El pasado 10 de septiembre fue aplazada la primera audiencia de juicio contra Jaime Blanco Maya, como presunto determinador del homicidio del contratista de la multinacional Drummond, Hugo Manuel Guerra Cabrera y su acompañante Wilfrido Javier Coronado Jiménez.

El crimen se remonta al 12 de mayo de 2000, cuando los dos hombres que tenían cuatro días desaparecidos fueron encontrados en una fosa común en un potrero de la finca La Chiquita, zona rural de Becerril, en el centro del Cesar. Los cadáveres estaban desmembrados y en la mano de Guerra Cabrera, había un papel con el nombre de Jaime Blanco Maya.

El papelito no fue prueba suficiente para aclarar el homicidio, pero si lo fue la declaración el exparamilitar John Jairo Esquivel Cuadrado, alias ‘El Tigre’, quien confesó ante un fiscal de derechos humanos que sus hombres del frente ‘Juan Andrés Álvarez’ de las AUC, fueron quienes cometieron el asesinato por solicitud de Jaime Blanco Maya.

Hipótesis

Hugo Guerra Cabrera, para la época de los hechos era quien administraba el casino encargado de la alimentación de los empleados de Drummond en La Loma (Cesar), y el objetivo Blanco Maya era quitarlo de su camino para quedarse con el contrato en la multinacional, como efectivamente lo hizo tras el asesinato del contratista.

En audiencia de juicio oral programada para el próximo 19 de noviembre, alias ‘El Tigre’ deberá reafirmar los señalamientos que hizo contra el hermano del Contralor General de la Nación, Egdardo Maya Villazón.

La diligencia se cumplirá ante el Juzgado Tercero Penal del Circuito de Valledupar, despacho al que fue asignado el proceso, bajo la Ley 600 (antiguo sistema penal acusatorio).

El otro crimen

Jaime Blanco Maya, se encuentra privado de la libertad en la Cárcel La Picota de Bogotá, donde paga una condena de 38 años de prisión que le impuso el Juzgado Once Especializado de la OIT de Bogotá, por el homicidio de los sindicalistas de Drummond, Valmore Locarno y Víctor Hugo Oscarsita.

Locarno y Oscasita, presidente y vicepresidente del sindicato de Sintraminergética, fueron asesinados el 12 de marzo de 2001, en jurisdicción del municipio de Bosconia, Cesar, luego que paramilitares interceptaran el bus donde se movilizaban.

Los sindicalistas acababan de salir de reunión con los directivos de la multinacional Drummond para exigirles una solución al problema de la mala calidad de los alimentos que ofrecía la empresa ISA de propiedad de Jaime Blanco Maya, pues era inminente un cese de actividades por parte de los trabajadores de la mina

A Valmore Locarno lo mataron en el lugar que fue interceptado el bus, mientras que a Víctor Orcasita los paras lo condujeron hasta una bodega en donde estuvo por varias horas en poder de Óscar Ospino Pacheco, alias ‘Tolemaida’, jefe del frente ‘Juan Andrés Álvarez’ de las Auc.

Posteriormente, su cadáver fue hallado con tres impactos de bala en la cabeza.

Por Redacción Judicial / EL PILÓN