La orden de destruir la vivienda en ruinas que generaba inseguridad en el sector, fue dada por el Presidente Santos.
La expectativa era que el Presidente Juan Manuel Santos llegara hasta el barrio Cañaguate a dirigir el operativo de destruir la casa en ruinas que servía de guarida a drogadictos y delincuentes, así que se dispuso de un fuerte dispositivo de seguridad, pero al final por motivos de agenda presidencial, fue cancelado debido a que el mandatario debía llegar a la Plaza del Primero de Mayo a su cierre de campaña.
De todas formas, personal de la Policía cumplió la orden del Presidente y derribó dicho inmueble y de esta forma recuperar la tranquilidad de la zona, debido a que según los vecinos allí se escondían los drogadictos y atracadores, lo que hacía el sector inseguro.
Con una retroexcavadora, fue derribada la mole de concreto de lo que era una de las viviendas localizadas en la calle 13A Número 5-46 del barrio Cañaguate, al norte de Valledupar, donde su propia dueña y los vecinos, celebraron la decisión de haber ordenado echar a tierra las paredes que servían de escondite a los malhechores.
Allí se metían jóvenes, hombres y mujeres a consumir sustancias psicoactivas y a realizar actos obscenos, situación que mantenían preocupados a los residentes del sector, que no veían la hora en que la propietaria construyera o vendiera en ese lote que estaba abandonado desde hace unos cuatro años.
“Mi mamá ordenó derribarla”
Ana Milena Daza, hija de la propietaria del inmueble, quien se encontraba en el lugar, expresó su nostalgia por la destrucción de las paredes, pero señaló “estoy tranquila y me gusta lo que ha pasado, admito que es un sitio de encuentro de los delincuentes, razón por la cual estamos contribuyendo con la seguridad de los vallenatos. Mi mamá autorizó su demolición por el peligro inminente que representaba a los vecinos y a quienes ocasionalmente pasaban por ese sector.
Por Abdel Martínez Pérez
La orden de destruir la vivienda en ruinas que generaba inseguridad en el sector, fue dada por el Presidente Santos.
La expectativa era que el Presidente Juan Manuel Santos llegara hasta el barrio Cañaguate a dirigir el operativo de destruir la casa en ruinas que servía de guarida a drogadictos y delincuentes, así que se dispuso de un fuerte dispositivo de seguridad, pero al final por motivos de agenda presidencial, fue cancelado debido a que el mandatario debía llegar a la Plaza del Primero de Mayo a su cierre de campaña.
De todas formas, personal de la Policía cumplió la orden del Presidente y derribó dicho inmueble y de esta forma recuperar la tranquilidad de la zona, debido a que según los vecinos allí se escondían los drogadictos y atracadores, lo que hacía el sector inseguro.
Con una retroexcavadora, fue derribada la mole de concreto de lo que era una de las viviendas localizadas en la calle 13A Número 5-46 del barrio Cañaguate, al norte de Valledupar, donde su propia dueña y los vecinos, celebraron la decisión de haber ordenado echar a tierra las paredes que servían de escondite a los malhechores.
Allí se metían jóvenes, hombres y mujeres a consumir sustancias psicoactivas y a realizar actos obscenos, situación que mantenían preocupados a los residentes del sector, que no veían la hora en que la propietaria construyera o vendiera en ese lote que estaba abandonado desde hace unos cuatro años.
“Mi mamá ordenó derribarla”
Ana Milena Daza, hija de la propietaria del inmueble, quien se encontraba en el lugar, expresó su nostalgia por la destrucción de las paredes, pero señaló “estoy tranquila y me gusta lo que ha pasado, admito que es un sitio de encuentro de los delincuentes, razón por la cual estamos contribuyendo con la seguridad de los vallenatos. Mi mamá autorizó su demolición por el peligro inminente que representaba a los vecinos y a quienes ocasionalmente pasaban por ese sector.
Por Abdel Martínez Pérez