En los últimos dos años la Policía en el Cesar ha recibido más de 300 motocicletas y 100 vehículos necesarios para garantizar la seguridad de los vallenatos y cesarenses. En ese mismo lapso de tiempo a varias poblaciones del departamento les han entregado obras de gran impacto social: colegios, vías, centros de salud, parques, entre otras.

Son dotaciones y obras que se necesitan, pero que deben tener asegurada su vida útil. ¿Cuál es la vida útil de los vehículos que usa la Policía? ¿Le hacen el mantenimiento y le dan el uso indicado? Lo mismo pasa con las obras: ¿Después que son entregadas, quién responde por ellas?

Hace más de ocho años, con dineros de las regalías se construyeron cerca de 20 polideportivos en varios municipios, las que incluso antes de inaugurar ya estaban deterioradas. Este proyecto fue ejecutado con un error, no se estableció de dónde vendrían los recursos para su mantenimiento.

Lo mismo puede pasar, si no toman las medidas del caso, con las numerosas obras que este año recibirá la comunidad en los distintos sitios de la geografía cesarense. Ayer en Valledupar, aprovechando la visita del presidente Juan Manuel Santos, inauguraron la plaza del barrio Doce de Octubre y el Megacolegio Andrés Escobar Escobar.

La cancha de este sector de Valledupar costó 1.300 millones de pesos que vinieron del Departamento para la Prosperidad Social –DPS-. Aunque algunos vecinos y usuarios de la conocida cancha dicen que aún falta terminar la obra, ¿quién se encargará de su mantenimiento?

No queremos que en cinco meses esta importante obra que ofrece recreación a los vallenatos, esté deteriorada y sin dolientes. La elegante y moderna cancha en grama sintética, los drenajes, el cerramiento y la malla contra impacto que instalaron, requieren mantenimiento.

Lo ideal es que Indupal no se desconecte de la obra y junto con la comunidad usuaria conformen un comité cívico o en su defecto la misma veeduría ciudadana que crearon con ocasión de la ejecución de la obra, si es que la crearon.

De todas maneras, lo importante aquí es que esta cancha sintética, así como la que pronto inaugurará la administración departamental en el barrio Las Flores, se conserve y no sean flor de un día.

Bastante dinero que se invirtieron en ellas para que no sean valoradas como debe ser.