contra un helicóptero Black Hawk UH-60 adscrito a la Brigada Móvil No. 33 del Ejército, en hechos ocurridos el lunes en zona rural de Teorema, Norte de Santander.
Los militares se encontraban realizando acompañamiento a los operarios de Ecopetrol que intervienen el Oleoducto Caño Limón-Coveñas en esa zona del norte del país.
Los otros uniformados que perdieron la vida en el incidente fueron identificados en la madrugada de este martes, se trata del cabo primero Gabriel Ignacio Mejía Bermúdez y los soldados Edison Blanco Zapata y Franklin Gamboa Monsalve.
El general Ernesto Maldonado, segundo comandante del Ejército y comandante del Estado Mayor Conjunto, confirmó que la aeronave cayó en un campo minado cuando desembarcaba tropas que apoyarían en tierra las operaciones militares que se desarrollan en la zona.
“Según las primeras informaciones, los explosivos fueron colocados por terroristas de la cuadrilla resistencia del Catatumbo de las Farc, en un sitio donde las tropas realizaban maniobras ofensivas para apoyar a las unidades en tierra, que desde hace varios días realizan operaciones militares”, dijo.
El Pais.com.co informó que tras el impacto, la aeronave quedó partida en dos. Según las primeras versiones 15 militares iban en el helicóptero.
Los hechos, de acuerdo con la versión del personero municipal, Everth Payares, “ocurrieron hacia la una y media de esta tarde, cuando se escuchó una fuerte explosión y luego disparos de fusil, es una zona de alta presencia subversiva”.
Tras la explosión los militares fueron atacados con fusiles de largo alcance, de acuerdo con la información de las autoridades.
Como Carlos Darío Ibarra Gutiérrez, oriundo del municipio de El Copey, Cesar, fue identificado uno de los cuatro militares muertos en el atentado contra un helicóptero Black Hawk UH-60 adscrito a la Brigada Móvil No. 33 del Ejército, en hechos ocurridos el lunes en zona rural de Teorema, Norte de Santander. Los militares se encontraban realizando acompañamiento […]
Como Carlos Darío Ibarra Gutiérrez, oriundo del municipio de El Copey, Cesar, fue identificado uno de los cuatro militares muertos en el atentado contra un helicóptero Black Hawk UH-60 adscrito a la Brigada Móvil No. 33 del Ejército, en hechos ocurridos el lunes en zona rural de Teorema, Norte de Santander.
Los militares se encontraban realizando acompañamiento a los operarios de Ecopetrol que intervienen el Oleoducto Caño Limón-Coveñas en esa zona del norte del país.
Los otros uniformados que perdieron la vida en el incidente fueron identificados en la madrugada de este martes, se trata del cabo primero Gabriel Ignacio Mejía Bermúdez y los soldados Edison Blanco Zapata y Franklin Gamboa Monsalve.
El general Ernesto Maldonado, segundo comandante del Ejército y comandante del Estado Mayor Conjunto, confirmó que la aeronave cayó en un campo minado cuando desembarcaba tropas que apoyarían en tierra las operaciones militares que se desarrollan en la zona.
“Según las primeras informaciones, los explosivos fueron colocados por terroristas de la cuadrilla resistencia del Catatumbo de las Farc, en un sitio donde las tropas realizaban maniobras ofensivas para apoyar a las unidades en tierra, que desde hace varios días realizan operaciones militares”, dijo.
El Pais.com.co informó que tras el impacto, la aeronave quedó partida en dos. Según las primeras versiones 15 militares iban en el helicóptero.
Los hechos, de acuerdo con la versión del personero municipal, Everth Payares, “ocurrieron hacia la una y media de esta tarde, cuando se escuchó una fuerte explosión y luego disparos de fusil, es una zona de alta presencia subversiva”.
Tras la explosión los militares fueron atacados con fusiles de largo alcance, de acuerdo con la información de las autoridades.