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Columnista - 8 junio, 2015

Exportando pobreza

Entre los años 70 y 80, era común escuchar: “Vamos para Venezuela, allá si hay futuro”, “Allá la plata sí rinde, el estado da todo”, “En las carreteras no se paga peaje”, incluso el maestro Rafael Escalona en su célebre canción El chevrolito cantó “Tengo un chevrolito que compré pa’ ir a Marcaibo a negociá” […]

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Entre los años 70 y 80, era común escuchar: “Vamos para Venezuela, allá si hay futuro”, “Allá la plata sí rinde, el estado da todo”, “En las carreteras no se paga peaje”, incluso el maestro Rafael Escalona en su célebre canción El chevrolito cantó “Tengo un chevrolito que compré pa’ ir a Marcaibo a negociá” y así como Escalona, muchos colombianos se dejaron tentar por la boyante economía bolivariana, que llegó a manejar un precio de 18 pesos por Bolívar, todo por las ventas de petróleo que catapultaron al país como una potencia regional, la llamada bonaza, cuando Maicao se convirtió en la gran vitrina comercial, al recibir a miles de venezolanos que llegaban a comprar mercancías de contrabando que entraban por Aruba y luego Portete y Puerto López, en La Guajira.

Esta semana Nicolás Maduro dijo que Colombia exportaba pobreza, haciendo referencia a los 5,5 millones de Colombianos que viven allá y que en su gran mayoría se fueron en esa época ¡Cómo cambian los tiempos!, de aquella Venezuela floreciente, con grandes expectativas, no queda nada. Presidente Maduro, si usted hace hoy una encuesta entre los colombianos para saber cuántos desearían irse a vivir a su país, le aseguro que solo un 1% le responderá que sí y las razones hablan por sí solas: su país está dominado por un régimen mafioso que restringe las libertades y encarcela a los líderes políticos que piensen diferente; Venezuela puede tener muchos encantos naturales como el Salto del Ángel, la isla Margarita, los Llanos de Apure y muchos más, pero los colombianos no queremos ir allá porque no hay comida, el desabastecimiento es brutal, aunque no lo quiera reconocer; porque la inseguridad es la más alta del mundo y la inflación ronda el 70%; tampoco hay empleo, ni las oportunidades de antes, cuando aquellos colombianos, que hoy viven un infierno porque son perseguidos, deportados y señalados, llegaron buscando una nueva vida y que además, están abandonados por su propio Estado, porque el Presidente Santos le teme a usted, por su ramplonería y patanería a la hora de gobernar; los colombianos no quieren ir a Venezuela, porque se rehúsan a ser gobernados por Diosdado Cabello, acusado de traqueto con pruebas reales.

Los colombianos nos quedamos aquí, promoviendo un nuevo futuro, buscando la paz que tanto anhelamos, esa que Chávez y usted, tanto han tratado de torpedear, apoyando a las Farc. Por si no lo sabe nuestra economía crece a un ritmo del 4 %, con violencia y todo, al presente, nuestro país junto a Chile, Perú y Brasil son las economías mejor referenciadas de Latinoamérica; un país que exporta mucho más que pobreza, exporta un sinnúmero de productos, entre ellos ganado a su propio país, que no paga y todavía tiene una deuda con los gremios colombianos, además de café, flores, frutas, minerales, etc., y algo más significativo, exportamos talento humano y creatividad en todos los ámbitos, solo por citar algunos ejemplos: Sofía Vergara, Luis Alberto Moreno, Shakira, Paulina Vega, Nairo Quintana, Rodolfo Llinás, James Rodríguez, Patricia Janiot, Orlando Duque, Caterine Ibargüen y muchos más colombianos que cada día trabajan por un mejor país. Esto y mucho más es lo que exportamos, ojalá Venezuela pueda exportar algo más que petróleo.

@JACOBOSOLANOC

Columnista
8 junio, 2015

Exportando pobreza

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Jacobo Solano Cerchiaro

Entre los años 70 y 80, era común escuchar: “Vamos para Venezuela, allá si hay futuro”, “Allá la plata sí rinde, el estado da todo”, “En las carreteras no se paga peaje”, incluso el maestro Rafael Escalona en su célebre canción El chevrolito cantó “Tengo un chevrolito que compré pa’ ir a Marcaibo a negociá” […]


Entre los años 70 y 80, era común escuchar: “Vamos para Venezuela, allá si hay futuro”, “Allá la plata sí rinde, el estado da todo”, “En las carreteras no se paga peaje”, incluso el maestro Rafael Escalona en su célebre canción El chevrolito cantó “Tengo un chevrolito que compré pa’ ir a Marcaibo a negociá” y así como Escalona, muchos colombianos se dejaron tentar por la boyante economía bolivariana, que llegó a manejar un precio de 18 pesos por Bolívar, todo por las ventas de petróleo que catapultaron al país como una potencia regional, la llamada bonaza, cuando Maicao se convirtió en la gran vitrina comercial, al recibir a miles de venezolanos que llegaban a comprar mercancías de contrabando que entraban por Aruba y luego Portete y Puerto López, en La Guajira.

Esta semana Nicolás Maduro dijo que Colombia exportaba pobreza, haciendo referencia a los 5,5 millones de Colombianos que viven allá y que en su gran mayoría se fueron en esa época ¡Cómo cambian los tiempos!, de aquella Venezuela floreciente, con grandes expectativas, no queda nada. Presidente Maduro, si usted hace hoy una encuesta entre los colombianos para saber cuántos desearían irse a vivir a su país, le aseguro que solo un 1% le responderá que sí y las razones hablan por sí solas: su país está dominado por un régimen mafioso que restringe las libertades y encarcela a los líderes políticos que piensen diferente; Venezuela puede tener muchos encantos naturales como el Salto del Ángel, la isla Margarita, los Llanos de Apure y muchos más, pero los colombianos no queremos ir allá porque no hay comida, el desabastecimiento es brutal, aunque no lo quiera reconocer; porque la inseguridad es la más alta del mundo y la inflación ronda el 70%; tampoco hay empleo, ni las oportunidades de antes, cuando aquellos colombianos, que hoy viven un infierno porque son perseguidos, deportados y señalados, llegaron buscando una nueva vida y que además, están abandonados por su propio Estado, porque el Presidente Santos le teme a usted, por su ramplonería y patanería a la hora de gobernar; los colombianos no quieren ir a Venezuela, porque se rehúsan a ser gobernados por Diosdado Cabello, acusado de traqueto con pruebas reales.

Los colombianos nos quedamos aquí, promoviendo un nuevo futuro, buscando la paz que tanto anhelamos, esa que Chávez y usted, tanto han tratado de torpedear, apoyando a las Farc. Por si no lo sabe nuestra economía crece a un ritmo del 4 %, con violencia y todo, al presente, nuestro país junto a Chile, Perú y Brasil son las economías mejor referenciadas de Latinoamérica; un país que exporta mucho más que pobreza, exporta un sinnúmero de productos, entre ellos ganado a su propio país, que no paga y todavía tiene una deuda con los gremios colombianos, además de café, flores, frutas, minerales, etc., y algo más significativo, exportamos talento humano y creatividad en todos los ámbitos, solo por citar algunos ejemplos: Sofía Vergara, Luis Alberto Moreno, Shakira, Paulina Vega, Nairo Quintana, Rodolfo Llinás, James Rodríguez, Patricia Janiot, Orlando Duque, Caterine Ibargüen y muchos más colombianos que cada día trabajan por un mejor país. Esto y mucho más es lo que exportamos, ojalá Venezuela pueda exportar algo más que petróleo.

@JACOBOSOLANOC