Jeiner Blanco Laguna, de 23 años, es el soldado profesional, natural de Valledupar que vivió la zozobra por el ataque perpetrado por la cuarta comisión de la columna móvil ‘Miller Perdomo’ de las Farc sobre las 11:30 de la noche del martes. Según lo dio a conocer a los medios de comunicación, Mery Batista Rangel, […]
Jeiner Blanco Laguna, de 23 años, es el soldado profesional, natural de Valledupar que vivió la zozobra por el ataque perpetrado por la cuarta comisión de la columna móvil ‘Miller Perdomo’ de las Farc sobre las 11:30 de la noche del martes.
Según lo dio a conocer a los medios de comunicación, Mery Batista Rangel, madre de Blanco Laguna que lleva tres años en el Ejército, ella se enteró la noticia la mañana de ayer, mientras escuchaba radio; “me llamó la atención porque escuché el nombre del pueblo donde está Jeiner y de inmediato salí corriendo a llamarlo, pero él no me contestó. Llamé a varios compañeros de él y ninguno me contestaba las llamadas, por lo que me preocupé. Al rato, me llamó un Teniente diciendo que mi hijo era uno de los soldados que había muerto durante el combate, yo no supe qué hacer cuando ese señor me dijo eso”, expresó la madre de Jeiner.
Batista Rangel indicó que a los cinco minutos de haber hablado con el Teniente, recibió la llamada que le devolvería la esperanza; era Jeiner para decirle que no se preocupara que él estaba vivo y bien. “Cuando ya yo lo hacía muerto, mi hijo me decía que a él no le había pasado nada, que estaba estropeado pero no le había pasado nada”, expresó.
“Yo en muchas ocasiones le había dicho que se cuidara y que le orara mucho a Dios, porque anteriormente él me había contado que la situación por allá estaba pesada; por eso le pido que se retire y que se encomiende a Dios que siempre lo va a librar del peligro”, concluyó Mery Batista.
Durante este ataque, diez militares murieron en la vereda La Esperanza, del corregimiento de Timba, en el Cauca, donde según lo informó el General Mario Valencia, comandante de la Tercera División del Ejército, los uniformados fueron atacados con artefactos explosivos, granadas y armas de fuego.
El oficial agregó que las tropas de la Brigada Móvil 17 de la Fuerza de Tarea Apolo del Ejército, que opera en esta región, realizaban operaciones de control territorial en el lugar donde fueron atacados.
Redacción Judicial / EL PILÓN
Jeiner Blanco Laguna, de 23 años, es el soldado profesional, natural de Valledupar que vivió la zozobra por el ataque perpetrado por la cuarta comisión de la columna móvil ‘Miller Perdomo’ de las Farc sobre las 11:30 de la noche del martes. Según lo dio a conocer a los medios de comunicación, Mery Batista Rangel, […]
Jeiner Blanco Laguna, de 23 años, es el soldado profesional, natural de Valledupar que vivió la zozobra por el ataque perpetrado por la cuarta comisión de la columna móvil ‘Miller Perdomo’ de las Farc sobre las 11:30 de la noche del martes.
Según lo dio a conocer a los medios de comunicación, Mery Batista Rangel, madre de Blanco Laguna que lleva tres años en el Ejército, ella se enteró la noticia la mañana de ayer, mientras escuchaba radio; “me llamó la atención porque escuché el nombre del pueblo donde está Jeiner y de inmediato salí corriendo a llamarlo, pero él no me contestó. Llamé a varios compañeros de él y ninguno me contestaba las llamadas, por lo que me preocupé. Al rato, me llamó un Teniente diciendo que mi hijo era uno de los soldados que había muerto durante el combate, yo no supe qué hacer cuando ese señor me dijo eso”, expresó la madre de Jeiner.
Batista Rangel indicó que a los cinco minutos de haber hablado con el Teniente, recibió la llamada que le devolvería la esperanza; era Jeiner para decirle que no se preocupara que él estaba vivo y bien. “Cuando ya yo lo hacía muerto, mi hijo me decía que a él no le había pasado nada, que estaba estropeado pero no le había pasado nada”, expresó.
“Yo en muchas ocasiones le había dicho que se cuidara y que le orara mucho a Dios, porque anteriormente él me había contado que la situación por allá estaba pesada; por eso le pido que se retire y que se encomiende a Dios que siempre lo va a librar del peligro”, concluyó Mery Batista.
Durante este ataque, diez militares murieron en la vereda La Esperanza, del corregimiento de Timba, en el Cauca, donde según lo informó el General Mario Valencia, comandante de la Tercera División del Ejército, los uniformados fueron atacados con artefactos explosivos, granadas y armas de fuego.
El oficial agregó que las tropas de la Brigada Móvil 17 de la Fuerza de Tarea Apolo del Ejército, que opera en esta región, realizaban operaciones de control territorial en el lugar donde fueron atacados.
Redacción Judicial / EL PILÓN